Pokémon, ¡Soy un Pokemon! Entre Fronteras

II. Capítulo 47: Dependencia

¿Quién era? Todo está oscuro

¿Quién era esa voz  que gritaba desde lo más profundo de su ser?

¿Cuál es tu pasado?

Mi pasado... Nací en un huevo, abandonado por mi madre dejado en la lluvia... No...No...No... ¿Cuál es mi pasado entonces?

Nací en un hospital... Mi madre estaba en riesgo de fallecer por tenerme... El parto se había complicado... Por suerte su madre había sobrevivido, pero, según le dijo su padre, ya no podría tener más hijos. Ese dolor hizo que en los primeros meses su madre...

Había alguien más.

Creció en un entorno seguro, rodeado de Pokemon que con él... ¿Qué hacían? Ah sí, jugaban y les educaban para ser muy obedientes porque le enseñaron que no era nadie hasta que alguien les diera un propósito y esperaba con mucha alegría ese día... Llegó dicho día y su cuidadora la nombre como quien era...su ama.¡Ahora tenía un propósito y su voluntad era cumplir sus órdenes!

Mira más profundo, ¿por qué tu propósito era servirla?

¡Porque ella era feliz! No... No... No... Entonces... ¿Por qué hacía todo aquello?

A pesar de que mis padres más adelante me quisieron, era como si me sintiese solo... A quién recordaba más era... a Ruth... Mi hermana, que me contaba que cuando era pequeño, mamá cayó en una mala racha y estuvo jugando conmigo... Se encargó que estuviera bien... Luego ella rechazada en la escuela por sus compañeros y yo intentaba animarla... Muy dispuesto a ayudarla en todo lo que pudiese... Me arriesgaba a cada cosa que se le ocurría por hacer que se sintiese feliz, quizás fue demasiado lejos, pero yo... Simplemente quería disfrutar de aquello porque nos hacía sentir bien, y así yo, en cuanto pudiese graduarme... devolverle el favor que...

Algo hizo que os unierais más.

Cuando me convertí en un Noivern e iba con ella a aquellos lugares tan maravillosos en donde muchos aceptaban el mensaje que mi ama divulgaba... Pero una vez sufrió un ataque por parte de unos tipos malos y tuve que pelear por ella y rescatarla... Ella era mi propósito y mi vida, si la perdía, a saber qué hacían conmigo, era su instrumento.

¡Eres más que eso!

¡Sí!¡No!¡No! Mi propósito, mi felicidad...

Aquel día nunca lo olvidaré. Un escape de gas, una cañería rota... una pequeña discusión entre mi madre y mi hermana... Había salido porque le había dicho lo que quería estudiar, lo que iba a hacer, pero mamá la echó bastante enfadada... Yo estaba preocupado y salí tras ella. Tenía que haberla avisado, así hubieran salido...

¡Culpable!¡Culpable!

¡No lo eres! No intentes ahogar ese recuerdo. ¡Aún queda!

Encontré a Raven llorando furiosa en la entrada de nuestra calle. Le había contado lo que iba a estudiar fuera, en una universidad muy prestigiosa; pero la cosa estaba muy mal en casa y no se lo podían permitir... Quizá fue su propio egoísmo, cabezonería, o convicción. Mamá le dijo que Ruth tenía un problema en su mente... ¿Era eso? El caso es que era muy lista y era la mejor de su clase, aunque nunca la presionaron, ella se imponía sus propias condiciones.

Cuando llegó la encontró llorando, pregunté por qué lloraba y me decía que se encontraba sola, que lo único que quería era que le dijesen que era posible, aunque fuera un no, pero que le dieran un poco de aliento. Nadie creía que ella pudiera hacer nada, según decían, estaba loca. Yo sabía que no era así y la abracé diciéndola que ella podía, que la apoyaba... Una vez se calmó volvimos, mi hermana reconoció que se había equivocado con mamá, iba a pedirla perdón...