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Draven.
Nadie sabe leer la mente, exprésate con claridad. Si te preocupas demasiado por lo que piensen otras personas, en efecto te convertirás en su esclavo.
Otro día más de mierda en esta situación que no solo mis antepasados me incluyeron en ello. sino también por algunas desiciones que he tomado a través del tiempo.
—Jefe ya están aquí —avisa Diego desde el umbral de la puerta de mi oficina.
—Que se dirijan hacia la sala de reuniones —digo terminando de firmar los contratos pendientes—. En un momento estaré con ellos.
Solo asiente saliendo de la oficina que al mismo tiempo veo entrar a Zayden yendo hacia los sillones pegados en los ventanales sentándose como siempre lo hace.
—Tienen miedo —asegura con una sonrisa burlona—. Si no, No hubieran asistido tan rápido a tu llamado.
—Ellos ya deben saber que no tienen alternativa —digo pasando a la otra carpeta—. Un paso en falso y son historia.
—Son como ratones que persiguen el olor del queso —se levanta y se va hacia donde están las botellas de licor—. Además que según ellos, piensan que haciendo tratos con nosotros les vamos a perdonar lo que han hecho —se sirve whiskey y lo toma.
—Ni lo recuerdes —guardo las carpetas en la gaveta del escritorio—. Ahora vamos que necesito hablar con ellos —me levanto de mi silla y camino hacia la puerta de salida arreglando mi traje en el transcurso.
Atrás me sigue Zayden siempre con el vaso de licor. Bajo las escaleras del segundo nivel y cruzo la sala central de la casa, me voy al pasillo que conduce directo a la sala de reuniones que al llegar me abren las puertas de inmediato callando a los que están alrededor de la mesa.
—Señores —hablo dirigiendo mis pasos a la silla central de la mesa—. No les agradezco que hayan venido hasta mi casa. porque es su obligación asistir a mi llamado —me siento en la silla al frente de todos.
—Señor... —trata de hablar el presidente de Polonia pero levanto la mano para que no hable.
—No he terminado presidente —digo viéndolo directamente y el solo asiente agachando la cabeza—. Cómo decia, Los mande a llamar porque quiero a mi disposición sus compañías militares —me acomodo en mi lugar colocando el codo en la mesa y pasándome la mano en mi barba—. Y se que aceptarán porque saben las consecuencias de decirme, "No" —hago énfasis en la palabra.
Todos solo Asienten y volteo a ver a Zayden que está parado al lado de la mesa terminando su vaso de licor. Por el rabillo del ojo veo que alguien levanta la mano y es nada más que la presidenta de Eslovaquia así que le concedo el permiso de hablar.
—¿Se podría saber cuándo y para que los quiere? —pregunta viéndome directamente y bajo mi mirada hacia su escote pronunciado que siempre carga.
—¿Para cuando?, A todos los soldados que tengan los quiero para mañana mismo en mis territorios a primera hora sin faltas —dejo en claro viendo a todos en general—. ¿Para que los quiero?, Eso no les interesa. Lo único que deben saber es que ustedes están para servirme cuando yo lo quiera ¿Quedó claro? —pregunto señalando a cada uno con el cigarro que saque.
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OSCURA REALIDAD [En proceso]
AcakEl camino del destino no es para débiles, no es para aquellos que se caen y no se levantan. Es para aquellos que a pesar de las heridas siguen adelante hasta el final. Así es como surgen estás dos hermosas mujeres, mellizas; provenientes de Alemani...