Sueños

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Pov Luiza

'No tengas miedo' se repetía a cada segundo en mi cabeza.

Dije que iba a dejar que todo fluya de forma natural con Valentina pero me es imposible no tener pánico a lo que pueda llegar a pasar, sé que sí no sale como espero voy a salir lastimada.

Duda el sábado me repitió de miles de manera que no tenga miedo y que lo que salga de eso va a estar bien, termine o no, cosa con la que concuerdo.

No sabía que cocinar pero Duda habló con Igor y él le dijo que ella no come carne, empecé a buscar recetas vegetarianas.

Entonces llegué a una deliciosa receta de strogonoff de berenjena, yo no tenía mucho problema con la comida así que me adaptaba a cualquier cosa.

Leo siempre comía todo lo que preparaba su Nanni, así que probablemente le guste lo que preparé, en caso contrario ya tenía papas en la congeladora para hacerlas en la freidora de aire.

El timbre sonó y me saque el delantal que traía puesto, me arregle el cabello frente al espejo y caminé lento hasta la puerta.

Cuando abrí ella se encontraba ahí, unas leves ojeras se hacían presente bajo sus ojos, estaba cansada, era evidente.

Sonrió y me dio un abrazo, la iba a besar pero me fije que Leo no esté cerca, le di un corto beso rápido.

-Pasa -me hice a un lado para que entre.

-Que hermosa casa tienes -habló mirando algunos rincones.

-Ammm es cosa de mi madre, suele venir a decorar la casa, es un poco obsesiva -admití- Le encanta que todo esté como a ella le gusta, y como paso el día hospital o en la piscina, no me importa... Estoy hablando demasiado, verdad? -pregunté, ella sonrió.

-No te preocupes, me gusta escucharte hablar -respondió, mi corazón latía de forma acelerada, cómo es que podía ser tan especial?

-Tienes hambre? La cena ya está lista -la guíe de la mano hasta la cocina.

-Moría de hambre, olvidé mi café en casa -habló.

-Puedes sentarte dónde quieras -la mesa del comedor era enorme, nunca entendí porque compré algo así, si somos tres personas en la casa o fue mi madre, seguro que fue ella.

-Y... -empezó hablando- Leo? -cuestionó un poco dudosa.

-Voy a ir por él -me seque las manos con la toalla de cocina- Vuelvo en unos minutos.

Subí por las escaleras y vi a Leo, estaba al lado de su Nanni, ella vivía en la casa, pero como estaba con su medio yeso no quería que se mueva mucho para recuperarse rápido.

-Quieres algo más antes que cenemos? -cuestioné.

-No señorita Luiza, la cena estaba diez de diez, hasta me dan ganas de extender mi reposo para que siempre cocine usted -reí.

-Gracias Ofélia -agradecí- Ven aquí Leon -le acomodé sus medias, en la noche siempre hacia frío- Vamos a cenar, quieres? -asintió con la cabeza.

Lo cargué y me dirigí a la escalera, olvidaba que Leo ya no era un bebé y cada día estaba mucho más grande.

Llegué a la cocina y pasé al comedor, estaba muy nerviosa, era la primera vez que Leo conocía a alguien que no era de mi familia o de la escuela.

Lo senté y observó a Valentina.

-Hola, me llamo Leo -se presentó a Valentina.

-Hola Leo, yo soy Valentina -le paso la mano y él se quedó observando.

The Loneliest |Valu|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora