ᚔᚔᚔᚔᚔᚔᚔ𝐬𝐮𝐧𝐠 𝐡𝐚𝐧𝐛𝐢𝐧ᚔᚔᚔᚔᚔᚔᚔ
Me encontraba en la habitación, rodeado de las sombras de la noche, junto a mi hermano Taerae, quien yacía limpiando mis heridas con un paño que habíamos encontrado en aquel armario viejo. La luz de la luna se filtraba a través de la ventana, iluminando el espacio con una suave claridad.
Dentro del armario no habíamos encontrado mucho, solo algunas prendas de vestir abandonadas pero en buen estado. Debido a la curiosidad de Taerae y al inevitable sentir de alerta que siempre me acompañaba, ambos terminamos por abrirlo una de esas noches, encontrando más que nada ropa que parecía haber sido olvidada allí.
Por fortuna, las prendas calzaban bien con nuestros cuerpos, así que no dudamos mucho en usarlas y deshacernos de las que ya estaban rotas. Junto a las prendas, y en lo más oculto del armario, yacía una vieja guitarra acústica, algo desgastada y con notables rasguños que suponíamos eran del anterior dueño.
Pero aún con todos esos inconvenientes, Taerae la tomó como suya, diciendo que aún podía servir. Sonreí al ver su entusiasmo a pesar de la situación en la que nos encontrábamos. La guitarra se convirtió en un pequeño rayo de esperanza en medio de la oscuridad que nos rodeaba.
Una vez que mi hermano menor terminó de limpiar y cubrir la última herida, sonreí como un gesto de confort, notando en su mirada una tristeza profunda que me llegó al alma. Me sentí mal, muy mal, al verlo así, pero no iba a demostrar mi tristeza frente a él, no quería hacer del ambiente un lugar más pesado de lo que ya era. Así que, tomando la guitarra en mis manos, se la cedí a mi hermano, notando cómo sus ojos se iluminaban levemente al recibir el instrumento.
─ Toca una de tus canciones para mí. ─susurré, mi voz sonando débil y cansada.
Taerae miró la guitarra, luego mi rostro, y comenzó a tocar. La melodía flotó en el aire, suave y triste, como un lamento de amor perdido. La música era tan hermosa que me hizo cerrar los ojos, dejando que me envolviera y me llevara a otro lugar. La voz de Taerae se unió a la melodía, dulce y melodiosa, y me sentí transportado a un lugar donde la luna brillaba con intensidad en el cielo nocturno.
Me imaginé caminando por un campo abierto, con la luna iluminando mi camino, y la música de Taerae sonando en mis oídos. Era un lugar de paz y serenidad, donde no había dolor ni tristeza. Solo la música, la luna y mi libertad.
Y entonces, algo dentro de mí comenzó a inquietarme. Mi corazón latió con fuerza, como si estuviera tratando de salir de mi pecho. Mi lobo interior aulló con un dolor profundo, lamentándose, llamando a mi único amor. La suave melodía de la guitarra se convirtió en un lamento que resonaba en mi alma, y me dejé llevar por ella.
Y de pronto, escuché el llamado del lobo de Hao, un llamado que me llegó directo al corazón. La música siguió sonando, pero yo ya no podía contenerme. Me derrumbé en un llanto silencioso, las lágrimas empapando mis mejillas, mi cuerpo temblando con la fuerza de mi dolor.
Intenté, con todas mis fuerzas, contactar con él, sentir su presencia, su calor. Pero estaba lejos, demasiado lejos. Mierda, lo extrañaba, lo extrañaba demasiado. Quería estar a su lado, sabía que Hao estaba sufriendo al igual que yo.
Quería abrazarlo, protegerlo, hacer que su dolor desapareciera. Pero no podía, no en este momento, donde solo podía llorar, llorar por nuestro amor, por nuestra separación. La música seguía sonando, pero yo ya no la escuchaba. Solo escuchaba el eco de mi propio dolor al no estar con mi alma gemela, con mi destinado.
Unos segundos más bastaron para que la melodía terminara, la voz de Taerae apagándose lentamente, como un cálido susurro para mi alma. Aún seguía con los ojos cerrados, pero pude sentir claramente como Taerae me abrazó, atrapando mi cuerpo entre sus brazos delgados y cálidos.

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𝐃𝐀𝐍𝐆𝐄𝐑 ≓ 𝐡𝐚𝐨𝐛𝐢𝐧
Fanfiction⟪¿Crees en los destinados? Sung Hanbin, un simple alfa barista en un club nocturno. Zhang Hao, un omega huyendo de unos atacantes en la calle trasera del club. ¿Qué pasará cuando Hanbin decida ayudarlo y descubra que no es un simple omega, si no e...