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Capítulo 1561

"SunMin, estoy aquí".
Con el uniforme del ejército puesto, KyuJong lucía intimidante, pero guapo; agresivo, pero tranquilo; diferente, pero sin sobresalir entre los invitados.

"Bien, perfecto. Necesito tu ayuda. Acércate a esos tipos que están junto a la mesa y tómate unas copas con ellos, puesto que ya bebí demasiado y no creo que pueda beber otra gota".
Dijo SunMin mientras presionaba su sien. De verdad se había excedido ese día.

"Está bien, déjame encargarme de esto".
Como Mayor General, aunque no le gustaba, era bueno para socializar, ya que le era muy fácil tratar con todo tipo de personas.

"Oye, espera. ¡No, no puedes beber mucho!"
Dijo HongKi de golpe al recordar que él acababa de escapar de la muerte hacía algunos meses, por lo que era posible que aún no se hubiera recuperado por completo, así que todavía tenía que vigilar su consumo de alcohol.

"No te preocupes; conozco mis límites".
Él le dedicó una sonrisa tranquilizadora, puesto que sabía que estaba preocupado por su salud, razón por la que realmente no se arriesgaría a participar en desafíos de beber con otros chicos esa noche.

"¿Puedes hacerlo? Si no, pediré que JungMin lo haga. ¿Dónde está él? Ese idiota se fue en un abrir y cerrar de ojos".
SunMin apestaba a alcohol y su rostro estaba completamente sonrojado. Mientras hacía todo lo posible por mantenerse erguido, su borrachera se evidenciaba en la forma en cómo caminaba, dado que realmente había bebido mucho esa noche.

"Iré a buscarlo y lo traeré de vuelta".
Dijo HongKi con una sonrisa maliciosa. Por el bien de su KyuJong, no tuvo más remedio que sacrificar a JungMin, quien seguramente se estaba escondiendo en algún lugar, pero mejor que fuera él en vez de su esposo.

"Está bien, Kikí, yo puedo hacerlo. Como dije, si siento que estoy cerca de mi límite, dejaré de beber, ¿de acuerdo?"
Él lo detuvo, ya que era raro que SunMin le pidiera un favor y no quería decepcionarlo, mucho menos en ese momento en que más lo necesitaba. ¡Ese hombre estaba completamente acabado!

"¡Bueno! Entonces, iré a buscar a Saeng".
HongKi cedió ante su insistencia, puesto que no quería ser aguafiestas. Sin ir más lejos, tan pronto como Saeng llegó a la mansión, Hyun lo condujo hacia un lugar secreto donde lo besó apasionadamente. Podía oler la pólvora en el aire y los fuegos artificiales que estaban a punto de ser lanzados.

"Oye... Hyun, ¿qué estás haciendo?"
El se liberó de sus brazos y miró tímidamente a su alrededor. Por fortuna, no había nadie cerca, de lo contrario, su imagen se vería arruinada por completo debido a ese descuido.

"Me estoy vengando por lo que hiciste esta mañana".
El mero pensamiento de lo que vio cuando se despertó esa mañana lo enfureció otra vez.

Saeng era demasiado atrevido, ya que, como él había sido demasiado violento la noche anterior, amándolo hambriento e incesantemente con la lujuria de un animal salvaje, por la mañana se atrevió a hacer garabatos en su espalda, con el dibujo de una tortuga.

Como si eso no fuera suficiente, también le escribió mensajes que decían: '¡Hola guapo! ¡Gracias por tu servicio!'.

Eso lo enfureció, dado que era un hombre y, aunque quería tolerarlo, su virilidad no le permitiría aceptar un insulto así.

"Solo te estaba dando una probada de tu propia medicina".
Saeng cruzó los brazos firmemente sobre su pecho para evitar que se acercara a él. Si no fuera por la agresividad en cómo lo había amado la noche anterior, dejándolo casi incapaz de ponerse de pie y caminar esa mañana, no hubiera estado tan enojado como para bromear dibujando sobre su cuerpo. Él había provocado todo eso en primer lugar.

"¿Una probada de mi propia medicina? Creo que me estás insultando y desafiando mi orgullo como hombre, ¿no es así?"
Pellizcando y levantando su barbilla, Hyun posó sus ojos en sus labios hinchados causados por los besos, y una sonrisa maliciosa apareció en su rostro.

"¿Y qué? Tú también desafiaste mi orgullo como Mayor Coronel. ¿Solo querías un ama de casa obediente que se inclinara ante ti y te complaciera en todos tus caprichos? Yo no soy ese tipo de persona, por lo que ahora estamos a mano".
Saeng lo enfrentó sin miedo, mostrando un coraje inquebrantable y una temeraria valentía como oficial de las fuerzas armadas.

"Una vez que empieza el juego, no eres tú quien decide los resultados, así que, mi hermoso y arrogante Mayor Coronel, ¿estás listo?"
Hyun levantó las cejas y lo miró con sus ojos fascinantes, tratando de cautivarlo.

"No participaré de tu juego desquiciado. Si realmente no puedes estar en la fiesta, no me importaría que te duches con agua fría para enfriar esa cosa entre tus piernas".
Se burló con desdén. Puesto que habían ido a ese lugar para asistir a la celebración de ShanMin, se suponía que el estaría cerca del lindo bebé, no atrapado con Hyun para juguetear con él, ya que la estrella de la fiesta ese día no era su esposo, sino el bebé.

"A mí sí me importa, así que, incluso si en verdad me doy una ducha fría, sería mejor que te trajera conmigo para que podamos jugar en la bañera como dos patos enamorados".
Le susurró al oído tras acercarse y apoyar su cuerpo sobre él, sin darse cuenta de que estaban al aire libre.

"¡Oh, santo cielo! ¡Lo siento mucho! ¡No vi nada! Pueden continuar lo que sea que estaban haciendo".
HongKi se cubrió los ojos con la mano mientras miraba entre sus dedos.

"Oye, ¿por qué estás tan afectado? Dado que sabes que no deberías estar aquí y vernos, ¿por qué no te vas en silencio en lugar de hacer un escándalo?"
Hyun miró al intruso extremadamente frustrado porque el momento se había arruinado.

"Lo siento, me olvidé. Pueden continuar, y juro que no volveré a pronunciar una palabra".
A pesar de decir eso, HongKi seguía de pie allí, sin mostrar intención de irse.

"Si estuvieras en mi lugar, ¿todavía estarías de humor para continuar? ¿Lo hiciste a propósito y nos seguiste hasta aquí? ¿Cuánto escuchaste de nuestra conversación?"
Dijo Hyun, apretando los dientes. Entonces, se inclinó hacia Saeng y le susurró al oído: "No pienses que ya te saliste con la tuya, ya que podemos discutir esto toda la noche. En cuanto a la forma en cómo lo discuto, creo que no necesitas que te lo recuerde, puesto que tú lo sabes".

Saeng lo miró con incredulidad. ¡Oh, no! ¿Otra vez?

Anoche tuvieron relaciones sexuales salvajes toda la noche, y todavía sentía dolor en todo el cuerpo.

HongKi estiró el cuello, intentando escuchar y tratando de entender de qué estaban hablando, pero no pudo oír nada y se quejó para sí mismo: '¡Hyun es demasiado malo! Qué más le da si yo escuchara lo que dice'.

"Dime, ¿qué escuchaste?"
Repitió Hyun con un tono ambiguo pero amenazador, mientras se volteaba y se acercaba a HongKi, a quién tomó por sorpresa.

"¿Qué escuché? Mmm, ¿dijiste algo?"
El gesto íntimo de Hyun casi le quitó el aliento e hizo que su corazón dejara de latir. Si no fuera su hermano, a quien HongKi siempre había respetado desde que era joven, definitivamente estaría cautivado por él. Sí, el atractivo de Hyun era de un nivel diferente.

Un verdadero amor. 8a parte.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora