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Mientras tanto:

Al siguiente día, lo primero que Alex, Cat e Imra hicieron, fue buscar a Sam.
No tardaron mucho en encontrarla. La joven amiga de Lena pasaba la mayor parte de su tiempo libre entre clases, metida en el laboratorio de programación de la facultad.

— ¡¿Cómo es posible que aún no tengas nada?! — reclamó Alex con desesperación — ¡Tienes más de dos semanas con esto!

Sam, levanto la mirada de la pantalla de su computadora para demostrar su fastidio.

— Esto no es tan fácil como en las películas — fue su respuesta.

— Pero…

— Les recuerdo — la detuvo la joven — que solo las estoy ayudando porque, Lena me lo pidió. Pero no les debo nada a ninguna de ustedes. Quizá, Kara me caiga un poco bien, pero a ustedes apenas si las conozco. Así que voy a pedirte que dejes de exigirme las cosas, y me dejes trabajar.

Haciendo coraje, pero aguantándose toda la furia que durante los últimos días se había acumulado en su interior se quedo callada. Dejo a Sam, y salió del laboratorio para encontrarse con Imra y Cat.

— ¿Qué te dijo? — preguntó la más bajita en cuanto cerró la puerta.

— Aún no tiene nada— la desilusión y la frustración que Alex sentía, se reflejó en el rostro de Cat — Sigue trabajando en ello.

— ¿Qué hacemos ahora? — Alex se encogió de hombros, las ideas y la energía se le estaban agotando — No lo sé. Quizá, deberíamos de esperar a que Kara regrese.

— ¡Falta cuatro días para eso! — gritó Imra.

— ¡¿Tienes una mejor idea?! — preguntó Alex con desdén.

— Sí — dio media vuelta y caminó decidida por el pasillo.

Ni Alex o Cat la siguieron. Simplemente se quedaron mirándola marchar.

— ¿No crees que deberíamos ir con ella? — pregunto Cat después de perderla de vista al doblar la esquina rascándose la barbilla.

Alex se cruzó de brazos y fingió pensarlo. Estaba convencida que Imra sabía más de lo que les había contado, y que de alguna manera, conocía el plan de Ben.

— No. Ella sabe cuidarse sola.

— Pero…

— ¡Ah! Está bien, vamos.

°°°

— ¿Y qué se supone que hacemos aquí? — pregunto Alex desesperado al ver la casa de Ben delante de ellas — Esta es la casa de tu novio, ¿no?

— ¡No es mi novio!

— Eso dices.

Cat le pidió con una mirada, que no fuera tan dura.

— ¿Qué vas a hacer?

Justo cuando terminaba la pregunta, la camioneta de Ben se estaciono frente a ellas. Imra se echó a andar para interceptarlo.

— ¡Ben! — llamó su nombre a medio camino.

El chico se giró, y al verla sonrió complacido por su presencia.

— ¡Mon amour! — extendió los brazos para recibirla, pero ella lo apartó de inmediato.

— ¡¿Qué fue lo que le hiciste a Kara?!

— ¿Amour? — parecía confundido, pero era una farsa.

Imra lo miró con desprecio.

Él tenía la boca entre abierta. Con el rabillo del ojo, se dio cuenta de que Cat y Alex se acercaban. Dudó un instante y luego pasó la mano por detrás de la cintura de Imra, la atrajo hacia él, y la besó.

¿Verdad o reto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora