Enamorada Del Peligro

Capítulo 27

- Por favor bajen!!! - es Sophie.

Separamos nuestros labios y estamos jadeantes, juntamos nuestras frentes.

- Salvados por Sophie, - lo dice y me sonríe jadeante, - tenemos que controlarnos, necesito aclarar todos los malentendidos para que confíes cien por ciento en mi.

- Quiero que lo de los mensajes pare y me dejen en paz, - se que cuando regrese a casa volverá a comenzar.

- No lo tomes a mal, pero creo que la responsable de los mensajes no es Elizabeth, - no sé que decir, de la única que sospecho es de ella, - sería muy evidente.

Nos quedamos en silencio, no entiendo, porque si ella está con Fabián debería estar tranquila. Total ya es algo superado. No entiendo por qué no aceptar lo que tienen y ya?

- Bajamos con Sophie, - me saca de mis pensamientos, - sucede algo?

- Eh...! Nada, - camino hasta donde el está, - vamos. - me mira como si quisiera decirme algo, pero no lo hace.

Bajamos en silencio, sigo pensando y aún no entiendo, lo que Edward dice es cierto, es muy evidente.

Mi teléfono comienza a repicar, es Caro, contesto casi al último repique.

- Hola... - su llanto hace que me quede callada.

- Mi amor necesito que vengas, - le escucho entre sollozos.

- Que pasó Caro? Donde estás? - Edward me mira preocupado.

- Estoy fuera de tu casa, - no la dejo terminar.

- Voy para allá, no te muevas de ahí. - le hago señas a Sophie mientras cuelgo, - lo siento mi amiga me necesita.

- Te acompaño, - se ofrece Edward, - que sucede? Yo te llevo.

- Muchas gracias, pero debo ir sola, - me acerco y le doy un casto beso en los labios, - todo está bien. - beso a Sophie en la mejilla y nos despedimos.

- Te acompaño hasta tu carro, - toma mi mano y caminamos a la salida, - me cuesta separarme de ti, - lo dice justo frente a mi carro... nos abrazamos.

- También te voy a extrañar, - lo digo abrazada a él, - gracias por todo y disculpa lo de... - pone su índice en mis labios.

- Todo fue perfecto, - me besa dulcemente, - por favor de ahora en adelante cuéntame si te vuelven a molestar, - me mira directo a los ojos.

- Está bien, eso haré, - le doy de nuevo un beso, - debo irme ya, - nos despedimos y pongo en marcha mi carro, nececito llegar rápido.

Al menos son solo algunas cuadras, al llegar bajo rápido del carro y Caro está sentada en mi porche con su cara entre sus manos y solloza. Limpia las lágrimas, o al menos lo intenta.

- Que pasa Carito? - me imagino lo que sucede, pero le pregunto mientras la estudio con la mirada, para certificar que está bien, se levanta y me abraza.

- Soy una idiota, nuevamente, - la abrazo fuerte, aquí vamos a descuartizar con palabras a un nuevo hombre, sucede muy a menudo, mi amiga comparte mi misma suerte con los hombres.

- Se que no es tu culpa, - nos sentamos, vuelve a secar sus lágrimas, o al menos lo intenta, - que hizo ese idiota ahora?

- Si es mi culpa, cómo pude caer tan fácil? Soy una idiota, - lo mismo de siempre, Caro es una persona extraordinaria, pero entrega todo muy fácil.

- Vamos adentro, me cuentas mientras cocino algo, - mientras busco mis llaves la miro, - debes tener hambre.

- Lo único que tengo es rabia conmigo por ser tan boba, - entra, se sienta frente a mi en la cocina.

- Cuéntame ahora que sucedió? - comienzo a sacar las cosas de la nevera para cocinar.

- Llame a Harry para salir ayer, - mira sus manos, - me dijo que no podía porque se sentía mal, - la escucho maldecir entre dientes, - anoche fui hasta su apartamento para consentirlo, que boba soy, - continua llorando, me acerco y le tomo sus manos, - cociné para el y pasamos la noche juntos, - como siempre mi amiga, - al amanecer llegó una mujer y nos encontró juntos, el fue detrás de ella diciéndole que.. - tartamudea y llora más, - que.. que yo no era nadie, solo un error, - se me parte el corazón, - que idiota soy, volví a caer, - nos abrazamos y siento mucha rabia.

- Tu vales mucho, pero necesitas tenerlo en cuenta, - la miro y ella hace una mueca de disculpa, - olvídalo, tú eres muy linda y ya encontrarás quien te valore.

- Eso se acabó, no quiero saber nada más de hombres, - se levanta como siempre decidida y con el mismo cuento, - "hombre no es gente" - lo decimos en coro, porque siempre que la decepcionan dice lo mismo, - está vez es en serio.

La dejo tranquila y continuo con la comida, revisa su teléfono y la veo más calmada. Comemos juntas y hablamos de otras cosas, se que lo superara como otras tantas veces.

Se va y me quedo más tranquila, al verla diferente, Caro es fuerte.

Edward me llama para saber cómo estamos y se queda tranquilo al saber que ya todo paso y es cuestión de días para que quede en el olvido.

Voy a casa de mamá, hablamos bastante, llevábamos días sin hacerlo. Las cena estuvo bien, como siempre, me retiro cansada a casa.

Algo que sabía iba a suceder, la persona misteriosa nuevamente. Dudo si leerlo o no, optó por la primera opción.

"Que conste que te lo advertí, vas acabar muy mal y será pronto"

Se me escalofria el cuerpo, porqué si lo medito ese alguien me espía, espera hasta quedarme sola para escribirme. Pienso en Edward y recuerdo sus palabras "confianza". Sin pensarlo dos veces se lo reenvío.

Me sobresalto al ver entrar una llamada, es el y al primer timbrazo respondo.

- Estás bien? - apenas respondo lo escucho preocupado y no me deja responder, - voy para allá.

- NO, - contesto rápidamente, - estoy bien.

- No quiero que estés sola, - se escucha muy preocupado, - entonces quédate con tu mamá.

- Estoy encerrada y nada va a pasar, - siento miedo, pero no quiero que el se de cuenta, - además no quiero asustar a mamá.

- Necesito ver qué estás bien.

- Quédate tranquilo, si esa persona está cerca puede ponerse agresiva, no lo sé. - lo escucho resoplar.

- Está bien, solo que cualquier cosa me llamas, a la hora que sea, - hace silencio, - lo harás?

- Quédate tranquilo que lo haré.

- Solo espero que amanezca rápido, por favor cuídate. - siento su preocupación y mi miedo se desvanece.

- Descansa que todo va a estar bien, - nos despedimos y corro a reforzar las puertas y ventanas.

Mi cabeza da mil vueltas buscando una solución, finalmente me quedo dormida profundamente.

La calle está húmeda, caen gotas, tengo frío!!

Miro a los lados y no hay nadie, a lo lejos veo a alguien que camina en mi dirección. Comienzo a caminar más rápido para llegar a casa.

Volteo repetidas veces y esa persona cada vez está más cerca. Lleva un sweter con capucha, no logro ver su cara. Llegó a una esquina y doblo para perderlo y poder correr.

Corro con todas mis fuerzas, pero siento que no avanzo lo suficiente, escucho mi corazón que se sale por mis oídos y no me deja escuchar nada.

Nuevamente miro atrás, mi esperanza se esfuma al ver que está más cerca. Tropiezo, caigo al suelo, escucho su risa, es una mujer, levanto la mirada y me apunta con un arma, cierro los ojos y escucho la detonación!!!