Love In The Eyes. (Parte 2)

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En el momento en que Rhaenyra puso un pie en aquella casa de dos plantas, tuvo la leve esperanza que aquel local fuese solo una taberna más de todas las que habían repartidas por la capital, pero nada más lejos de la realidad. El sitio estaba abarrotado, con personas por doquier y entre los muchos rostros reconoció a varios nobles de la corte. Para ventaja de la princesa, su cabello rubio platinado estaban oculto y recogido dentro de un gorro de lana negro mientras sus ojos violetas eran difíciles de apreciar con tan escasa luz dentro de aquel local. Además, la ropa que llevaba la princesa la hacía pasar desapercibida a los ojos de los nobles que allí se encontraban en compañía de prostitutas, porque ellos estaban acostumbrados a verla siempre con ropas elegantes portando joyas de piedras preciosas.

Tanto Daemon como la princesa tuvieron que moverse con dificultad entre la gente que bebía mientras se abandonaban a las caricias de mujeres preciosas que llevaban muy poca ropa. La mayoría de las mujeres que habían en esa parte del local vestían con túnicas vaporosas y traslucidas que dejaban casi a la vistas sus figuras esbeltas. Rhaenyra siguió avanzando de la mano de su tío, pero sin dejar de observar a su alrededor como la gente reía y bebía mientras los hombres manoseaban a las mujeres que se dejaban tocar y besar por unas pocas monedas.

¿Adónde me lleváis? —preguntó Rhaenyra en Alto Valyrio, acercándose a su tío.

Daemon la miró y le guiñó un ojo, mientras seguían avanzando entre la gente. Justo en el centro de un gran salón, con suelos de madera y ventanas opacas, sobre una especie de plataforma redonda, habían tres mujeres desnudas con diferentes símbolos pintados en su piel. Entre esas mujeres se encontraba un hombre también desnudo que las tocaba sin ningún pudor mientras ellas danzaban y se contorsionaban a su alrededor. Rhaenyra vio por primera vez un pene, pero más allá del asombro por el considerable tamaño del miembro de ese hombre, no sintió nada más. En cambio su mirada buscaba las figuras femeninas, contemplando las curvas de las caderas, las siluetas perfectas de las cinturas y la redondez de los turgentes pechos de las mujeres que danzaban alrededor del hombre desnudo.

La mano de su tío la sacó de la ensoñación que le provocó ver por primera vez a mujeres desnudas. Daemon le ofreció una copa de vino a la que Rhaenyra tomó sin poder apartar la mirada de la belleza de aquellas mujeres que mostraban una flexibilidad asombrosa, algo que no pasó desapercibido por su tío que la dejó disfrutar un rato más del espectáculo.

Como la princesa iba vestida con una ropa holgada, unas tallas más de las que le correspondía, las mujeres del local pesaron que se trataba de un apuesto joven. Ante la atenta mirada de Daemon, dos chicas se acercaron a la princesa pensando que ella era un hombre, ofreciéndole sus servicios. Las mejillas sonrojadas de Rhaenyra, cuando las dos mujeres comenzaron a besarla por el cuello y paseaban las manos por sus piernas en búsqueda de excitar un miembro que no existía, provocaron una carcajada en Daemon, que con solo chasquear los dedos alejó a las dos prostitutas de su sobrina.

La princesa con los nervios mezclados con excitación aún recorriendo su cuerpo, bebió de la copa volviendo a prestar atención a las tres mujeres que estaban sobre aquel podio de madera. Una de las mujeres estaba sentada a horcajadas follando con todas sus fuerzas el enorme miembro de aquel hombre que desaparecía por completo dentro de ella. El hombre no paraba de gemir, mientras le mordía los pezones y con sus enormes manos sujetaba con firmeza la delicada cintura de la mujer marcándole el ritmo de los movimientos sobre su pene.

En la parte posterior de aquel podio estaban las otras dos mujeres, aún de pie, observando la escena mientras se acariciaban entre ellas sus pechos y se besaban sin pudor. Rhaenyra pudo ver como una de las dos mujeres le pellizcaba a la otra los pezones con fuerza acto que parecía disfrutar porque se mordía el labio inferior demostrando su éxtasis.

Fate Of The Kingdoms.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora