Los chicos de la mudanza descargaron la furgoneta y se fueron en cuanto les dio permiso.
- ¡Bueno, pues aquí estoy!- dijo Chiara
en voz alta mirando como sus cajas y
equipaje quedaban esparcidos por el
salón-.- Sí, aquí estás, ¿cómo te sientes? -le
preguntó Ruslana saliendo de la cocina con un par de botellines de cerveza fría en las manos. Se sentó en el sofá, le tendió uno y ésta se sentó junto a ella-.- Nerviosa, asustada... no sé... estoy
intranquila, pero también feliz. ¿Crees que estoy loca?- le preguntó dándole un trago a su cerveza-.- ¡Lo estás! Pero te quiero -le dijo su
amiga dándole un beso-.- Gracias -le contestó con una sonrisa
y brindando con ella al choque de los
botellines-. ¡Por las locuras de la vida!- ¡Por que todo salga como esperas!
-brindó-.Bebieron y Ruslana observó por
quinceava vez, cómo ella miraba
primero su reloj y luego el pequeño
móvil que descansaba en la mesa.- ¿Aún no sabes nada de ella? -le
preguntó-.- ¿Qué?- se sobresaltó inmersa en sus
pensamientos-.-¡De Violeta! ¿No te ha llamado? -insistió con una sonrisa-.
- No, aún no... pero bueno, no importa...- aquello no se lo creía ni ella, así que le dio otro trago a su cerveza para evitar pensar en dónde estaría-.
Ruslana se le quedó mirando, llevaba
sospechando de aquella relación
algún tiempo, pero no había tenido la
oportunidad de tener a su amiga cerca para observar sus reacciones porque siempre se escapaba a Menorca después de los encuentros con Violeta. Tan sólo sabía lo que le contaba por teléfono, y claro, aquello no era lo mismo.- ¿Qué?- le preguntó la morena viendo
que la miraba levantando una ceja-.-¿Te estás colando por ella? -le
preguntó directamente-,Chiara se giró algo más alterada de lo
que pretendía.- ¡¡¿El qué?!! -la mirada pícara de
Ruslana le hizo ponerse nerviosa-. Joh, ¡claro que no! Tendría que estar como una puta cabra para colarme por una prostituta.- ¡¡¿En serio?!! -no la creía en absoluto, aquel brillo acuoso en la mirada la delataba-.
- ¡Claro que es en serio! ¡Por favor, no
estoy tan mal eh!-le contestó, pero
irremediablemente se puso de pie y
empezó a sacar cosas de la caja más
cercana para alejarse de la mirada
inquisitiva de su amiga-. Es sólo que
me intriga, eso es todo. Además sé que
puede ayudarme, y eso pues me pone
así...excitada y nerviosa al mismo
tiempo, nada más.-¡Ya!... -siguió sonriendo Ruslana
incrédula-.El teléfono de Chiara empezó a sonar
justo en aquel instante, se lanzó con
reflejos felinos hacia él, pero Ruslana lo alcanzó antes y al ver el nombre en la pantalla lo descolgó.- ¿Si? -contestó, mientras saltaba del
sofá para que su amiga no la cogiera-.
¡Sí, sí! Un momento por favor, es que
Chiara está en el baño, creo que tiene
la tripa descompuesta, ya sabes... el
señor "Roca" que no espera."iQué hijaaaaa de putaaaaaaaa!"..
quiso gritarleeee ella que casi se había caído del sofá de cabeza, por tratar de cogerla a tiempo.- Chiaraaaa... Tu teléfonooooo cariñooo... -empezó a gritar como si la
llamara, cuando lo que en realidad lo
que hacía era correr pasillo a bajo con
la chica pisándole los talones-.
ESTÁS LEYENDO
SEX EDUCATION // KIVI
RandomChiara Oliver lo tiene todo. Futura heredera de una de las bodegas más prestigiosas del país, joven, inteligente, rica y atractiva, ve como la vida pasa por su lado sin poder disfrutar plenamente de ella. Una vivencia en su pasado, maniata su capaci...