Mientras Chiara trataba de conciliar el sueño, en el dormitorio de matrimonio Salma se pegaba a Violeta como una lapa mareada.
- ¡Hay que ver que pedo has cogido! -le susurró mientras le acariciaba el pelo-.
- ¡Mmm! ¡Se me mueve todo!- se
quejaba empezando a dormirse-.- ¿Qué te ha parecido Chiara? -se
atrevió a preguntarle la pelirroja, pues no podía dejar de pensar en ella-.- ¡Es una tía guay! ¡Te trata bien... la
consentiría! -le dijo, y eso para ella era lo máximo que podía decir de alguien-.Violeta se quedó pensativa, ella también opinaba que sería perfecta para cualquiera, incluso...
- ¡He sido una gilipollas! -dijo Salma
muy bajito, estaba casi soñando-.- ¿Por qué? -le preguntó abrazándola-.
- Creo que estoy enamorada de Denna...y tú..... -los rescoldos de su borrachera estaban llegando al estado del duermevela-.
-¿Yo qué? -le susurró Violeta-.
-Y tú de Chiara... -le dijo casi inaudible
quedándose dormida-.Las palabras de su amiga empezaron
a retumbarle dentro, las sensaciones
que tenía respecto a la menorquina cada día eran más fuertes y le creaban más intranquilidad. Ella aún no sabía qué hacer con ellas ni que etiqueta ponerles. Sí, le gustaba, incluso podía decir que la quería como también quería a otras personas pero, ¿qué era "amar"? Estaba empezando a amarla?Salma dormía plácidamente, Chiara
y Violeta por el contrario, no dejaban
de dar vueltas inquietas pensando
cada instante que habían pasado
juntas hasta el momento. Las horas
empezaron a pasar, a la morena le
dolían los ojos de no poder cerrarlos.
"Por Diosssssssssssss... no puedo
haberme acostumbrado a ella tan
pronto" se reprendía, mientras volvía
a dar otro giro en el sofá cama y se
agarraba a la pobre almohada como
podía. Si no fuera porque no queria
despertarlas, se habría puesto a ver la
tele o a trabajar en el despacho, pero
permaneció allí dando vueltas con
aquel insomnio que la desquiciaba.
De pronto creyó oír un "clik".
parecía una puerta, un silencio y un
"click" nuevamente. "Alguna va al
baño" pensó, y sin saber por qué se
quedó inmóvil como una estatua. De
pronto notó que alguien entraba en
el comedor. Miró, ya no podía seguir
disimulando estar dormida.- ¿No puedes dormir? -le susurró Violeta agachándose junto a ella-.
Ella ya tenía los ojos adaptados a la
oscuridad, así que pudo ver aquel
rostro sonriendo dulcemente cerca del suyo.- No -dijo tímidamente-.
- ¡Me lo imaginaba!- le dijo Violeta con una sonrisa y le acarició la cabeza-. ¡Hazme un sitio! ¡Me quedo contigo!
Ella esbozó una sonrisa de felicidad
absoluta, pero de pronto pensó en
Salma mientras la pelirroja abría las
sábanas para meterse a su lado.- ¿Y Salma? -le preguntó preocupada-.
- ¡A esa no la despierta ni una bomba!
-le dijo ya metida entre las sábanas de
cara a ella-. ¡Anda ven! Es muy tarde
-le dijo tranquilizándola y abriendo
los brazos para que pudiera acoplarse
entre ellos-.Chiara obedeció, apoyando su cabeza
en aquel pecho cálido que subía y
bajaba, anclándose de brazos y piernas a aquel cuerpo suave y perfumado que la envolvía como una gran caricia.Violeta cerró los ojos durante aquel
proceso de adaptación, el corazón
agitado y nervioso, se tranquilizó de
cierta manera al sentirla cerca... "Eres
tan dulce", pensaba y le acarició el pelo como lo había hecho con Salma. Le besó en la cabeza...
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SEX EDUCATION // KIVI
RandomChiara Oliver lo tiene todo. Futura heredera de una de las bodegas más prestigiosas del país, joven, inteligente, rica y atractiva, ve como la vida pasa por su lado sin poder disfrutar plenamente de ella. Una vivencia en su pasado, maniata su capaci...