Un verdadero amor. 8a parte.

💘1472

Capítulo 1472

Tres chicas más se unieron a la pelea y Yeineth dijo con burla: "¿Por qué no atacan todas a la vez para que pueda acabar rápidamente y volver a disfrutar de un buen bañito?"
No les tenía miedo, aunque sabía que debía tomárselas en serio. Cuando una chica extendió la mano para agarrarla del cabello, Yeineth la esquivó y soltó a Erin. Debía concentrarse en la pelea.

"Yeineth, déjame ayudarte. ¡Perras, váyanse al infierno!"
Gritó Hilda corriendo hacia las chicas. Incluso asustada como estaba, todavía quería ayudar a su amiga, ya que Yeineth fue la primera en aceptarla, y sería una ingrata si no la ayudara cuando estaba en problemas.

"¡Gorda! ¿Quieres que te den una paliza?"
La pelea de las chicas dejó la piscina hecha un caos.

Las demás chicas que no estaban involucradas abandonaron la escena de inmediato.

Yeineth frunció el ceño al ver a Hilda siendo empujada por las otras chicas, ya que ahora tenía que pelear y proteger a Hilda al mismo tiempo.

Se estaba cansando de toda aquella estupidez. Ella sabía bien cómo pelear, pero era difícil usar sus habilidades en una situación tan caótica.

En medio del alboroto, a una chica le arrancaron el sostén y a otra le quitaron las bragas. Aquella piscina era una auténtica locura, la pelea más disparatada en la que Yeineth se había visto envuelta. Ciertamente pensó que era más fácil luchar contra hombres, ya que nunca usaban trucos tan barriobajeros. Con ellos, era pura fuerza y habilidades.

"¿Qué está pasando aquí?"
La voz de un hombre llegó de repente. Algunas chicas inmediatamente se cubrieron los pechos y se hundieron en el agua.

Yeineth levantó la cabeza y vio a Bradley de pie junto a la piscina con una cara de desprecio.

"Bueno, has llegado en el momento justo".
Yeineth se burló mientras se colocaba el bañador como si nada. A ella parecía que no le afectaba la repentina aparición de Bradley, como a las otras chicas.

"Bradley, mira lo que ha hecho esta loca. ¡Ha tratado de golpearnos!"
Dijo Erin señalando a Yeineth. Eran las dos únicas chicas que no habían ocultado sus cuerpos bajo el agua. Erin estaba muy orgullosa de sus enormes pechos y los mostraba deliberadamente.

Él ignoró a Erin y le preguntó a Yeineth: "¿Estás diciendo que no debería haber venido?"

Bradley había escuchado toda la pelea desde fuera y decidió entrar por si las cosas se salían de madre.

Realmente admiraba el coraje de Yeineth. Definitivamente era su tipo y ahora estaba más interesado en ella que nunca.

"Oh, ¿así que pensaste que necesitaba ayuda?"
Preguntó Yeineth fríamente. No necesitaba su atención y quería mandarlo a la mierda.

"No, no es eso, creo que fue una buena pelea".
Bradley curvó los labios al ver la ira en su rostro.

"Sí, lo fue... Hasta que apareciste".
Yeineth salió de la piscina lentamente y, al pasar junto a Bradley, lo miró con desdén. Luego se fue sin volver la vista atrás.

'¿Entonces este es el galán de la escuela? No está a la altura de otros hombres que yo he visto. Hyun, JungMin e incluso Lucas son mucho más guapos que él. Me pregunto qué verán las chicas en él para clasificarlo como el guapo de la escuela', pensó.

Bradley sonrió y no paró a Yeineth. Era una chica increíble y, aunque era muy mal hablada, peleaba muy bien. Sabía que ella no era la chica callada y tranquila que parecía en las clases, y estaba ansioso por descubrir su verdadero rostro tras la máscara.

"Bradley, ¿por qué no me hablas?"
Erin se mordió el labio inferior y golpeó el agua, agitada.

'¿Cómo pudo esa perra atraer su atención tan fácilmente? ¡He estado persiguiendo a Bradley durante todo un semestre, y ahora me trata tan fríamente!', pensó.

"Erin, me has dejado impresionado".
Bradley lanzó una mirada seria a Erin antes de darse la vuelta y marcharse. Al ver su figura desaparecer, las chicas en la piscina empezaron a lamentarse:

"¡Maldita sea! Nos vio pelear como locas. ¿Qué vamos a hacer?"

"¡No! ¡Estoy jodida!"

"¿Me ha visto desnuda?"

"¡Oh Dios mío!"

"¡Esto es tan humillante! ¿Cómo se supone que voy a mirarlo ahora a la cara".

Se quejaron arrepentidas, preguntándose cómo iban a mostrarse ante Bradley después de aquella escena de barrio bajo y sucio. Debían volver a mostrarle su lado bueno de alguna manera.

"Yein, tienes rasguños en la cara. ¡Te podrían quedar cicatrices! Y también tienes heridas en el cuerpo. Iré a la tienda más cercana a ver si tienen algo para curarte".
Dijo Hilda preocupada. Ella también estaba herida, pero ya estaba acostumbrada.

"No es necesario. Estoy bien. Estos rasguños desaparecerán en un par de días".
Aseguró. Para un miembro de una pandilla como era ella, hacerse daño era algo habitual y, además, unos pocos rasguños no eran nada en comparación con las heridas que había recibido cuando se había involucrado en peleas callejeras.

"Lo siento. Fue todo culpa mía".
Se lamentó Hilda mientras empezaban a formarse lágrimas en sus ojos.

"No tuvo nada que ver contigo. Me odian a mí. De todos modos, no le des más vueltas. Vamos a dar un paseo".
Yeineth se había puesto ropa deportiva y planeaba ir a escalar montañas. El paisaje era muy hermoso allí y no quería perderse la vista desde la cima.

"¡Vale! Espera un minuto. Voy a cambiarme".
Hilda no pudo evitar sonreír entre lágrimas y fue al vestuario para cambiarse. Realmente era una chica muy inocente.

Yeineth echó un vistazo a su teléfono y forzó una sonrisa amarga. Todavía no tenía ningún mensaje ni llamada de Lucas y, aunque no debió haber puesto ninguna esperanza, no pudo evitar sentirse decepcionada.

En ese hermoso lugar, Yeineth estaba pasando en general un momento maravilloso y no quería que nada la pusiera de mal humor. El único inconveniente era que tenía que lidiar con Erin todo el tiempo, que no desperdiciaba ni una sola oportunidad de provocarla, lo que realmente estaba empezando a molestarle.