Letal Love (Kerving)

Los problemas apenas empiezan

Supone un riesgo increíble llevar a Kevin a casa. El pánico lo consume de imaginar escenarios tan catastróficos.

Andrés puede decidir si arruinarlo y aquello le aterra tanto.

Ya se acerca la hora de salida. Kevin lo acompañará y despedirá para verse más tarde para la próxima cena.

Cualquier cosa lo pone de nervios. El salón de clase es un silencio exquisito para ponerse a reflexionar sobre los últimos hechos.

César lo pone nervioso golpeando constantemente su pluma contra la mesa, tratando de concentrarse. El exámen es terrible y no mejoró su estado de ánimo. Además César debe estar así porque Uriel salió hace mucho tiempo de clase y no regresa.

Quiere salir huyendo y no quiere saber más de nadie. La ansiedad prontamente lo obligará a abandonar la clase. El agua fría en su rostro despertará sus cinco sentidos, está seguro.

Kevin le viene a la mente con cualquier cosa mínima que tenga un parecido a él y su situación. Piensa que antes era mejor verlo de lejos, porque ahora Kevin reina su mente peor de lo que ya lo hacía.

Y no está enterado de aquello. Es una verdadera pena, pero también es una suerte tan liberal.

Si se llegara a enterar de las atrocidades que a provocado por su amor y atención..., las cosas serían tan distintas.

Tanto deseaba su amor, que ahora que lo tiene bien controlado entre sus enormes y filosas garras prisioneras, no sabe qué hacer ni cómo jugar.

Terminó de responder su examen, con estrés al nivel más alto. Nisiquiera está seguro de haberlo respondido correctamente pero no le importa.
César no para de hacer ese ruido y le parece que es el único molesto con eso.

Mejor miró a alguien más. Javier no hace nada, ha terminado su examen y al tratarse de la penúltima hora aburrida de clase duerme profundamente, espera Hirving que no eternamente.

Cristiano y Carlos faltaron esta semana. No es que se preocupe por ellos como un buen amigo, sin embargo ya le parece preocupante la cantidad de faltas que acumulan en menos de un mes.

Maldita sea. No se preocupa por esos temas, son irrelevantes. La ansiedad lo hace mejor persona a veces. Ojalá tenerla antes.

Miraba a sus amigos cuando cruzó accidentalmente miradas con Raúl. En ese momento recordó algo que su padre propuso, hace no tanto.

Apartó la mirada, aunque tarde, porque Raúl lo siguió mirando con rareza. Sí, ya no es normal y mucho menos bueno para la salud mental que siga haciendo éstas cosas.

Su padre no conseguirá que admita en voz alta lo que tanto le a gustado hacer.

Kevin es la razón. O eso seguirá haciéndose creer mientras la verdad sea más pesada y esté presente.

-Hirving, él me ha dicho cosas tan raras. En el momento en que sucede algo fuera de lo común aparece.
-¿Dices que ha creado un mal rollo entre ustedes?
-No lo suficiente. Me preocupa su comportamiento, antes, que yo recuerde, no se comportaba de esa forma.
-Comprendo.

Ciertamente le causó sorpresa haber acudido a Álvaro cuando no es una persona a la que le tenga el mayor respeto. Le parece un engreído y matadito, sin embargo, no vió a quien recurrir esta vez.

Javier defenderá a Hirving, es lo más seguro. Cristiano no tiene autoridad propia y seguirá a Javier en lo que diga. Carlos no será de ayuda, nunca lo ha sido, al menos no como quisiera. Raúl es cómo un hermano que debe cuidar. César no se hará de ningún bando.