𝐃𝐀𝐍𝐆𝐄𝐑 ≓ 𝐡𝐚𝐨𝐛𝐢𝐧

𝟒𝟖

ᚔᚔᚔᚔᚔᚔᚔ𝐬𝐮𝐧𝐠 𝐡𝐚𝐧𝐛𝐢𝐧ᚔᚔᚔᚔᚔᚔᚔ

El caos se había apoderado de la mansión. Cada cinco minutos sonaban los teléfonos y todos corrían de un lado para otro, sin un momento de descanso. Estaba completamente estresado, sin siquiera saber cuántos documentos había entregado ya en la oficina principal durante el día, cada uno con un tema distinto.

No tenía tiempo para descansar ni para estar con Hao, quien también estaba agobiado con papeles que firmar y llamadas que atender, obviamente al ser el jefe. Gunwook y Matthew estaban en la misma situación que yo, acompañando a Hao en cada reunión improvisada que tenían negocios con algunos socios.

Y aunque todo eso me preocupaba, en mi mente solo rondaba el extraño comportamiento de Hao estos últimos días. No comía, decía que todo le provocaba náuseas, y rechazaba cualquier muestra de afecto de mi parte. Además, su carácter había adquirido una agresividad inusual que nunca antes había visto.

Así como ahora. ¿En qué auto me encontraba? En el auto de Ricky. ¿Y por qué? Porque Hao decidió regresar en su auto junto a Gunwook y Matthew, ignorándome por completo durante todo el día.

Ricky dijo que ya no debía trabajar como guardia, ya no era necesario; sin embargo, no podía evitar sentir una preocupación creciente por la situación de Hao, no entendía su abrupto cambio de actitud y me dolía notar que algo no estaba bien con él, así que decidí seguir en guardia, más que nada por su seguridad.

Estaba tan sumido mis pensamientos, tan absorto en mis preocupaciones por Hao que no escuchaba lo que Gyuvin y Ricky estaban hablando. Fue entonces cuando sentí un tirón en mi cabello por parte de Yujin y finalmente reaccioné, volviendo a la realidad.

─ Perdón, ¿qué me decían? ─pregunté, tratando de despejar mi mente.

─ Estábamos preguntándote sobre tu sabor de helado favorito. ─respondió Gyuvin.─ Ricky va a comprar uno para hacer una maratón de novelas esta noche.

Si no estuviera tan preocupado por Hao, seguramente habría reído ante las palabras de Gyuvin, pero en ese momento mi única reacción fue un suspiro largo. Miré distraído hacia la ventana polarizada de la camioneta, sin saber qué decir o hacer. No me sentía bien y podía haberme perdido en mis pensamientos nuevamente si Ricky no hubiera vuelto a hablar.

─ ¿En qué tanto piensas? ─preguntó girándose para darme toda su atención.─ Te veo diferente.

─ Diferente está tu primo. ─respondí sin más, pero me di cuenta de mis palabras de inmediato, arrepintiéndome de hablar sin antes pensar.─ Perdón, yo...

─ No te preocupes, también lo hemos notado. ─dijo Gyuvin desde el asiento del conductor, sin dejar de prestar atención a la carretera.─ Sé que se está comportando muy distante, ha respondido a todos con frialdad. Quizás está estresado por todo lo que está ocurriendo.

─ Me siento inútil al no saber realmente qué le sucede. ─suspiré bajando la mirada.

─ Dale tiempo, está lidiando todas las emociones que surgen debido a los papeles, los negocios y los tratos que tenía planeados. ─soltó Ricky tratando de consolarme.

─ Ricky apenas puede responder llamadas de algunos socios, se pone nervioso y hasta le dan ganas de llorar si no habla como quería. ─añadió Gyuvin sin darse cuenta de la mirada de reproche del alfa rubio a su lado.─ Ahora imagina a Hao teniendo que manejar todo esto por su cuenta.

─ ¿Acabas de burlarte de mí? ─preguntó Ricky, pero Gyuvin solo sonrió y siguió conduciendo.

─ El punto aquí es que Hao está demasiado estresado, con poco tiempo, muchos papeles y muchas personas con las que hablar. ─resumió Gyuvin.