«Susúrrame lo que quieras» (GC #2.5)✔©

Capítulo 34: Afterglow.

Ada

Nunca había sentido tanta felicidad en mi vida, y quizás, se debía porque no estaba completa, no me sentía yo misma, y estaba sola, atrapada en mi propias rejas, pero, cuando dejé ingresar a Cody; cuando abrí la puerta para él a partes muy profundas de mí como mis pensamientos, emociones, sentimientos, sobre todo a mi corazón supe que estaba acabada porque él me descongeló.

Querer a Cody se siente estar en llamas todo el tiempo, y viva y radiante, y él llena mis momentos de alegría, y todo encaja tan bien, y estoy segura de que si volviera a nacer mi camino me conduciría de nuevo a Coleman para quererle una y otra vez.

Estar con Cody es rojo intenso por la vehemencia de nuestros sentimientos. Así que, haber puesto distancia entre nosotros hace menos de 24 horas se siente estar rebotando en gris oscuro.

Lo he arruinado todo. Desde que me marché del motel porque temí que Theo nos descubriera antes de tiempo, sin embargo, cuando llegué a casa supe que no podía decirle nada a mi hermano porque él ya estaba viendo la publicación de Gossip Lips y estaba soltando cosas cómo: «Por amor a lo sagrado, ¿por qué están hurgando en la privacidad de Cody», «Denunciaré a este página, está infringiendo en los derechos de las personas. Esto es un delito», «Y, vaya, me consterna que Cody no me contará sobre esa chica».

Entonces, no pude mirar a los ojos a mi hermano y decirle que la chica de la foto era yo, que la persona de la que está enamorado su mejor amigo es su hermana porque de nuevo estaría robando algo de él.

Por tanto, mi magnífica idea fue dejar a Cody, hacerlo antes de que todo se desmorone, aunque no quería hacerlo, aunque dentro de mí me sentía a morir cuando escribí el horrible mensaje de texto que envié, a pesar de todo, me obligué a aceptar que estaba haciendo esto por los tres.

No obstante, cuando ingresé a Legends una parte de mí sabía que él se encontraba allí incluso antes de girar mi mirada hacia la zona del billar.

Lo sentí en mi piel, y en mi corazón.

Así que, tuve que obligarme a fingir normalidad, algo que relativamente ya no existe entre nosotros y el odio constante que nos expresábamos. Y no fue nada fácil hacer todo el acto ocurrido en la mesa de billar porque lo único que mi mente me gritaba era girarme y besarlo hasta que mis piernas tiemblen, y me deshaga completamente en sus brazos, que me mire a los ojos y me diga: «Mía».

Pero, tan pronto mis pies me condujeron de regreso a él cuando se marchó dejándome en la mesa con la respiración pendiendo de un hilo, y la cordura hecha trizas, supe que realmente había dejado todo mal entre nosotros, y quise echarme a llorar ahí mismo.

Prácticamente todo está arruinado, de una forma tan inverosímil que no creo que pueda arreglarlo. Quizás, él no comprenda la razón por la que hice todo, pero, mientras yo pueda protegerlo sé que eso será mejor que nada, dado que, temo por él y por mi hermano, y por la relación que ellos tienen que es incomparable a mí.

Son como hermanos, más que mejores amigos, y soy testigo de ello, y cómo dije antes me dolería tener que romper eso por mi relación con Cody, me dolería destrozar el corazón de mi hermano, pero, en este instante lo que me duele más es haber herido a Cody como lo he hecho está noche. Sin embargo, he dejado que sus palabras conectaran conmigo, y por esa razón me he ido junto a él de Legends.

Mi corazón late de prisa porque me siento ansiosa por todo, y estar de vuelta en su auto con un silencio inoportuno me araña por dentro.

Quisiera escucharlo reír, y verlo rodar sus ojos cuando le digo algo divertido, y que me chinche cómo solía hacerlo, y más. Quiero más con él. No obstante, pasamos los próximos veinte minutos con una tensión exorbitante creciendo entre nosotros.