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Irin

Le mando un mensaje a Heng con una sonrisa y suspiro antes de hacer mi siguiente acción.

—¡FreenBecky es real! —Digo saltando encima de Noey, quien se encontraba acostada en mi cama.

—¿En serio? ¡Genial! —Oigo que responde, asiento con la cabeza.

—Ahora Freenbecky y Noerin podrán tener una cita doble —Admito riendo, ella asiente, pero luego niega.

—Pero yo te quiero solo para mí —Admite seria, aunque luego al ver mi ceño alzado comienza a reír—. Te la creíste, no soy posesiva.

—Ya te iba a echar —Respondo sonriendo, ella se acerca a mí y con una sonrisa en su rostro deja un beso en mis labios.

—Te quiero, Irin —La sonrisa de mi rostro aumenta al escucharla decir aquello.

—Yo también te quiero, Noey —Respondo sonriendo.

Mi celular vibra, y lo agarro, notando como el nombre de Freen resalta en la pantalla.

—¿Cuántas cucharadas de azúcar le pone Bec a su café? —Leo el mensaje en voz alta, Noey comienza a reír y yo también.

Le respondo el mensaje y dejo el teléfono de lado, dándole un beso a Noey en los labios y caminando hacia la puerta de la habitación.

—Tengo hambre —Admito.

—Irin, tú siempre tienes hambre —Escucho que dice la mas alta ocultando su cabeza en la almohada.

—Y tú siempre tienes sueño, así que cállate —Es mi respuesta.

Salgo de la habitación escuchando su risa y una sonrisa se mantiene en mi rostro.

Pasando ya el medio día me llegó un mensaje de parte de Bec, quien ignoró todos los emojis de lunitas pervertidas que le mandé.

—Fiesta en la casa de Freen para celebrar —Leo el mensaje en voz alta para que Noey también lo pueda escuchar.

—¿Puedo invitar a unas amigas? —Pregunta, y mi sonrisa desvanece—. Dije amigas, celosa.

—¿Para qué?—Pregunto.

—En realidad solo quiero invitar a Nam, es nueva en la ciudad, y no le vendría mal salir de su casa —Admite, la miro fijamente y termino asintiendo.

—Muéstrame una foto de ella —Pido, Noey saca su teléfono y me muestra su foto de perfil—. ¡Es perfecta para Heng!

—¿Para quién? —Pregunta, niego con la cabeza.

—Nadie, nadie —Respondo mientras busco el contacto de mi amigo en mi teléfono.

Convencer a Heng no fue tan difícil a mi parecer, y eso fue extraño, ya que suele ser un tanto... amargado, a veces.

—Y dime... ¿tu amigo es 100% heterosexual? —Pregunta Noey mirándome desde la otra parte del sillón, asiento.

—Eso creo —Admito, ella me mira con el ceño alzado—. ¿Celosa?

—¿Qué? No, yo no soy celosa —Recuerda mirando hacia la televisión.

—Pues... déjame admitir que Heng es increíblemente guapo entonces —Respondo, Noey concentra su mirada en mí y se encuentra seria—. Además tiene un físico increíblemente trabajado y...

—¿Por qué no te quedas con él entonces? —Pregunta Noey mirándome, comienzo a reír.

—"Yo no soy celosa" —Digo mientras río, Noey bufa pero se acerca a mí dándome besos en los labios.

—No juegues conmigo así, bebé —Dice antes de comenzar a besar mi cuello.

—Noey... —Susurro, para luego morder mi labio inferior, quiero que continúe, pero ella se aleja.

—Oh, lo siento bebé, pero es mi venganza —Dice antes de caminar hacia la cocina, la miro con la boca entreabierta y luego suspiro.

Maldita.

La pelicorto vuelve con el ceño alzado, y luego suspira mirando su teléfono.

—No sé quién hizo esto pero lo va a pagar —Lee en voz alta, para luego girar su teléfono y mostrarme un estado de Heidi.

En la foto, se podía ver perfectamente el interior de su casillero lleno de insultos hacia ella con marcador permanente, y una carita de un panda dibujada entre estos.

—Bebé, ¿tú tuviste algo que ver con esto? —Pregunta, niego con la cabeza.

—Oye, no, ¿cómo puedes pensar eso? Obvio que yo no lo hice —Digo defendiéndome—. Además, es imposible, hoy falté a clases, ¿lo recuerdas?

—Uh... es verdad —Responde Noey antes de regresar a la cocina.

Una sonrisa aparece en mi rostro cuando Noey deja de mirarme.

Oh, Heidi, esto es solo el comienzo. Desearás nunca haber golpeado a mi mejor amiga.

Estaciono el coche cerca de la casa de Freen y puedo notar la sonrisa en los labios de Noey, mi novia.

Verdaderamente decirle así me encanta.

Nuestra vestimenta era bastante similar.

Bajamos ambas del vehículo y caminamos hacia la casa de la castaña, en donde por cierto la música se encuentra un tanto alta, pero no tanto.

Al entrar, nos recibe Bec, quien nos sonríe a ambas. Se encuentra feliz, y eso también me hace feliz a mí. Hacía mucho tiempo que no veía a Bec tan emocionada por una fiesta.

—¡Hola! —Dice abrazándome, y luego hace lo mismo con Noey—. Freen está preparando el karaoke para luego, espero que participen.

Miro a mi novia, quien por cierto lo único que hace es asentir y puedo notar el hoyuelo que resalta en su mejilla. Es tan linda.

—¡Perfecto! Luego díganme la canción que van a cantar, nos vemos luego —Dice la ojiámbar desapareciendo entre la multitud, hay bastantes personas en la casa.

Heng no demora en llegar a la fiesta a decir verdad, casi llega al mismo tiempo que nosotras, y como estábamos en la puerta principal él simplemente nos saluda, y se va entre la multitud.

—Espero que el plan salga como está planeado —Digo entre un susurro, Noey asiente.

—Yo también —Responde.

Caminamos por la multitud siguiendo a Heng, y vemos a Freen y Becky entrar en acción, hablando sobre la chica que no está bailando con absolutamente nadie.

Sonreímos las cuatro al ver que Heng se acerca a ella y comienzan a hablar.

—Podía jurar que se conocen de algún lado —Digo viendo como Heng le sonríe, y ella a él apenas se ven.

—Lo mismo creo —Responde Noey antes de chocar palmas conmigo.

Misión hacer que Hend y Nam se conozcan completada.

Aún te recuerdoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora