Compañerismo. (Sesshōmaru x InuYasha)

Capítulo 19

── Inuyasha... ── Expresó en un suave susurro mientras sintió que se perdió por un segundo, ese era el nombre del híbrido que estaba con su querido Sesshomaru, ese mitad bestia que le hervía la sangre, se atrevió a ser un poco descarada al comentar entre las demás palabras que se anticipaba Inu No Kami diría. ── Mi señora, le imploro que me dé más tiempo para convencer a su gran hijo y mi único amor. ── al decir esto se dejó desplomar al suelo de rodillas mientras se inclinó al frente y se sostuvo con sus manos.

Hacer esto y decir aquello no logró nada más qué la tenue sonrisa de la Diosa se desvaneciera mientras el escolta de ésta volviera a permanecer neutro, sin gestos ni movimientos, sólo firme pero alerta.

── No será necesario qué vayas en su búsqueda, Murasaki. ── respondió con seriedad la Diosa Canina y la mano que tenía alzada a la altura de su pecho volvió a estar baja y a un costado suyo. No esperó a que la DaiYōkai que amaba a su hijo le hiciera una pregunta del por qué, continuó hablando. ── Quisiera observar a través de mi 'Ojo Sagrado' la relación que lleva mi Sesshomaru con Inuyasha. Estaba preocupada por mi hijo, estuvo mucho tiempo solo y después aparecieron esos niños humanos en su vida, ó así fue hasta que evidentemente murieron, los humanos son tan fugaces y aún así se encaprichó con ellos cómo su padre. ── Las últimas oraciones las habló con cierto lamento, cómo sí sintiera tristeza por su hijo y lo que se buscaba al relacionarse con seres humanos. ── Qué se quedará solo tras la muerte de esa humana también fue motivo del por qué te llamé, para iniciar los preparativos del cambio de el reinado en mi palacio. Sin embargo, lo que me has contado me causa curiosidad. ── continuó hablando con cierta "tristeza" hasta que con lo último que dijo cambió nuevamente su actitud drásticamente a una menos triste y más seria.

Murasaki sólo permaneció escuchando, con sorpresa y cierto desconcierto. Mientras la Diosa siguió con sus palabras.

── El día que me enteré que su padre estuvo con una humana y ésta esperaba un cachorro suyo fue sorprendente pero pude anticiparlo, desde que lo conocí siempre mostró interés por los humanos y el amor de estos, no me extrañó ni molestó que se enamorara de una humana, ya no estábamos juntos y siempre lo conocí muy bien, Sesshomaru en cambio no estuvo muy feliz cuando se enteró, no le pareció lo de su padre con esa humana, siempre detesto a los humanos desde que era un lindo cachorrito. ── Exclamó en un tono dulce lo de 'lindo cachorrito' e incluso sonrió momentáneamente pero volvió a tomar seriedad tras ese par de palabras. ── Y lo hizo más cuando su padre se relacionó con una y tuvieron un cachorro juntos, odió como a ninguno a su medio hermano porque justamente su padre murió por culpa de éste, ó al menos así lo creía él, ahora parece ser ya pasado. ── Tras sus palabras guardó un poco de silencio pero sólo unos cuantos segundos, pasados volvió a hablar. ── Es por eso que me da curiosidad cómo es qué mi Sesshomaru esta con Inuyasha, quisiera observarlos y es por eso que no irás en su búsqueda, Murasaki, tú interviniendo y siendo una distracción no me dejará apreciar cómo es la relación de mi hijo con Inuyasha, quiero ver cuan feliz es Sesshomaru. Sí es que realmente lo es. ──

── D-de acuerdo, mi señora. ── trató de hablar con firmeza y obediente pero la tristeza porque Inu No Kami rechazó su petición se le manifestó un poco en su tartamudeo y tono de voz.

Ante todo lo dicho por la Diosa Canina no le quedó mas que aceptar y obedecer las palabras de ésta, no podía llevarle la contraria a Inu No Kami aun sí las palabras de ésta le habían hecho dudar de ella, la Diosa quería observar a Sesshomaru y a ese híbrido tonto llamado Inuyasha, eso le causaba una mala sensación y malos presentimientos.

── No te angusties, Murasaki, todo sería tal cual, estarás con Sesshomaru y se hará cargo de mi reinado, también me darán buenos nietos que se prepararan para ampliar nuestro reinado y continuar con mi legado. Aún sí veo que Inuyasha hace feliz a mi Sesshomaru no puede brindarle cachorros y sí pudiera no serían demonios de sangre pura como mi Sesshomaru. Será doloroso para mí como madre forzar a mi hijo a separarse de la felicidad pero todo es por mi legado y nuestro reino. ── las últimas oraciones las dijo con "tristeza" dramática mientras inclinó levemente la cabeza y se cubrió el rostro con parte del manga de su kimono, tras decirlas volvió a estar seria y cómo sí nada mientras su mano se hallaba nuevamente en su lugar. ── Es momento de que asuma sus responsabilidades, ya ha alcanzado el nivel que quería y es el momento de que le dé el título como señor del palacio y tú estés como su señora, una DaiYōkai que puede darle cachorros puros y fuertes como él. ──