Enamorada Del Peligro

Capitulo 66

Narra Edward:

- ¿FUISTE HASTA MÉRIDA A NADA? - su cachetada me deja ardiendo la mejilla, pero lo que mas arde es mi orgullo, mientras sus gritos invaden la habitación del hotel donde estamos reunidos, - Pensé que serías más hábil, - camina de un lado a otro de la habitación, - debiste raptarla, obligarla...

- Creo que mi forma de tratarla no es de tu incumbencia, - se cruza de brazos y niega con la cabeza, - quiero que esté conmigo por voluntad, no a la fuerza.

- ¡Ja! - se ríe sarcásticamente, - no seas ridículo, me uni a ti pensando que eras útil, pero no esto. - me señala con reproche.

- Tu decide, ¿Lo tomas o lo dejas? - esta mujer está más loca que Brenda, me asusta - yo me encargo de ella a mi manera y tu aleja a tu amiguito de mi Ana.

- ¿Tú Ana? - explota en una carcajada sin humor, - cuidado si tú descuido no la hundió más en los brazos de Alejandro, - esta mujer me asusta, pero la necesito, no tengo nada mas, cada palabra que dice es un hecho, - gracias al cielo la policía no se dio cuenta, sino estarías preso en este momento, - se sienta sobre la cama y cruza sus largas piernas, - no pienso perder lo que me ha costado años.

- Tu has tu trabajo que yo me encargo del mío, - camino a la puerta,no quiero estar cerca de esta mujer un minuto más.

-No hagas más estupideces, - su voz suena calmada, es un camaleón para transformarse en segundos, - mañana en la boda voy a arreglar el desastre que creaste. - asiento sin mirarla y la dejo.

Narra Ana:

- ¿Contrato el estriper si o no? - mi tía y yo no damos crédito a lo que escuchamos decir a Caro.

- ¿Te volviste loca? - mi tía se ríe, - mi mamá es una dama.

- ¡Que aburrida eres amor! - hace un puchero mientras cruza los brazos sobre su pecho, - una despedida de soltera sin estriper, no es despedida de soltera, - me hace reír su show, - además tú mamá no es una virgencita, se que le encantará.

- ¡Basta Carola! - trato de ponerme sería, pero me da risa, - olvida al estriper, ¿Que más hay en tu itinerario?

- Creo que mejor empezamos a hacer un nuevo itinerario, porque el que tengo no te va a gustar... - lo dice con fingida inocencia.

Hacemos arreglos para que mamá pase una excelente velada en un local que Caro alquilo.

Gracias al cielo mi tía Laura nos echa la mano porque nunca he sido participe de una despedida de soltera.

Me encargo de llevar a mamá al lugar, la siento nerviosa, al llegar sus amigas están presentes, se sonroja apenas entramos, esto es nuevo para ella y aunque Caro dijo que no es una niñita virginal, se que siente pena.

- ¡Disfruta mamá, te lo mereces! - susurró en su oído mientras la abrazo, le entrego una copa del cóctel que mi amiga preparo y se muy bien los efectos que produce en grandes cantidades. La música no me deja escuchar, pero al separarnos le leo los labios y un "gracias" se dibuja en ellos.

Tomo una copa para mí, necesito entrar en calor para desestresarme, el dulce inunda mi boca, para dar paso al calor por mi garganta.

Ayudo a revisar que las invitadas sean atendidas, nos anuncian que la chica que contratamos para la charla ya llegó.

Accedí a que Caro la contratará, ojalá no me arrepienta, aunque acá todas somos mayores y obvio siendo una sexóloga sabemos de lo que nos viene a hablar, solo espero mamá lo disfruté.

No puedo negar que mi amiga se lució con la decoración y los obsequios para las invitadas.

- Solo espero quedar contratada para cuando sea tu despedida amor... - me susurra mientras tomo mi segunda copa.