131: No es un sueño

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Después de que karin terminará de peinarla, himawari fue a busca a Tarik, él estaba en el jardin, a esa hora kab solia enseñarle a usar la espada, algo que a Tarik le encantaba, cuando él la vio, hizo movimientos aún más exagerados, intentando impresionar a himawari.
A kab le pareció que Tarik se comportaba como un pavo mostrando sus plumas, presumidamente.

Kab: Será mejor que demos el entrenamiento por terminado.

A Tarik le encantaba practicar con la espada, normalmente él siempre pedía seguir un poco más, pero himawari le estaba esperando, así que ese día no dijo nada. Al terminar le entregó la espada de madera a su padre y salió corriendo a saludar a himawari.

Tarik: ¿Lo has visto? Mi padre dice que estoy aprendiendo rápido, que pronto me convertiré en un excelente espadachín.

Himawari: Si, te veias genial moviendo tu espada, tanto que me dieron ganas de aprender a manejar la espada.

Tarik: Eso seria genial, le dire a mi padre que te enseñe también, no debe de ir lejos, iré a buscarlo.

Himawari tomó la mano de Tarik, impidiéndole que se fuera

Himawari: Se lo preguntare despues, quedate conmigo.

Tarik: Está bien.

Himawari arrastró a Tarik debajo de un árbol rosa, ella se sentó en el suelo y él hizo lo mismo. Tarik empezó a hablar de lo bien que se le daba practicar con la espada, pero al ver que himawari no le prestaba atención, le preguntó

Tarik: hima ¿Qué pasa? Pareces triste.

Himawari: fin veré a mis padres en persona.

Tarik sonrió ampliamente, sabía lo mucho que su amiga deseaba ver a sus padres en persona.

Tarik: Me alegro por ti, pero no pareces muy feliz. ¿Ya no quieres verles?

Himawari: No es eso, estoy feliz porque por fin podré abrazarlos.

Tarik: Entonces. ¿Por que te ves tan triste? Tus padres vendrán y podrás estar con ellos, eso es lo que siempre has deseado.

Himawari: Es que mis padres no vendrán, seré yo la que vaya a verlos, volveré al reino humano.

Una expresión de tristeza se posó en el rostro de Tarik.

Tarik: ¿Eso quiere decir que no volveré a verte?

Himawari; La tía karin dijo que solo me iré por un tiempo.

Tarik: ¿Cuánto tiempo será?Falta un mes para micumpleaños. ¿Ya habrás regresado?

Himawari: No lo se, pero lo intentare.

Tarik: ¿Y cuando te iras?

Himawari: Nos iremos mañana.

Tarik: Tus tíos y Uzziel también se irán.

Himawari: Si.

Tarik: Me sentiré solo en el palacio cuando se vayan, así que no tardes mucho en volver, para que podamos seguir jugando juntos, no te olvides de mi.

Himawari tomó su mano y le dijo.
“No lo haré, nunca podría olvidarme de ti, tu tampoco te vayas a olvidar de mi mientras no estoy.”

Tarik apretó la pequeña mano de su amiga y le respondió “Nunca podría olvidar a mi mejor amiga.”

Ese día, himawari jugó con Tarik todo el día, incluso cuando llegó la noche, no se separaron, ellos durmieron juntos tomando sus manos. Al día siguiente, cuando llegó la hora de partir, Tarik le dio un abrazo a su
amiga

Tarik: Diviértete con tu familia y vuelve pronto, te estaré esperando.

Una gran sonrisa se dibujó en los labios de himawari y le dijo hasta pronto Tarik. El portal ya estaba abierto, karin le dijo a himawari.

Karin: Ya es hora de irnos.

Himawari tomó la mano de karin y se dirigió al portal, antes de atravesarlo, se giró para ver a su amigo una vez más y le dijo a Dios con la mano.
Himawari cerró sus ojos cuando cruzo el portal, ya que una intensa luz brillo, cuando volvió a abrirlos, se encontró en un lugar completamente diferente, en un hermoso jardín, detrás había un enorme palacio con altas torres que se elevaban hacia el cielo, era hermoso, pero eso no llamó la atención de himawari, si no la pareja que había frente a ella, una hermosa mujer cabello obscuro qué intentaba contener las lágrimas y un hombre alto y atractivo que la veía
fijamente. Eran sus padres, aunque himawari los había visto incontables veces a través del espejo mágico, el sentimiento que tuvo fue completamente diferente, como si los personajes de su libro favorito cobrarán vida. Hinata fue la primera en acercarse, ella se quedó mirando a su pequeña, había crecido mucho, ella había dejado de ser la bebé que arrullaba en sus brazos, hinata la abrazó, quería sentir su calor y comprobar que era real.

Hinata: Mi pequeña, por fin te puedo tener en mis brazos otra vez, no te imaginas lo mucho que te he extrañado.

Hinata se separó un poco, tomo el rostro de su hija entre sus manos, acaricio sus mejillas regordetas

Hinata: Eres aun mas bonita de lo que recordaba.

Himawari le dio un gran sonrisa y acarició con timidez el rostro de su madre

Himawari: Tú también eres muy bonita mamá.

Naruto se acercó a ellas, puso una rodilla en el suelo para quedar a la
misma altura de himawari y hinata quien estaba de rodillas acariciando el rostro de su hija.

Naruto: Hola Himawari, soy papá. ¿Me recuerdas?

Himawari se había separado de sus padres cuando era una bebé, ella no
recordaba nada de sus padres, solo sabía que eran ellos porque los había visto a través del espejo mágico.

Himawari: No te recuerdo, pero sé que eres mi padre.”

Él las abrazó y le dijo a su pequeña quien le veía con grandes ojos.

Naruto: Bienvenida a casa, himawari

Himawari: Ya estoy de vuelta Respondió con una gran sonrisa.

Himawari siguió llorando durante un rato mientras se aferraba a su hija, se pellizcaba el brazo de tanto en tanto para comprobar que aquello no era un sueño y de que en verdad tenía a su hija en sus brazos nuevamente.
Cuando hinata por fin pudo calmar su ansiedad y sus lágrimas, miró a karin y sasuke, y les dijo. “Muchas gracias karin, gracias sasuke, gracias por
cuidar de mi hija todo este tiempo y muchas gracias por habermela traído de vuelta.

Naruto se separó un momento de su esposa e hija, y le dio un fuerte
abrazo a su hermano y a Uzziel, quien se aferraba a los brazos de su padre y escondía su rostro en su cuello.

Naruto; bienvenidos a casa.

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