Las vacaciones de pascua terminaron tan rápido como empezaron. Cuando menos cuenta se dieron, el castillo se había vuelto a llenar de estudiantes, y mientras por un lado la pila de tareas se multiplicaba tras cada clase, y la presión por los exámenes de fin de año se había asentaba por completo, por el otro, la temporada de quidditch se había vuelto a reanudar, y con ello, espíritu competitivo volvió a llenar cada rincón del colegio.
Ravenclaw vs. Hufflepuff. El quinto partido de la temporada, y semifinal, se ocurrió el primer fin de semana después de volver al castillo, exactamente un día antes del cumpleaños de Hyunsuk. Gryffindor y Slytherin aún tenían que enfrentarse en la final, y los puntajes estaban tan cerca, que era imposible el saber si el ganador de aquella tarde no podría aspirar a subir al segundo lugar, en vez de quedarse con el tercer puesto, que la emoción era indescriptible. Hufflepuff estaba que no se la creía. ¿Vencer a los leones o a las serpientes en el puntador? Si, por favor.
Sin embargo, lo único que podía hacer el equipo de tejones en aquel momento, era dar su mejor actuación en el partido, y cruzar dedos de que la final no diese demasiados puntos, con los cuales su puntaje pudiese verse superado. Era una posibilidad muy remota, pero, aun así, había esperanza. Un rayito de luz al cual se iban a aferrar hasta el último minuto...
-¡Aquí tenemos el marcador hasta la fecha! –anunció Asahi, aquella tarde de mediados de abril, repitiendo su papel de narrador del partido, con el sol golpeando con intensidad, y el viento soplando suavemente en sus oídos-. Gryffindor y Slytherin siguen a la cabeza empatando con 400 puntos cada uno. Les sigue de cerca Hufflepuff, con trescientos ochenta. Y en cuarto lugar tenemos a Ravenclaw, con doscientos sesenta puntos.
El ruido en las gradas ahogó las siguientes palabras de Asahi. Con un poco de suerte, si se decidían atrasar el partido lo suficiente como para que se realizaran un montón de anotaciones, Hufflepuff podría robar el segundo puesto. Si, por el contrario, retrasaban mucho el partido y se les escapaba la snitch, dejando que Ravenclaw la tomase antes, su posición en la tabla podría llegar definitivamente hasta el cuarto lugar.
La situación era tensa para el equipo de los tejones. Un movimiento en falso...
-Las catorce escobas esperan el silbatazo –anunció Asahi, provocando más gritos en las gradas-. Pero primero, se liberan las bludgers. Allá va también la snitch. Se suelta la quaffle... ¡E inicia el partido!
El ruido del silbato quedó ahogado por los gritos provenientes de las gradas. Mismo caso con las catorce patadas que se dieron contra el suelo, y elevaron las catorce escobas en el aire, lo cual, a decir verdad, simplemente aumentó la intensidad de los vítores.
-¡Hufflepuff tiene la quaffle –dijo Asahi prontamente-, los tejones no pierden ni un segundo!
Yoshi y Yedam hicieron lo mejor que pudieron para animar a Mashiho. Volviendo a sacar la pancarta con el hámster montado en la escoba, y con la ayuda de Junkyu, Jihoon, Hyunsuk y Doyoung, se deshicieron en vítores durante todo el partido, mientras que Jeongwoo, Haruto, Junghwan y Jaehyuk hacían lo mismo apoyando a Ravenclaw.
Por más que Hufflepuff quería pasar a la ofensiva, Ravenclaw no estaba cediendo. Durante casi todo el partido, las águilas parecían más concentradas en impedir que los tejones anotasen, en vez de ellos mismos intentar llevarse varios puntos. A los ojos de los espectadores, el plan era claro: si impedían que Hufflepuff anotase, los tejones no podrían aspirar a subir al segundo puesto en la tabla de resultados.
-Eso es jugar sucio... -dijo Junkyu en un puchero, a lo que Jihoon interrumpió.
-Para nada, eso es jugar inteligente. El impedir que anoten impide igualmente que ellos queden atrás en la tabla de puntuaciones. Básicamente Ravenclaw está asegurándose que el tercer lugar se quede en alguno de ellos, empujando al otro a ser el cuarto puesto.
-En estos momentos, todo depende de quién atrape la snitch –dijo Yedam, haciendo cálculos matemáticos en su cabeza-. Si la atrapan ahora, tanto Gryffindor como Slytherin solo tienen que atrapar igualmente la snitch, y de todos modos quedarán en primer y segundo lugar sin la necesidad de hacer puntos...
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A Treasure in Hogwarts
HumorCuando Junghwan y Jeongwoo llegaron a Hogwarts, no sabían nada del mundo mágico. Ahora les tocará acostumbrarse con ayuda de Mashiho, Yoshi, y Yedam, siempre amables y atentos, sobrevivir a las bromas de Jihoon, Doyoung y Junkyu, aprenderán a escuch...