𝐂𝐀𝐑𝐏𝐄 𝐃𝐈𝐄𝐌-𝐎𝐧𝐚 𝐁𝐚𝐭𝐥𝐥𝐞

LXVII

Nora

Después de toda la tarde conociendo más de la ciudad tocaba lo mejor, en el hotel había una discoteca y obviamente íbamos a ir, Nuria y yo nos estábamos preparando en la habitación mientras su novio y Mario esperaban abajo.

-Pero por favor qué pibón, hoy follas-Soltó Nuria sin ningún tipo de filtro.

-Eres una burra-Dije riendo.

-Lo digo enserio, los vas a volver a todos locos, menos a mí novio claro-Dijo terminando de ponerse el pintalabios.

Cuando ya estuvimos fuimos en busca de los chicos, los cuales se quedaron boquiabiertos al vernos.

Al ser menores y al estar bajo la responsabilidad de los profesores en la discoteca del hotel no nos daban alcohol, pero nos las apañamos para conseguirlo.

-Tengo algo más-Habló Mario llamando nuestra atención.

Sacó de su bolsillo cuatro porros, todos nos quedamos impactados.

-¿De dónde has sacado eso?-Pregunté mientras él los repartía.

-No es difícil, aquí la marihuana es legal-Yo rodé los ojos y el rió.

-Yo no me puedo fumar esto, mis madres me matan-Dije rechazándolo.

-¿Júlia?,¿Ona?, efectivamente, tus madres no están aquí-Dijo Sergi haciendo que las buscaba.

Obviamente para fumarnos eso salimos de la discoteca, estábamos en la puerta del hotel, donde no había absolutamente nadie, de pronto noté algo que me tiraba el porro al suelo, cuando me giré vi a la chica del bar.

-¿¡Que coño haces!?-Le dije enfadada.

-¿Qué haces tú fumando esa mierda?-Preguntó devolviéndomela.

-Ni que fueras su madre, ella hará lo que quiera-Dijo Nuria metiéndose en la conversación.

-A su madre también tuve que quitarle algún porro de la boca-Me quedé impactada ante eso.

-¿Que dices?-Pregunté sorprendida.

-¿No querías saber cosas del pasado de tu madre?-Cuando dijo eso tragué grueso, quería saberlo, pero no que lo dijera delante de mis amigos.

-Si, pero no delante de ellos-Le murmuré con algo de enfado.

-Pues ven-Propuso mirándome.

-Ahora vuelvo-Di un paso y noté como Nuria me agarraba el brazo.

-Pasame tu ubicación, si no estás aquí en diez minutos voy a por ti-Dijo bastante seria.

Hice lo que me dijo mi mejor amiga y después fui con Andrea, no sabía qué coño me iba a contar, por lo que había hablado con ella parecía de fiar.

-No tengo mucho tiempo, ¿Que quiere decir que le tuviste que quitar varios porros de la boca a mi madre?-Pregunté intentando que fuese rápido.

-Con tu edad Júlia estaba pasando una etapa bastante mala, en el instituto se burlaban de ella por qué le gustaban las chicas, yo la incluí en mi grupo y mejoró un poco, se hizo muy amiga de un chico que se llamaba Jordi, este chico no hacía cosas muy legales, siempre era el amigo que nos conseguía alcohol y más cosas, Jordi murió en un accidente de coche, tu madre iba en el coche, si antes de eso estaba mal cuando eso pasó se puso peor, si no estaba pendiente de ella quizás me la encontraba tirada en el suelo inconsciente, la relación con sus padres comenzó a empeorar cuando se enteraron de todo, se fue de casa a los 17 y no volvió a tener relación con ellos hasta que se quedó embarazada de tí, yo la ayudé a salir de toda esa mierda y después consiguió sacarse la carrera y comenzar a trabajar-Me quedé sin saber que decir, no me esperaba que fuesen tantas cosas, ahora entendía porque mi madre me daba siempre la chapa sobre el alcohol y las drogas, no quería que pasara por lo que pasó ella.

Antes de que pudiera decir nada el teléfono de Andrea sonó, vi en la pantalla el nombre de mi madre y me quedé aún más sorprendida.

-¿Por qué te está llamando?-Pregunté sin entender nada.

-Porque le he enviado una foto tuya fumando-Me quedé sin palabras, ella se fue y yo me quedé ahí.

No tuve otra opción que volver con mis amigos, necesitaba algo para olvidarme de lo que acababa de pasar.

-¿Estás bien?-Preguntó Mario al darse cuenta de que iba algo perdida.

Tomé su cara y le planté un beso, no quería eso pero era la única forma de desahogarme y de olvidarme de todo.

-Nosotros mejor nos vamos-Dijo Sergi dándole un golpe en la espalda a su primo, yo miré a Nuria la cual estaba bastante extrañada.

Me lié con él, nada más allá, no me gustó, no me gustaba el y tampoco me gustaban los chicos, pero al menos había podido despejarme y el chaval ya había conseguido lo que llevaba buscando un año.

Nos fuimos de allí a las tres de la mañana, por la noche Mario y Sergi fueron los primeros en dormirse y Nuria aprovechó para sentarse conmigo en mi cama.

-Se que no te gusta Mario y lo has hecho para desahogarte, ¿Que ha pasado?-Me preguntó preocupada.

-Me he enterado de muchas cosas y necesitaba olvidarme, además mis madres saben que estaba fumando, me van a matar Nuria-Dije escondiendo mi cara en mis manos.

-Ven aquí-Dijo para después abrazarme, me sentía tan bien entre sus brazos.

-Te quiero-Dije aún abrazada a ella y esa rió.

-Yo también te quiero-Escondí la sonrisa que se formó en mi rostro en su hombro, sabía que el sentimiento con el que ambas decíamos las mismas palabras eran completamente diferentes, pero me hacía feliz igual.

Se quedó en mi cama y ambas nos dormimos, aunque en realidad no dormí mucho, estuve toda la noche pensando en mi madre, en lo que me había contado Andrea y en cómo habrían reaccionado ambas a la foto.

Júlia

Sería aproximadamente la una de la mañana, Ona y yo estábamos en la cama, mi móvil comenzó a vibrar, cosa que nos despertó a ambas.

-Ponlo en silencio por el amor de dios-Se quejó Ona queriendo dormir.

Fui a hacer lo que decía, pero vi de quien era el mensaje, abrí el chat de Andrea en el que había una foto de Nora fumando con sus amigos, me tensé al verlo, la foto venía acompañada de un mensaje de texto “de tal palo tal astilla”.

Mis ojos se llenaron de lágrimas, no me gustaba nada ver a mi hija con esa mierda en la boca.

-Amor, ¿Qué pasa?-Preguntó Ona reincorporándose al darse cuenta.

Le enseñé el teléfono, Ona sabía todo, sabía mi pasado y lo que me dolía ver eso, estuvo unos segundos mirando la pantalla y después le dió a llamar, no sabía que iba a hacer, pero no la iba a parar.

-Hola, cuanto tiempo-Escuchar la voz de Andrea hizo me que enfadase más.

-Alejate de nuestra hija Andrea-Dijo Ona con un tono de voz que me dió miedo hasta a mí.

-Hombre si es la novia-Dijo Andrea riendo.

-No soy su novia, soy su mujer y te estoy diciendo que dejes en paz a nuestra hija -Dijo aún más enfadada.

-Ella ha sido la que me ha pedido que le hable de su madre, yo he hecho lo que me ha dicho -Cuando dijo eso me quedé pillada, ¿Que le había contado?

-¿Dónde está Nora?-Preguntó Ona preocupada.

-Ahora mismo liándose con un tío, la pobre se ha ido descolocada-Cuando dijo eso Ona y yo nos miramos extrañadas, a Nora no le gustaban los chicos, le gustaba Nuria.

Ona colgó la llamada y fue al contacto de Nora, la llamó unas cuatro veces y no había respuesta.

No fue hasta la mañana siguiente que tuvimos noticias de ella, y fue un simple mensaje de buenos días.
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Andrea siempre tocando los huevos

En el siguiente capítulo ya no habrá tanto drama, os voy a dar un poquito de felicidad