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Imra estaba sentada en su escritorio intentando concentrarse en su tarea. Tenía que entregar un proyecto final en un par de semanas y hasta ahora no tenía hecho nada.

Había llamado a Kara, pero no respondío, así que vio una oportunidad para ponerse al corriente con sus deberes.

La discusión con Mike la había dejado deprimida. Y no podía sacarse de la cabeza la conversación que había tenido con Ben.

No podía dejar de darle vueltas a lo que le había dicho sobre la convocatoria.
No lograba entender de qué estaba hablando y aunque quería dejar de lado eso, y pensar que solo era una palabra al azar, seguía con esa sensación de que se trataba de algo importante. Tanto como para que él lo hubiera mencionado.

Frente a ella tenía una libreta en donde iba a anotar todas las ideas que surgieran en su mente.

Hasta ahora, la hoja permanecía en blanco.

Comenzó a darse pequeños golpecitos en la barbilla con el extremo superior del lápiz y dio un par de vueltas sobre la silla giratoria de su escritorio.

— ¡Ah! — grito frustrada, lanzando el lápiz al escritorio y poniéndose de pie.

Era imposible que se concentrara en sus tareas hasta que no lograra entender a lo que se refería Ben con eso.

Se lanzó boca abajo sobre la cama y se quedó así por algunos minutos, sin importar que la posición le dificultara respirar.

Convocatoria, ¿a qué se refería con eso? ¿Cuál era la convocatoria que pensaba utilizar en su contra?

La escuela estaba a nada de terminar, Kara ya había sido aceptado en el programa de titulación y el próximo año solo se dedicaría a eso. Ella había hecho sus propios arreglos para elegir una buena tesis.

Y sí, tendría que viajar un poco, pero solo serían una semana cada tres meses. Nada que pusiera en riesgo su amistad con Kara.

¿Entonces qué era?

¿Una convocatoria para Kara? ¿Una convocatoria para…?

Entonces algo hico clic en su memoria.
Saltó de la cama y se quedó a mitad de la habitación.

— Un momento — se dijo a si misma encajando cada pieza en su cabeza — ¡No puede ser! — se tapó la boca con ambas manos asombrada ante su descubrimiento.

Buscó de inmediato su celular y le marcó a Cat.

— Contesta, contesta, contesta — repitió mientras el timbre de la llamada sonaba.

"¿Bueno?"

— ¡Tiene la hoja! — gritó a la bocina, alterada.

"¿Imra? ¿Qué…?"

— ¡Ben tiene la hoja de la convocatoria para buscarle novia a Kara!

°°°

— ¿Podrías dejar de caminar de un lado para otro? — le pidió Cat a Imra masajeándose las cienes — Está comenzando a darme un dolor de cabeza.

Imra tuvo que esperar hasta la mañana siguiente para ir corriendo a la casa de Cat y hablar sobre la amenaza que era Ben. No estaba segura, pero sus temores no la dejaban en paz.

— Tiene la hoja — concluyo Imra deteniéndose frente a Cat.

— No. No la tiene.

— ¡Me lo dijo!

— Es imposible. Todas fueron destruidas, Fred me lo aseguró. Y la única que quedaba, la tiene…— guardó silencio al caer en cuanta de que existía una gran posibilidad — Lucy.

¿Verdad o reto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora