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Freen

A Becky le gustan las chicas, y siento que cuando dijo aquello de "más ahora" se refería a mí.

Eso me pone feliz.

Me hace feliz pensar que le gusto a Rebecca, al menos un poco. Porque... a mí también me gusta ella.

No obstante, sé que hay algo que la está frenando, lo puedo ver en sus ojos cuando me mira.

Heidi.

Debo hablar con ella, explicarle que estoy sintiendo cosas por otra persona. Porque... no puedo seguir con esta situación.

Freno el vehículo cerca del cine, y caminamos hacia la entrada del mismo. Bec se encuentra emocionada, porque dice que por fin podrá pagar ella algo en el día.

Es demasiado linda.

—¿Qué miraremos? —Pregunto, ella me mira sonriendo, y siento mi corazón acelerarse.

—Ralph 2 —Responde, y le devuelvo la sonrisa.

—¿Película para niños, Becky? —Pregunto, sus mejillas se vuelven un poquito coloradas, y río.

Bec suele sonrojarse mucho cada vez que le digo algo como aquello, y es divertido verla así.

—No son para niños, Sar

—¿Segura? —Pregunto, yo también quiero mirar la película, pero me gusta pelear.

—Segurísima —Becky se encamina hacia la fila que hay para comprar boletos y la sigo—. ¿O acaso quieres mirar una de terror?

—¡No! Digo... no, porque te asustarías —Respondo nerviosa, Bec comienza a reír y luego yo también lo hago.

—Sar, no necesitas mentir, sé que te da miedo las cosas de terror, es normal —Ríe.

—Está bien.

Luego de haber comprado los boletos para ir a mirar la película, debemos esperar media hora para poder entrar a la sala. Con Rebecca nos sentamos en unas sillas que habían allí, y comenzamos a comer las palomitas que ella compró.

—Están ricas —Digo sonriéndole, ella asiente y me mira.

—Como... —Rebecca iba a decir algo, pero se calla, y puedo notar como sus mejillas quedan rojas en cuestión de segundos.

—¿Cómo...? —Pregunto, Becky niega con la cabeza mientras come palomitas.

—Nada —Responde.

Continuamos comiendo palomitas y me río, Bec simplemente se mantiene callada mientras come, y sus mejillas aún siguen rojas.

¿Qué me habrá querido decir?

—Ya es la hora —Digo mirando mi teléfono, Becky asiente mirando el suyo pero luego suspira—. ¿Pasa algo?

—No, nada —Admite sonriendo, guarda su teléfono y se pone a hacer la fila para entrar a la sala.

Esperamos aproximadamente cinco minutos para poder entrar, los asientos que Bec había elegido eran arriba de todo, y como era una película en 3D —A mí preferencia—. se veía mejor allí.

Nos sentamos, y nos mantenemos allí, susurrando cosas entre nosotras ya que la película no había comenzado aún, y solamente estaban pasando publicidad.

—Bec, ¿Tú que piensas de Irin? —Pregunto, ella me sonríe.

—Es una gran chica, y es linda—Por alguna razón mi corazón se acelera, y al parecer la sonrisa que tenía en mi rostro desaparece—. No me mires así, Sar. Ella es solamente mi mejor amiga.

Aún te recuerdoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora