[ At Midnight ]

31. Saco

Bangchan había estado buscando a Changbin por todos lados, dejando su casa para el último, tocó la puerta un par de veces pero nadie respondió.

"- Bin.... se que estas ahí, por favor déjame entrar." Dijo apoyando su frente en la puerta, al estar más cerca escuchó el sonido de unos golpes, por lo que se preocupó y entró.
Chan sabía dónde el castaño guardaba una llave de respuesto, retrocedió para mover el tapete de la entrada y tomó la llave. Eso le hizo pensar que debería hablar con Changbin sobre mejorar sus métodos de seguridad.
Al entrar no vió al castaño, por lo que se dispuso a buscarlo por la casa, encontrándolo en el patio de la misma, entrenando.

Changbin estaba concentrado mientras golpeaba un saco de boxeo, aunque había escuchado a Chan llamarlo y entrar, se negaba a si quiera dirigirle la mirada.

- " Bin.. ¿Podemos hablar?" La única respuesta que obtuvo fue el sonido de golpes más fuertes contra el objeto.

- " Está bien, yo hablaré entonces." Acercó una silla para sentarse cerca del castaño y comenzar a hablar.

- " Entiendo cuánto te molestó ver a ese chico, pero no podía dejarte comenzar una guerra Changbin." Explicó el de cabellos claros.

El castaño soltó risa sarcástica.

- " Claro, eres un líder." Habló de mala manera el castaño mientras seguía agrediendo al pobre saco.

El mayor sabía que lo decía con sarcasmo, pero si tenía razón.

- " Es solo que en esa situación yo quería a mi amigo." Dijo Changbin deteniendo el movimiento del saco de boxeo con ambas manos.
Esas palabras atravesaron al mayor, hiriendolo por completo.

- " Pero olvídalo, tienes responsabilidades y bla bla bla,
ya lo sé.
Vete Bang."
El castaño tomó una toalla y la colocó en su hombro, caminando fuera del lugar.

Sin embargo fue detenido debido a que los brazos del mayor lo atraparon por detrás, rodeandolo, se aferraba a él para impedir que escapara.

- " Perdóname, no quise hacerte sentir así... Eres mi mejor amigo Changbin, no quiero que me odies." Habló apenado el mayor con la cabeza oculta en la espalda del castaño mientras con sus manos lo apretaba con fuerza.

El castaño dejó escapar un suspiro. Cuando está enojado no piensa lo que dice por lo que termina hiriendo a las personas, es por eso que vino a aislarse a su casa. Pero no tomó en cuenta la preocupación de Bangchan, lo conocía desde que eran pequeños y aún así a veces olvidaba que el mayor era así.
Odiaba ser una carga para Bangchan por lo que no le gustaba discutir con él, sabía que ponerlo en la situación de decidir sobre su cargo o su amistad era un tema delicado para el mayor y aún así lo usó para herirlo.
Estaba tan arrepentido, que cuando escuchó la triste voz de su amigo no pudo evitar que sus ojos se cristalizaran.

- " ....Tú perdóname, no debí haber dicho eso.." Liberó uno de sus brazos para limpiar su prematura lágrima para que el mayor no la viera, cosa que no funcionó porque de igual manera escuchó el sonido de su nariz sorber.

El mayor rió enternecido al notar los sollozos de su amigo.

- " ¿Estás llorando Binnie?" Habló ahora con una sonrisa calmada el mayor.

- " Ugh, cierra la boca Bangchan." Volvió a pasar su brazo por sus ojos para quitar las nuevas lágrimas.

- " Y ya sueltame, estoy todo sudado por el ejercicio, es asqueroso." Se quejó como normalmente lo hacía el menor mientras trataba de soltarse del agarre de Chan, pero mientras más lo hacía más resistencia ponía el mayor.

- " Ay nuestro Binnie sigue siendo un pequeño y tierno lloroncito. ¿Qué debería hacer? Quiero abrazarlo por siempre~" Habló con dulzura Bangchan, mientras apoyaba su cabeza en el hombro del contrario.

- " ¡¿PEQUEÑO?! MIDES COMO UN CENTÍMETRO MÁS QUE YO BANGCHAN. ¿SABES QUÉ? RETIRO MI DISCULPA, ARREGLEMOS ESTO AFUERA, TE DESTRUIRÉ." Gritó enojado el castaño mientras se removía violentamente para soltarse del agarre del mayor, como no lo conseguía lo comenzó a arrastrar consigo fuera de su casa mientras que el mayor reía.

Minho, quién caminaba junto a Jeongin luego de su entrenamiento, miró al par mientras negaba agotado, ya estaba acostumbrado a este tipo de situaciones entre ese dúo.

- " ¿Changbin-hyung va a matar a Chan-hyung?" Preguntó preocupado el menor mientras veía como los nombrados se perseguían entre sí, jugando, como si ellos fueran los niños de la manada.

- " Probablemente." Dijo con sarcasmo Minho pero luego de que el menor pelinegro lo viera con rostro asustado se dió cuenta que no lo conocía lo suficiente como para que entendiera el sarcasmo en sus palabras.

- " No te preocupes, de seguro se acaban de reconciliar, juegan así cuando lo hacen." Habló amable el mayor.

- "Se conocen desde hace mucho por lo que no pueden pasar mucho tiempo sin el otro, son un equipo y se necesitan entre ellos para apoyarse." Explicó Minho para luego abrir la puerta de la casa de Chan para dejar entrar a Jeongin.

- " Vamos, te haré algo de comer debes estar cansado, de seguro el olor los hará venir también." Sonrió levemente el mayor.
Todo ese rato que estuvo con Jeongin lo hizo darse cuenta lo mucho que se parecían, por lo que inconscientemente le comenzó a agarrar cariño.

El menor asintió con una sonrisa también, dejó de ver a los mayores y entró con Minho al lugar, aunque quiso ayudar al mayor, Minho se negó, en cambió le ordenó que fuera a darse una ducha y que se prepara para dormir luego de comer.

Cuando Minho terminó de cocinar escucho el sonido de la puerta lo que le indicó que sus amigos por fin se habían dignado a terminar su infantil pelea.

- " Ay~ ¿No será lo mejor? Minho nos preparó la cena mientras no estábamos porque se preocupa por nosotros, cada día está más dulce." Habló el castaño mientras se acercaba al pelinegro para abrazarlo.

- " Si me tocas, te echaré a ti a la olla, Seo." Amenazó Minho mirándolo de reojo mientras servía un plato para Jeongin.

El castaño se congeló.
Minho le daba miedo a veces.

- " Además, ambos deberían tomar una larga ducha primero." Se volteó mientras dejaba el plato en la mesa acompañado de una cuchara.

- "Y preparé esto solo para Jeongin." El nombrado llegó a la vez que escuchó su nombre, por lo que fue directamente a sentarse.

- " ¡Hyungs!" Saludó animado el menor.

- " Jeongin, come primero" Ordenó Minho antes de que el menor pudiera levantarse para saludar a los demás.

- " Y no los toques, están sucios." Dijo con un rostro de desagrado el pelinegro para luego tomar un sorbo de agua.

El dúo quedó derrotado frente a las acusaciones de Minho, por lo que se separaron, el mayor de todos fue directo a la ducha y Changbin se tuvo que dirigir a su casa para hacer lo mismo.

Minho era mandón, pero nadie tenía el coraje para decírselo a la cara, así que preferían hacerle caso sin protestar.

[Chanchang mis padres confirmado]