Tino D.
Lo que Olivia buscaba era eliminar a Liz del camino, por ello se había aliado con Harry Ryan para ejecutar todo este nefasto plan. Su traición duele, por supuesto que sí, más no va a salirse con la suya si en mis manos esta solucionarlo.
- Olivia, por tu bien, reacciona. Lo mejor es que te entregues y nos digas el lugar exacto donde tienen a Elizabeth.
Los celos la tienen completamente cegada, sino, no llego a entender porque ahora está en contra de nosotros. Esto va a terminar mal si no logramos descubrir el punto donde ubicarlos. Will y Ethan también corren peligro, pues están aventurándose a ciegas en este enorme lugar y peor aún con el incendio que cada vez más iba creciendo, formando grandes olas de fuego a su alrededor.
- No, Will será para mí. Él y yo seremos alfas de esta manada, nos casaremos y viviremos juntos, como siempre lo planeamos – en su pobre mente era lo único que se repetía.
Creo que se encuentra en shock al explicarle sobre el peligro al que también estaba expuesto Will.
- Ayúdame a encontrarlos, Harry, ¿él te dio la ubicación no es así?
Unas pesadas lágrimas recorren su rostro hasta juntarse en su mentón. Se las limpia y admite que sí, que ella sabe dónde tienen a Elizabeth.
- Iremos juntos, yo te mostrare el camino – todo sea por encontrarlos, tengo fe que así será.
Nos adentramos entre la vegetación, sigo los pasos de Olivia, sé que después de lo que hizo no es de toda confianza, sin embargo, puedo ver arrepentimiento en su rostro, y sobre todo en el alma. Por otro lado sé qué hará lo correcto, pues la vida de Will estaba en juego.
La barrera de fuego no nos deja continuar, así que rodeamos otra área para poder ingresar.
- Están a un par de kilómetros de aquí, no falta mucho – dice con cansancio tras esta larga caminata.
Está a punto de anochecer y eso nos quitara ventaja. Al menos que hagamos el recorrido en nuestra forma lobuna, no tendremos visibilidad.
Después de tanto camino, llegamos a una casa aparentemente abandonada. Dejo atrás a Olivia y derribo la puerta de una patada.
- ¡Me mentiste! – la tomo de los hombros y grito al ver que no hay nadie.
- Te juro que no, esta es la ubicación que él me dio – explica con miedo al ver mi furia.
Examino toda la pieza y evidentemente hay rastros de que alguien la había habitado. Continúo olfateando alrededor y a pesar de que el humo empezaba a impregnarse por todo el lugar, llego a detectar el olor de Liz, este se hace presente a través de unas de las mantas apiladas sobre un sillón. Ella y Harry estuvieron aquí, lamentablemente se habían ido ya.
Salimos de aquella casa para buscar en los alrededores. No puedo dejar sola a Olivia y no sé cómo le esté yendo a la manada en su búsqueda. Tal vez no se animaron a entrar al ver las llamas crecer. Si así fue, es entendible, no podíamos arriesgar más vidas.
El humo empieza a hacer estragos en el olfato de Olivia, comienza a toser al haber inhalado una cierta cantidad. Busco algo de agua y me quito la camiseta para empaparla y entregársela. Esto le servirá para hidratarse hasta que busquemos la salida.
A nuestro alrededor solo emerge un gran resplandor, son las llamas que vienen hacia nosotros. La oscuridad de la noche nos ha atrapado y no tenemos salida, estamos perdidos. Lo único que se me ocurre es retroceder en otra dirección para evitar que el incendio, el cual ya se ha propagado demasiado, nos alcance. Corremos a nuestro máximo nivel y en eso Olivia tropieza entre la maleza, la ayudo a levantarse, pero está muy débil.
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Mi Luna de Plata - Pasiones Prohibidas
Teen FictionLa vida no ha sido facil para Vasco, alejado de su propia familia ha crecido con los ideales de destruir a esta a toda costa. Las cosas no saldran como él lo esperaba y sin querer terminara enredado en la polemica familia Dalmazzi de quien ya hemos...