Tras aquella cita del sábado, Chiara
no volvió a verla hasta la tarde del
martes. Aquello no es que le hubiera
gustado especialmente, pero se había
conformado sabiendo que cada
noche de 23 a 00:30h Violeta la llamaba para darle las buenas noches. Le consolaba que aquella mujer también pensara en ella, pero sobretodo lo que verdaderamente le tranquilizaba era saber que no pasaba la noche fuera con alguna otra clienta.Eran las ocho de la tarde cuando Violeta llamó a la puerta.
- ¡Voy! -gritó mientras se daba prisa en
alcanzar el pomo, tenía tantas ganas de verla-.Cuando abrió, se encontró con el culo
de la pelirroja, pues estaba agachada de espaldas a ella.- ¡Joder, échame una mano! -se quejó
esta-."¿Qué le eche una manooooo?? ¿en
dóndeeee???"... pensaba Chiara mientras no podía evitar mirar
hipnotizada aquel culo enfundado en
vaqueros que lo hacía ver aún más prieto y coqueto.- ¿Me ayudas o...? -Violeta giró la cabeza para mirarla, y entonces se dio cuenta de que le estaba mirando el culo-. No te cortes, toca si quieres... total, sólo me estoy desrriñonando
eh...- ¿Eiinn??...joder, perdona -se dio
cuenta de que la había pillado de
pleno, y que lo que le pedía era que la
ayudara con una mochila de equipaje
que parecía bastante pesada-. ¡Dame...
la arrastraremos!Entre las dos entraron la mochila sin
mucho esfuerzo. Violeta soltó un soplido y se dejó caer en el sofá.- uffff... no pensé que pesara tanto,
pero cuando he tenido que llevarla
desde el coche hasta el portal casi
me da, pensé que había cogido la de
ruedecitas, pero no... -relató tomando
un poco de aire-,De pronto miró a Chiara que le sonreía divertida, pero que seguía de pie lejos de ella.
- ¿Y a ti que te pasa? -le preguntó
levantando una ceja y sonriendo-.- Nada... -se encogió de hombros,
feliz-... es sólo que me alegro mucho de verte."Ayyyy Diosssssss que me la
comoooo"... a Violeta se le dibujó una
sonrisa idiota en la cara, ella también
se alegraba de ver aquella melena
negra, aquellos ojos color esmeralda, y aquella cara bella que iba a juego
con aquel cuerpo de infarto. La chica
se deleitó en la visión de aquella
mujer que hoy iba de sport, con unos
pantalones de chándal de cintura baja
grises y una camiseta de manga corta
del mismo color que dejaba ver de vez
en cuando aquel vientre plano que le
encantaba. El pelo le caía sutilmente ondulado y suelto, y Violeta pensó que a aquella mujer todo le sentaría bien, se pusiera lo que se pusiera.Se levantó y se acercó a ella. Chiara no dejó de sonreír aunque su corazón
empezó a latir desbocado por su
proximidad.- ¿Me has echado de menos? -le
preguntó con un tono sensual que a
ella le recordó a el que ponía cuando
hablaban por teléfono-.- Claro que sí -respondió Chiara con el
mismo tono--¡Pues demuéstramelo!, ¿no? -le
provocó dando un pasito más-.Chiara estiró sus dedos y le apartó
el pelo de la cara, luego paseó sus
manos por los hombros de la chica y la acercó del todo contra su cuerpo. Violeta no esperaba que le dejara acercarse tanto, pero había ansiado demasiado abrazarse a aquella piel durante aquellos tres días, como para andarse con rodeos. La abrazó y le dio un beso en la frente, luego otro en la mejilla y terminó el recorrido deleitándose en aquel cuello."Ohhhh Diosss... ¿así vamos a
empezar yaaaaaaaaa?...mmm... creo
que no debería haberme traído tanto
equipaje... Diosssssss"... pensaba
mientras cerraba los ojos, absorta en
aquella boca que la adoraba.
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SEX EDUCATION // KIVI
RandomChiara Oliver lo tiene todo. Futura heredera de una de las bodegas más prestigiosas del país, joven, inteligente, rica y atractiva, ve como la vida pasa por su lado sin poder disfrutar plenamente de ella. Una vivencia en su pasado, maniata su capaci...