Cap 41 Dulce dolor

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¡Hola! Soy Vega, les vengo a dar las gracias por todo el apoyo que está recibiendo "Mi uso".
También vengo a darle las gracias a @Elizabeth-gm, por los increíbles edits que está haciendo sobre la historia, también quiero que vean esta foto que ella editó.

 También vengo a darle las gracias a @Elizabeth-gm, por los increíbles edits que está haciendo sobre la historia, también quiero que vean esta foto que ella editó

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¡Gracias Eli! Gracias a los demás también, ¡¡¡os amo mil!!!

Con cariño, Vega.

By Bill

-Ya está bien Bill.- alcé la cabeza de mi preciado sándwich a la persona que me acababa de hablar.

-¿Mhm?- exclamé.

-Llevas días evitándome.- separó la silla pegada a la mesa y se sentó frente a mi.

-No lo hago.- le afirmé seriamente.

Bruno tenía razón, lo estaba haciendo pero yo estaba tan confundido.

Suspiró.- ¿Te arrepientes?

-...

-¿Ósea que si...? Creí que te gustó.

-Que no haya respondido no significa que me arrepienta.

Hubo un mini silencio, miró hacia los lados para analizar que estuviéramos solos y me agarró de las manos.

-¿Entonces? Porque está claro que lo haces y no me puedes engañar, soy mayor que tú.

-Ya ya...

-¿Eso es lo que te preocupa? No somos pareja.

-¡Lo sé! No te he estado evitando yo simplemente he estado ocupado.

-¿Con qué?

Fruncí el ceño.-Bruno eres mi jefe no creo que te resulte necesaria esa información sobre mi para trabajar.

Hizo una larga e intensa respiración.-No pensaste que era tu jefe cuando tocaste a la puerta de mi casa y te me lanzaste para comerme la boca.

Solté sus manos y me levanté de la silla, agarré mi teléfono y lo miré. Volví a poner mi mirada en Bruno que me miraba con amplia atención.

-Tampoco te negaste y pusiste pegas para metérmela.- adelanté para irme de ahí, pero me agarró de mi brazo.

-...

-Suéltame.

-¿Y si no quiero que?- tiró de mi y me puso cara a cara con el, ambos rozábamos las puntas de nuestras narices.- ¿Qué harás si no te suelto?

Su atención puesta en mis labios me ponía nervioso, y estando tan cerca aún más...

Suspiré.-Gritaré.- exclamé mirando sus labios también.

Bruno sonrió y juntó nuestros labios de manera feroz, devorándome.

Se separó durante un pequeño momento, ambos podíamos notar la respiración acelerada del otro.
-No he podido escucharte gritar, ahora.- recalcó.

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