¡Hogwarts! –anunció Junkyu, escribiendo en su pizarrón-. Fundada hace mil millones de años –Mashiho no pudo evitar golpearse la frente con la palma de la mano-, por los cuatro mejores magos y brujas de su época: Godric Gryffindor, Helga Hufflepuff, Rowena Ravenclaw y Salazar Slytherin –chispitas salieron de su varita cada que uno de estos nombres era escrito en la pizarra-. Había tanto que enseñar a sus alumnos, que decidieron que lo mejor era separarlos de sus familias, meterlos a un internado y pese a que la mayoría son adolescentes, ¡decirles que la hora de ir a la cama son las nueve de la noche!
-¡Junkyu! –lo reprendió Mashiho, pero los aplausos de Yoshi hicieron que el chico continuase.
-Los fundadores decidieron que la mejor manera de educar a los alumnos, era dividirlos para demostrar quienes son los mejores. Así nacieron las casas: Gryffindor –y se apuntó a sí mismo-, donde estudian los valientes, hizo una nueva anotación en el pizarrón-. Slytherin, donde se encuentran los tramposos... Hufflepuff, donde conviven los... -miró a Mashiho quien le dedicó una mirada mortal-... trabajadores y Ravenclaw, donde habitan los ratones de biblioteca.
-¿Y cómo los escogen? –preguntó Jeongwoo.
-La tarea es del sombrero seleccionador –dijo Junkyu, mientras volvía a anotar en su pizarrón-. Es, literalmente, un sombrero, viejo, feo, y que huele mal, que se encargará de invadir tu mente y anunciar a qué casa perteneces, frente a todo el colegio. Yo, por ejemplo –y Junkyu no pudo evitar sonrojarse un poco-, pensé que se había equivocado cuando me puso en Gryffindor. Pero ahora, después de cuatro años aquí, mi casa me ha ayudado a conocer mucho sobre mí mismo, y lo que puedo hacer.
-La casa que les toque será como su familia –agregó Mashiho, con lo que todos lo miraron-. No solo dormirán y vivirán en los dormitorios y sala de la casa, sino que deberán trabajar juntos para ganar puntos por las cosas que hagan bien, y así poder hacerse con la Copa de la casa, la cual se entrega al final del año.
-Claro que el cometer infracciones también puede quitarles puntos –dijo Yoshi, pensativo-. Los Gryffindors pierden muchos puntos, por ejemplo.
-¡Hey! –se quejó Junkyu, pero antes de que pudiese decir algo en defensa de su casa, la puerta del compartimiento se abrió una vez más, y por allí se asomó un muchacho que al igual que Mashiho y Junkyu, en el pecho de su túnica escolar (con forro azul marino) usaba una insignia de Prefecto.
-Oh... -susurró Junkyu-. La reunión de prefectos.
-Kim Junkyu... -dijo el chico nuevo-. ¿No te mandé a buscar a Mashiho?
-Pues lo encontré –se defendió el muchacho, apuntando a Mashi, quien saludó tímidamente.
-¡Pero lo tenías que traer, no quedarte conversando!
-¡Lo intenté! –se defendió Junkyu una vez más, y esta vez apuntó a su pizarrón-. Pero estaba aferrado a dar una clase de Casas a este par de novatos.
Al escuchar la palabra novatos, el chico nuevo se apuró a mirarlos. Como prefecto, era su deber ayudar a los alumnos, en especial a los nuevos. El saber que Mashiho y Junkyu estaban haciendo justo eso, hizo que le fuese imposible el seguirlos regañando.
-¿Quiénes son sus amigos? –preguntó un poco más amable.
Yoshi se apuró a alzar la mano como si se encontraran a la mitad de una lección, y responder.
- Este es Jeongwoo, y este es Junghwan.
-Oh, mucho gusto –les sonrió el chico-. Yo soy Jaehyuk, estudiante de quinto curso, y prefecto de la casa Ravenclaw. Entonces... -y miró al pizarrón-. ¿Tienen dudas sobre las casas de Hogw...? ¡¿Qué quieres decir con ratón de biblioteca?!
Junkyu estaba por responder, cuando una persona se detuvo en el umbral de la puerta, y dando una patada en la espalda de Jaehyuk, lo empujó dentro del compartimiento, con lo que el chico cayó en el regazo de Yoshi.
-¡¿Se quieren callar?! –dijo el chico que lo había empujado, vistiendo su túnica, con forro verde oscuro, y que resultó ser Jihoon-. Rayos, son demasiado escandalosos.
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Sé que Jihoon suena al típico chico que hace bullying, pero les juro que será un amor. (Creo que se está incluso volviendo mi Tesoro favorito de escribir). Los demás Tesoros irán apareciendo poco a poquito. Tengan paciencia.
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A Treasure in Hogwarts
HumorCuando Junghwan y Jeongwoo llegaron a Hogwarts, no sabían nada del mundo mágico. Ahora les tocará acostumbrarse con ayuda de Mashiho, Yoshi, y Yedam, siempre amables y atentos, sobrevivir a las bromas de Jihoon, Doyoung y Junkyu, aprenderán a escuch...