Malas Enseñanzas

Nota final de la autora|Agradecimientos

¡Hola a todxs!

Primera vez que una historia me dio mucha satisfacción, alegría y tristeza terminar. ha sido un viaje increíble escribir esta pareja que se enamoró en medio de un hospital, con un amor prohibido que se convirtió en un precedente para todxs los que lo conocían.

Cuando comencé a escribir Malas Enseñanzas me encontraba en mi séptimo semestre (cuarto año) de medicina. Fue en un momento duro, posterior a la pandemia y un año sin estudiar. Tenía un tutor de medicina interna (ojito, no hermoso como Gabriel), que nos exigía mucho. al punto de que no dormía y era un desastre. las escenas de Very con el café sobre la bata eran anécdotas mías. Así como la de llegar tarde y el pánico escénico.

Hay momentos que relataron lo que era mi vivir en el hospital, casos que salieron de internet y otros que viví y tuve que defender pese a que todo mundo me decía que estaba errada. Nunca me daban la razón, pero yo estaba segura de lo que sabía, pese a que tartamudeaba en el proceso.

Ahora soy médico y aunque me queda un largo camino para mí, estoy contenta de haber alcanzado mi meta. Esto también es un aplauso a una pequeña niña que estuvo rodeada de ese ambiente hospitalario de pequeña y quiso ser profesional de la salud como quienes la ayudaban.

Ojito aquí, tampoco soy diabética, pero fue parte de mi durante mi crecimiento estar en los hospitales.

Esta novela fue un verdadero reto, recuerdo que cuando la inicié no tenía ni siquiera el mínimo conocimiento de lo que sé hoy. Los casos eran un enigma porque no me sentía preparada para escribir algo así. Y aunque a veces puede parecer tedioso todo ese testamento de las enfermedades descritas aquí, lo hice porque quería escribir una historia médica que tuviera muchísimo menos errores que las series que veía. Además, mi inspiración la autora Ali Hazelwood que escribe romance STEM, y tiene muchas explicaciones de su profesión. Amo.

Hubo momentos de mucho estrés. Estudiar, trabajar y escribir era complejo, me demoraba mucho porque era difícil. A veces no dormía bien y tenía que rendir en todo. quise tirar la toalla muchas veces, pero necesitaba ver el final de esta historia.

Hoy es mi novela más extensa, pero la que tengo mucho amor.

Con respecto a la historia de Gabriel, si la escribiré, pero me tomaré un tiempo libre del mundo de malas enseñanzas. no porque no lo quiera, sino porque debo drenar. Además, escribir desde la perspectiva absoluta de un hombre será otra aventura, porque tiene que ser totalmente distinto a la manera en que narraba a Very. Él sería más maduro, con más años. Estaré avisando por aquí la fecha, pero no creo que sea todavía. Además de mis redes sociales.

Ahora sí, lo importante.

Primero que nada, quiero agradecerle a mi Dios por permitirme cumplir esta meta, por darme la posibilidad de expresarme a través de mis escritos.

A mis amigos que me escucharon, Victoria (Lectora empedernida) por oírme en medio de mis crisis cuando no sabía qué hacer. Además de promocionar siempre que puede mi historia.

A los bookstagramer por sus videos.

A mis lectores por el apoyo tan grande. Gracias por aguantar la espera, por estar ahí, a pie del cañón leyéndome pese a la demora.

A mis lectoras Linda, Alisson, Amy, La doctora Paola, Natalia, Nicole, Audi, lupita, Luz, Sheileth Orcarly, Alondra, Beatriz, Lili, Maryan, Adelys, Nadia, Giseth, Perla, Ana María, Cecy, Mar, Nore, Danae, Ana Franco, Lucilia, Karen, Dexy, Diana E, Misheli. Son muchas más, pero hasta aquí me dio la cabecita para recordar. Gracias de verdad.

Gracias a todxs por leer, recomendar a sus amigos, comentar y si no te nombré, lo siento. Te llevo en mi corazón también.

Sin más que decir, gracias por su cariño y su apoyo. Les quiero inmenso.

Dra. Paola Valentina.