By Bill
Estábamos mamá, Marian, Merlí y las niñas en una cafetería, las niñas tenían una gran taza de chocolate así que las copié y me pedí lo mismo.
Merlí no dejaba de hablar de su gran colección de cañas de pescar, entendí que le gustaba mucho.
Yo asentía todo el rato sin prestarle mucha atención, mi mente estaba ocupada pensando en él. Hacía días que no nos hablábamos, desde aquella discusión. Solo nos veíamos para ir al instituto y para volver a casa, aunque a veces me llevaba Georg. Aún no sabía quién sería ell que estuviera dispuesto a romper su orgullo y pedir hablar las cosas, ya me cansaba. Me cansaba de apenas mirarnos, aunque yo siempre le miraba cuando no se daba cuenta, a veces iba a donde él estaba y asomaba mi cabeza para ver que hacía. Me cansaba no poder tocarle, besarle, abrazarle... te hecho de menos tonto...
-Es fantástico, ¿verdad?- la pregunta de Merlí me sacó de aquel pozo de deseo de volver a estar con Tom.
-Emm, si, realmente fantástico.- no tenía ni idea de qué hablaba.
-Oye, ¿quieres venir conmigo a pescar esta noche?- Merlí pasó su brazo por mi nuca.
-Emm, si claro.- le hice una sonrisa amistosa.
-Es genial, Simone esta noche probarás.- Marian fue cortada por Merlí.
-Oh no cariño, este plan es solo para hombres.- dijo Merlí mientras le daba pequeños picos.
-Oye, ¿Tom está incluido en el plan? hace días que lo noto extraño. Solo está en casa para darle al saco de boxeo, sale de casa y aparece, y además intuyo que se está metiendo en combates y peleas otra vez, el otro día discutí con él sobre algunos moratones...
Mamá se dio cuenta que Tom estaba "raro", ¿tanto le afectaba a Tom nuestras peleas?, siempre pensé que le importaban una puta mierda, desde pequeño le di igual.
-Podría venir si quiere, pero nunca le ha gustado la pesca.- a mi tampoco pero un plan con un familiar se agradece a veces.
¿Que por qué sabía que no le gustaba la pesca?
. . .
Me encontraba en el sofá, sin camiseta, solo con los pantalones. Tenía un cuenco con leche y cereales y estaba viendo un programa en la tele que encontraba interesante.
Tom estaba en el salón también, sentado en la silla enseñándome a la misma vez una sudadera que se había comprado.
-¿Esta chula verdad?- me modelaba.
-Sí, esta bien, demasiado grande tal vez.- él se rió.
-Es mi estilo, eso no cambiará.- se miraba la propia sudadera, y de repente abrió los ojos como platos e hizo una sonrisa maliciosa. Yo alcé una ceja esperando a que soltara el por qué de su expresión. - Pruébatela.
-Que va.- él se quitó la ancha sudadera.
-Ala va, es enorme si , y te la quiero ver puesta.- lo ignoraba por completo.
-Déjame ver la televisión.- esquivaba su cuerpo con la cabeza que me tapaba la pantalla de la tele.
-¿Esa mierda de pesca? que aburrido eres, no sabía que te gustaba pescar.
-No no me gusta pero no hay nada más interesante en la tele.- se sentó a mi lado y se puso a analizar el programa.
Las caras de asco de Tom eran increíbles, me daba mucha gracia. De vez en cuando alternaba mi mirada en la televisión y en su cara.

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MI USO
Fanfiction(Novela) Bill, un chico el cual no estaba en su ciudad natal, debido a temas de estudios y otros asuntos personales, llevaba cuatro años fuera de casa. Su hermano era un chico ejemplar pero de un momento para otro cambió totalmente, y esa fue una de...