Jugar con la oscuridad. (Parte 2)

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Milán , Italia

Larisa.

Así como las verdades salen a la luz. También las miradas se encuentran en momentos inesperados sacando a relucir los secretos.

El lugar es activo. Para las personas que son de ese ambiente. pero, ¿quién iba a disfrutar,estando vigilados a cualquier movimiento que dábamos?.

Y no solo ellos estaban controlando.

Ho un ricordo sfocato di dov'è il tuo sguardo. (Tengo un recuerdo borroso donde esta tu mirada) —me susurra a mi derecha el hombre, pasando su mano por mi cintura.

Tutti le prestano attenzione (todo el mundo está atento a ella) —tambien le susurro y veo una sonrisa en su rostro.

Nessuna donna...(no mujer) —niega con la cabeza riéndose— Io, anche se portato al limite, non dimentico ciò che mi attrae. (Yo, aunque esté tomado hasta el tope, no olvido lo que me atrae.) —pide otra ronda de whisky.

Bene, allora ricorda bene...(pues, entonces recuerda bien) —agarro un trago—...Perché potremmo vederci solo oggi.(Porque puede que solo hoy nos veamos) —bebo del vaso.

Me mira directamente a los ojos. no abandonando su sonrisa encantadora que con solo verla ya me estoy encendiendo como horno.

«Madre mía este hombre es un pecado».

«Y yo una pecadora».

Non ho dubbi a riguardo. perché so che ci rivedremo. (No tengo dudas de eso. porque sé que nos veremos de nuevo) —pasa su mano en mi mejilla rozándome un golpe en la quijada y doy un quejido interno a tal acción.

Sonrío cuando me pasa otro trago disimulando los reportes de mis compañeras por los auriculares. Volteo a hacia las barandas y me levanto del sillón yendo hacia ellas que rato después lo siento atrás mía. Con su nariz metida en mi cuello. Respiro hondo al sentir sus manos en mi abdomen donde tengo cortadas y moretones.

Andiamo nelle stanze. (Vamos a las habitaciones) —susurra a mi izquierda apretándome más contra el barandal del segundo nivel—. Non mi sfuggirai stanotte. (No te escaparás de mí esta noche) —me jala hacia las escaleras.

Mientras vamos dando el primer paso para bajar del segundo nivel. Veo que se levanta un hombre al fondo apuntando directamente hacia nosotros y lanzo a mi acompañante a la derecha mientras yo me refugio detrás de una columna sacando mi arma cargándola al instante. Se asombra el hombre al verme sacar mi arma debajo de mi vestido, Y solo le doy una sonrisa empezando a disparar hacia el atacante.

«Enserio que no dejan disfrutar nada».

Enciendo los demás micrófonos y solo escucho más gritos acompañados con disparos del lugar.

—¡LIZ DONDE CARAJOS ESTAS! —grito escondiéndome otra vez.

—ESTOY EN LAS HABITACIONES DEL AEREA OESTE —grita que también la escucho disparar.

OSCURA REALIDAD [En proceso]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora