MI USO

Cap 3 ¿Bromeas?

By Bill

Habían pasado casi dos semanas desde que llegué a Hamburgo, en esas dos semanas había hecho los trámites para poder continuar con el curso aquí, en Hamburgo.

Mamá había mejorado, yo la había estado apoyando en todo y ahora que ya estaba mejor, comenzaría a ir a trabajar otra vez. Mi madre era la jefa de  una cadena de hoteles alemana, que tenía mas de 20.000 habitaciones distribuidas por todo Alemania.

Con Tom, no intercambiaba palabras, él solo llegaba cuando quería, y solo estábamos juntos a la hora de comer y cuando cruzábamos el pasillo alguna que otra vez.

Había dejado de traer a tantas chicas, supongo que fue porque le dejé en ridículo aquellas veces. Me daba igual, que le den. 

Eran las 6 de la mañana, yo ya estaba despierto, estaba en mi cuarto mirando al techo esperando a que se hiciera un poco más de día y empezar a prepararme para ir al instituto.

-Bill, hijo me voy a trabajar, si necesitas algo me puedes llamar.- dijo mi madre mientras abría la puerta lentamente.

-Sí mamá tranquila.

Mientras hablábamos, Tom pasó por mi habitación, supongo que iría al baño.

-A Tom hijo, ¿vas a clase hoy? Te lo digo porque hoy se paga la inscripción del autobús.

-Mamá sabes  bien que no voy a ir en autobús.- dijo mi hermano que se apoyó en el marco de mi puerta y se frotaba los ojos.

-Tom, me da miedo.- dijo mi madre.

-Mamá, llevo conduciendo el coche desde hace años, que me enseñó papá. Ya  me han pillado varias veces pero uno de mis colegas es poli y me quita las denuncias.-dijo mi hermano bostezando.- si incluso conduzco mejor que tú seguro.

-En ese caso, te llevas a Bill.- dijo mi madre.

-¿Qué?- dijo mi hermano escandalizado.

-¿Cómo? Emm prefiero ir en autobús...-los dos mirábamos a nuestra madre muy confundidos.

-Lleváis dos semanas sin hablaros, y a eso se le suman los 4 años que has estado estudiando fuera, así que ya es hora que dejéis vuestras diferencias y os llevéis como buenos hermanos.- dijo mi madre saliendo de la habitación.

Tom me miraba serio apoyado de brazos cruzados en el marco de la puerta, yo no decía nada, alcé una ceja cuando ya llevaba un buen rato en silencio mirándome. De repente hizo esa sonrisa curvada, era muy bonita, maquiavélica, pero perfecta, tenía los dientes bastante perfectos y blancos.

-En fin Billy, vístete.- dijo con una falsa sonrisa.

-¡Tú también Tommy!- dije yo con otra sonrisa falsa y burlesca, sabía que no le gustaba que le llamaran Tommy.

-Sabes, sin los ojos pintados, puedes llegar a ser casi tan guapo como yo,- ¿me estaba llamando guapo o se estaba burlando de mí? Espera, es Tom, obviamente se estaba metiendo conmigo.

Me levanté y el se apartó del marco de la puerta, le cerré la puerta en sus narices dando un pequeño portazo. Este niño realmente me ponía de los nervios.

A ver, nuevo instituto, nuevas personas, y encima a la mitad...Debo ir bien.

Puse la música que me gustaba, para molestar un poco a Tom, me gustaba el rock así que lo puse.

Mientras sonaba la música elegí mi atuendo. Elegí una camiseta negra con un dibujo de una calavera en ella, escogí unos pantalones vaqueros un poco anchos que cubrían las zapatillas blancas que llevaba. Me pinté el ojo muy oscuro con la sombra, y me puse un poco de laca en el pelo. Algo que  yo tenía y admitía era que, yo tenía mucha autoestima, así que podría decirse que , iba realmente guapo, aunque daba igual lo que me pusiera, se me iba a ver bien igualmente.