XXV

3.6K 210 26
                                    

Júlia

Cuando me desperté estaba junto a Ona en su cama, no sé en qué momento había llegado allí, me dolía la cabeza una barbaridad, creo que quizás la noche anterior me había pasado un poco.

Hay partes de la noche que recordaba borrosas, obviamente hay una que la recuerdo con cada mínimo detalle pero antes de eso me cuesta un poco recordar.

-Bon dia-Dije al ver que Ona abría los ojos.

-¿Cómo te encuentras?, ayer te pusiste fina-Dijo riendo y acercándose para darme un beso.

-Uf, ¿cómo he llegado aquí?-Pregunté confusa y ella rió.

-Me diste las llaves del coche-Contestó Ona y todo tuvo sentido.

Levantarme me costó un poco más que a ella pero lo conseguí, cuando salí de la cama Ona ya estaba en la cocina preparando el desayuno.

-Siento no habertelo dicho antes, pero hoy he quedado con mi familia para comer todos juntos, ¿quieres venir?-Me quedé algo pillada por esa pregunta.

-¿Quieres presentarme a tu familia?-Pregunté aquello con ilusión y creo que solo con verme la cara ya tenía respuesta a su pregunta.

-Si a ti te parece bien…-Dijo algo tímida.

-Me parece perfecto, aunque tendré que tomarme algún Paracetamol para quitarme esta resaca que llevo encima-Dije riendo sabiendo que no podía ir así a conocer a su familia.

Pasaron algunas horas y tuve que volver a mí casa, me vestí casual pero bien vestida y esperé a que Ona apareciera para ir a casa de su hermano, yo lo disimulaba pero estaba bastante nerviosa.

-¿Me dejas conducir?-Preguntó sonriente cuando llegó.

-No te vengas arriba-Cuando dije eso me hizo un puchero y acto seguido le di las llaves, ella sabía el control que tenía sobre mí y lo utilizaba en mi contra.

Contra más avanzábamos con el coche más nerviosa me ponía, ella se dió cuenta y puso su mano sobre mi muslo transmitiendome tranquilidad.

-No estés nerviosa, ya saben que vas y les parece perfecto-Dijo dejando un apretón en mi pierna.

-¿Y si no les caigo bien?-Dije sacando mi preocupación.

-No pienses en eso, les caerás genial-Asentí ante sus palabras y unos minutos después Ona ya estaba aparcando.

Ona tomó mi mano camino a la puerta, cuando se abrió su hermano estaba detrás, a él ya lo conocía del día del aeropuerto.

-¿Estás cagada,verdad?-Me preguntó Joan después de saludarme y yo asentí con una risa nerviosa.

La casa era bastante amplia, los tres fuimos al jardín, era muy semejante al mío, tenía parte de césped y al otro lado una piscina un poco más pequeña que la mía.

-¿Eres tú la que me ha robado a mí niña?-Dijo la que reconocí como la madre de Ona acercándose y yo tragué grueso.

-Mamá, la pobre ya está suficientemente nerviosa, no le digas esas cosas-Dijo Ona regañando a su madre.

-Era un broma para romper el hielo con mi yerna, ven aquí guapa-La madre de Ona me envolvió entre sus brazos y yo me sentí como en casa.

-Bueno, ya os habéis presentado pero esta es mi madre, Mónica, ese da allí es mi padre, Carles y allí están mis tíos con mis sobrinos pequeños, Enzo y Paula-Explicó Ona nombrando a toda la gente que había en el jardín.

Yo saludé a todos uno por uno educadamente, menos a los niños los cuales estaban apartados de los demás jugando a la pelota.

-¿Son mellizos?-Le pregunté a Ona refiriéndome a sus primos.

-Paula tiene 10 y Enzo 8-Dijo Ona mirando también a los pequeños.

-Me recuerdan a Héctor y a mí-Dije con una sonrisa y en ese momento el pequeño de los hermanos se acercó a mí.

-¿Juegas?-Me preguntó el niño sin siquiera saber quién era yo, me cogió de la mano y me llevó hasta donde estaba jugando.

Ona

Júlia jugaba sonriente a fútbol con mis primos pequeños, era la imagen más tierna que había visto en mi vida.

-Me gusta para ti hermanita-Dijo mi hermano captando mi atención.

-A mí también me gusta para mí-Dije vacilando un poco y el río.

Después de varios minutos jugando Júlia volvió con mis primos detrás, parecía que a Enzo le había gustado mi novia.

-¿Sabes que Lia es la hermana de un jugador del Barça?-Dijo el pequeño emocionado y mi chica rió ante su entusiasmo.

-¿Lia?-Dije yo confusa mirando a Júlia.

-Dice que le gusta más llamarme así-Explicó Júlia con una sonrisa enorme.

-¿Tú podrías conseguirnos un saludo de algún jugador del Barça?-Preguntó Paula igual de entusiasmada que su hermano.

-Paula…-Regañó su madre al ver que empezaban a ponerse algo intensos.

-Si me dais unos minutos puedo conseguirlo, ¿cuál es vuestro jugador favorito?-Preguntó mi chica mientras sacaba su teléfono.

-¡Gavi!-Gritaron ambos al unísono.

Júlia comenzó a escribir y unos minutos después les tendió el teléfono a mis primos, no veía la pantalla pero se escuchó la voz del sevillano reproduciendose en el teléfono de Júlia.

Ambos gritaron como locos al ver el vídeo que acababa de conseguirles mi chica, nunca los había visto tan eufóricos y dejé un beso en la mejilla de Júlia agradeciéndole el gesto que acababa de tener con ellos.

-¿Quién es tu hermano?-Preguntó mi padre curioso.

-Héctor Fort-Contestó Júlia con una sonrisa de hermana mayor orgullosa.

-De eso me sonabas, ¿eres la chica que se rumoreaba que estaba con Marc Guiu?-Preguntó mi padre curioso y mi cara cambió.

-Papá-Dije seria haciéndole ver que no tendría que haber dicho eso.

-La gente inventa mucho, Marc y yo solo somos amigos-Explicó Júlia tranquila y mi padre asintió sin preguntar más.

Nos tiramos un rato más hablando, me encantaba ver cómo Júlia hablaba con mi primos y jugaba con ellos, los niños propusieron meternos en la piscina y todos aceptamos, tuve que dejarle una parte de arriba de bañador a Júlia, mientras que la parte de abajo era de mi hermano, ya que siempre llevaba parte de abajo de hombre.

Cuando me fui a meter vi a Joan haciéndole una ahogadilla a mi novia y me tiré a la piscina para hacerle lo mismo a él, segundos después Júlia se unió.

-Sois dos contra uno no vale-Se quejó Joan haciéndonos reír.

-Buscate novia entonces-Dije vacilando y de pronto estaba sumergida bajo el agua.

-No necesito novia, me puedo compincharme con mi cuñada-Dijo chocando los puños con Júlia y yo reí negando con la cabeza.

Mi hermano se alejó para ir con mis padres y mis tíos los cuales estaban en una esquina hablando tranquilos, yo me subí a la espalda de Júlia y dejé otro beso en su mejilla.

-Que cariñosa de repente,¿no?-Dijo riendo mientras me aguantaba sobre ella.

-Todos han tenido un tiempo contigo, ahora me toca a mí-Dejé ahora un beso en su cuello y eso llamó la atención de los demás.

-¡Hay niños!-Gritó mi hermano haciéndonos reír.
____

Los nombres de los padres de Ona me los he inventado porque no he encontrado en ningún sitio los nombres reales.

Júlia con niños pequeños es un amor.

Parece que Júlia nunca se va a liberar del tema de Marc.

𝐂𝐀𝐑𝐏𝐄 𝐃𝐈𝐄𝐌-𝐎𝐧𝐚 𝐁𝐚𝐭𝐥𝐥𝐞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora