Capítulo 30

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Imra fue directo a la casa de Eve en las afueras de la ciudad para poder con ella.

Los últimos rayos de sol de la tarde pasaban a través de la maleza, iluminando el sendero rocoso por el que manejaba. No era un viaje largo. Solo veinte minutos desde la universidad hasta aquel hermoso y tranquilo paraíso.

El ruido de la graba crujiendo bajo las llantas, le avisó a Eve,que se encontraba despreocupada leyendo un libro, de la llegada de un visitante.
No tardó en reconocer el auto de Imra, pero definitivamente no esperaba verla corriendo hacia ella, con los ojos llenos de lágrimas y los brazos estirados para lanzarse a sus brazos.

Al verla, Eve se asustó y comenzó a imaginar miles de cosas que pudieron suceder y que ahora causaban aquella repentina visita y llanto. Pero Jamás, de verdad jamás, pasó por su mente la verdadera razón de las lágrimas de Imra.

Después de platicar largo rato en el pórtico de la casa, porque los padres de Eve estaban trabajando dentro y no quería que escucharan su conversación, Eve seguía sin creer lo que Imra decía.

Hubo un largo silencio después de que dejara de hablar. Lo único que se escuchaba, eran los grillos y las ranas que vivían en el lago junto a la casa de Eve y que habían comenzado a "llamar el agua", las luciérnagas comenzaron a aparecer, el viento a refrescar y las farolas del camino a iluminarse.

- ¿Estas...? - Eve dudó en preguntar - ¿Estás diciendo, qué te gusta Kara?

- No, yo lo...
De todo lo que le había dicho Imra, esa era la primera cosa de la que parecía estar segura. Pero si no era así, ¿por qué había terminado con Ben, golpeado a Lena y... decir que había algo más que sentía por Kara?

- Perdóname, pero no entiendo, ¿qué es todo esto?

- ¿No crees que es justo lo que quiero saber? No logro entenderme a mí misma.

- Ok, ok, espera - Eve iba a tratar de desmenuzar todo de una vez. Ya había sido mucho tiempo de confusión. O sacaban todo ahora, o no iban a progresar en nada. Era la más paciente y comprensiva de sus amigos, pero la verdad, esta situación ya la tenía harta - ¿Cuál fue la razón por la que terminaste con Ben? - Imra iba a responder de inmediato, pero apenas abrió la boca, Eve la detuvo - No. Piénsalo bien. Se... sincera.

Obedeciéndola, Imra medito su respuesta algunos minutos.

- No quería hacerle daño - concluyó finalmente sin mucha convicción.

- ¿A quién? - preguntó de inmediato, Eve.

- A él.

- ¿Por qué?

- No lo sé, Eve.

- ¡Claro que lo sabes! ¿Por qué no querías hacerle daño?

- Yo...

- ¡Vamos Imra! - Eve la presionó - Puedes decirlo. Nadie te va a juzgar.

- ¡Quiero recuperar a Kara!

- ¿Recuperarla?

Imra se puso de pie, y caminó un par de metros.

- Quiero a Kara... - apenas susurró Imra, pero Eve fue incapaz de escucharla.

- ¿Qué? - insistió la rubia poniéndose de pie unos pasos detrás de ella.

- ¡La quiero! - gritó dándose la vuelta.

- Eso ya lo sabemos. La cuestión aquí es, ¿cómo la quieres? ¿Cómo amiga o como algo más?

- La necesito. Quiero a Kara conmigo. No tolero que este lejos - Imra sonaba desesperada - Y si para tenerla cerca tengo que decir que la amo ¡Sí! ¡Esta bien! ¡La amo! ¡Amo a Kara!

¿Verdad o reto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora