~Monkie Kid~ 3️⃣

La Esfera Demoníaca #3

Espero que les guste~

Después de que se logra que Nezha vuelva a su estado de niño, este se aleja y MK no duda en seguirlo al ver lo destrozado que se ve, sólo queriendo poder ayudarlo.

-¡Ellos me odian!- sollozo, cayendo de rodillas en un lugar alejado del pueblo y de toda la conmoción que ninguno de los dos sabe que está sucediendo.

-No, no lo hacen- negó, acercándose a paso lento, asegurándose de guardar su bastón antes de que el niño lo viera.

-¡¿Y tu qué sabes, rarito?!- gruñó con el ceño fruncido, fulminándolo con la mirada de la misma manera que la primera vez que se encontraron hace unos días atrás pero ahora, se ve más dolido que molesto.

-Tus padres abandonaron el pueblo, se mudaron a una casa alejado de todos ellos para que no te lanzarán cosas constantemente. Tu madre se puso una armadura para jugar contigo y verte sonreír, tu padre estudió todo lo que estaba a su alcance para buscar una manera de deshacerse de tu maldición- la pareja había estado bajo tensión durante mucho tiempo y pareció que un rostro amable, que no los juzgaba, los había impulsado a desahogarse un poco. Pudo ver como sus palabras alcanzaban a Nezha, los ojos de este abriéndose con sorpresa, lágrimas silenciosas aún corriendo por sus mejillas. -Además...estoy muy seguro de que el escudo no era para mantenerte encerrado, más bien era para mantener a los demás lejos- comentó, pensativo.

-...me mintieron...- murmuró, dolido y MK lo entiende. Las mentiras, incluso bien intencionadas, duelen de cualquiera manera.

-Lo sé...- asintió, arriesgándose a extender su brazo para apoyar su mano en la espalda ajena, agradecido cuando el menor no se aleja o se tensa. -...pero estoy muy seguro de que no lo hicieron con mala intención. Querían que vivieras sin temer el día de tu muerte, que disfrutarás de tu vida, querían que te sintieras especial aunque fuera una mentira- se acerco un paco más, aliviado cuando Nezha se acurruco contra su costado, sacando algo de la pequeña bolsa que su padre antes había atado alrededor de su cintura. -Te mintieron pero hicieron todo lo que creyeron que era correcto para que tu tuvieras una buena vida y pudieras vivir más allá de la maldición- tararea suavemente cuando ante las lagrimas que se deslizando por las mejillas de niño, sin comentar mientras lo escucha sollozar y abrazar contra su pecho el trozo de papel que su papá le había dado. MK solo queda allí, abrazándolo suavemente y consolándolo lo mejor posible, aunque sabe que deben moverse pronto porque tiene la sensación de que algo malo esta pasando.