—Menuda fiesta se ha montado tu hermano— exclamó Suigetsu, junto a un grupo de alumnos de su clase, los cuales eran hijos o familiares de invitados.
Sasuke no respondió, con una copa de sidra en su mano trataba de ocultar su nerviosismo. Era gracioso, cuando antes luchaba por dejar salir a flote sus emociones, ahora tenía que esconderlas para no quedar mal parado.
Se había puesto una camisa oscura con saco y pantalón finos, hechos a medida, pero aún lucía como un adolescente. Su hermano conversaba con un hombre que conocía perfectamente, y el cual le desagradó encontrar en la fiesta; el padre se Sakura ¿Para qué Itachi lo había invitado?
—Ok, ya es oficial, te tengo envidia— volteó ante las palabras de su amigo y luego dirigió la vista hacia donde miraba.
Naruto había entrado al salón, y saludaba a los invitados con una enorme y cálida sonrisa. Llevaba un smoquin negro con moño de igual color, y su cabello rubio peinado hacia atrás, aunque dejando mechones rebeldes que tocaban delicadamente su frente. Solo un momento lo miró, y fué como si le sacudieran el suelo bajo sus pies.
—Hey, contrólate, estás todo rojo— advirtió Suigetsu, y él bajó la cabeza.
—Maldición— murmuró, su pecho dolía y justo cuando pensó que no podía quedar más en evidencia, su hermano lo llamó.
Recuperando un poco de compostura, se acercó al par de hombres y ni siquiera respondió al empalagoso saludo de Haruno, quién tenía a su hija al lado.
—De verdad es una lastima que hayan habido diferencia entre ustedes— dijo el invitado —Pero son cosas de niños ¿No es así?
—Igualmente hay que tener cuidado con lo que se dice— respondió Itachi, viendo la molestia en el rostro de su hermano.
—Estamos de acuerdo ¿Verdad, Sakura?
—Así es— respondió la chica, alisando los pliegues de su vestido rojo con volantes en la falda —Quisiera que volviéramos a ser amigos, Sasuke.
—No es de mi interés— respondió escueto, y ambos Harunos rieron con falsedad.
—Un muchacho de fuerte carácter— mencionó el padre —Pero no seas rencoroso, siempre tendrás desavenencias con las personas a lo largo de tu vida, lo importante es saber socializar.
Sasuke miró a su hermano con ojos de: "¿En serio tengo que soportar ésto?", y él colocó una mano en su espalda.
—¿Por qué no bailamos, tú y yo?— ofreció Sakura —Para hacer las pases.
—No quiero— respondió frío.
—Solo una vez, Sasuke— pidió su hermano y se inclinó hasta acercarse a su oído —Cede un poco, por favor. No quiero problemas hoy.
El chico suspiró derrotado y le tendió la mano a Sakura. La guió hasta el medio del salón y tras la orden de Itachi, la música ambiental cambió a un vals.
No tardaron en agarrar el ritmo y empezar a danzar, viendo como los invitados hacían un círculo a su alrededor. Con los pasos clásico ligados con movimientos del ballet, ambos estaban dando un espectáculo fascinante. Naruto se acercó a Itachi y con las manos en los bolsillos, le prestó toda la atención a la pareja. Quizás no con ella, pero Sasuke pertenecía a ese mundo joven y despreocupado.
La noche anterior, tras una lucha interna, había caminado hacia él con la intención de poseerlo de una vez. Entonces lo vió retroceder con temor, otra señal de que dejarse llevar por los instintos estaba mal. No podía ser egoísta y tomarlo, sin importarle su vida y lo que para él significaría algo así.
Sakura, quién estaba dejándose guiar, de repente comenzó a forzar los movimientos en busca de alzadas. Y él respondió, temiendo arruinar la danza. Dos o tres veces la levantó y giró, dejándola descender suavemente hasta que sus tacones tocaban el suelo, como si no pesara nada. Hasta que en la última ocasión, se le resbaló de las manos y la chica cayó de espaldas. Los volantes de su vestido flotaron, dejándola con las piernas expuestas, y por supuesto su ropa interior.
Sasuke retrocedió sin saber que hacer, cuando la vió levantarse y golpear el suelo con el zapato.
—¡¿Por qué diablos imaginé que podías hacerlo bien por una vez?!
—¡Tú fuiste la que pidió bailar!— exclamó, notando la risa de los invitados.
—¡Ahora todos se burlan de mí!— lloriqueó rabiosa y caminó hasta una de las mesas.
Sasuke se petrificó en el lugar cuando el contenido alcoholizado de la bebida que Sakura le arrojó a la cara, mojó su ropa. Con un gesto lento de su mano despejó sus ojos y la miró. La furia lo atenazaba por dentro, y con la palma en el aire, hizo ademán de pegarle por segunda vez, pero la mirada azúl y severa clavada en él, lo hizo detenerse.
Naruto negó, casi imperceptible, y con sus labios apretados. Sasuke bajó la mano y giró, con dirección a la salida del salón.
—Diablos...— exclamó Itachi, y a punto de salir detrás de él, el rubio lo detuvo, colocando una mano en su pecho.
—Atiende a los invitados. Yo voy— anunció.
—Pero...
—Yo me ocupo— repitió y señaló con la cabeza al padre de Sakura.
Sin esperar la respuesta de Itachi, salió rápidamente en busca de Sasuke, antes de que éste se le perdiera de vista. El chico atravesó los pasillos de la mansión hasta que estuvo fuera de la vista de los sirvientes y se detuvo, gruñendo alto para dejar salir su impotencia.
—¡Sasuke!— Naruto llamó con voz grave y él giró.
—¡Déjame...!— gritó y siguió caminando a paso rápido.
—Detente— bramó y apretó los puños, viendo que lo ignoró por completo —¡Te lo estoy ordenando! — gruñó.
—¿Quién eres tú... para hacer algo así?— balbuceó, deteniéndose y encarándolo.
Tras alcanzarlo, Naruto lo agarró del brazo con rudeza, con la intención de que lo mirara, pero Sasuke escondió su rostro.
—Levanta la cabeza— siseó.
—Ya basta... deja de actuar como si te importara. Me estás confundiendo— sollozó.
—Lo siento, pero no lo puedo evitar. Sí me importas— confesó —Mírame.
Frunció sus cejas rubias al ver los ojos negros de Sasuke llenos de lágrimas. El segundo en que ambos se quedaron en silencio se sintió eterno, y se rompió con un gruñido ronco por parte de Naruto, cuando Sasuke se levantó de puntas y rodeando su cuello con los brazos, lo obligó a inclinarse y le robó un beso.
—This is so wrong. (Ésto está tan mal)— murmuró sobre sus labios suaves e inexpertos. Luego atrapó su cintura y lo cargó, haciéndolo rodear sus caderas con las piernas —And I'm sorry, but I can't resist anymore. (Y lo lamento, pero ya no resisto más).
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SWEET (Terminada)
FanfictionNaruto es un hombre de poder, acostumbrado a una vida solitaria y a cumplir todos sus placeres. Sin embargo, el destino lo hace reencontrarse con una persona que no puede obtener, a pesar de que el deseo le quema los huesos. Sasuke es un chico ensim...