Letal Love (Kerving)

DESGRACIA

-Uriel, ¿es una broma? espero. Yo no tengo ninguna razón para querer asesinar a Ángel. Apenas y hablamos, olvídalo.

Negó, con risas que escapaban involuntariamente de sus labios, haber intentado asesinar a Luis Ángel. Uriel se presentó en su hogar de la nada, haciendo del papel de Álvaro como detective. Le parece ridículo, si la policía no tiene idea, ¿por qué creen ellos que podrán tenerla?

Uriel observaba a Hirving seriamente.

Su pose era segura, Hirving admiraba la forma en la que creía que finalmente obtendría respuesta.

Viene, quizá, por los sueños de César también. Lo sabe porque, claro, Santiago se lo dice.
Los fantasmas parecen tener la virtud de saberlo todo, incluso lo que no deberían.

La puerta principal de la casa está entreabierta, Uriel se interpone en ella a medias para evitar un rechazo grosero de Hirving o portazo directo a su rostro..., o amistad.

Amistad que se tambalea, pierde el equilibrio con facilidad. Es culpa de César, Ángel, Raúl, ellos son los culpables de joder la relación. Ni mencionar a Álvaro.

-¿Qué te hace pensar que soy yo el asesino?
-Que evitas las dudas, mis preguntas. Raúl sospechaba de ti y desapareció. Alejandro, Guillermo y Lionel estaban en el parque cercano a tu casa, donde los mataron. Javier pasó cerca el día que murió. Hirving, hay pistas, aunque mínimas y tú milagrosamente no lo sabes nada y no te interesa.
-He llorado, he sufrido -fingió Hirving, actuando su descaro-. Uriel por favor. Somos amigos, me comprendes. Las cosas no son como parecen.

Su farsa es poco creíble para Uriel. Ya no lo ve de la misma manera, antes podría defenderlo de cualquier acusación, porque, Hirving era un santo que apenas hablaba, sus ojos siempre mostraban su tristeza, un muchacho que no aprendía sobre los demás. Alejado, retraído, taciturno, que obtuvo amigos de suerte, y que afortunadamente fueron amigos que lo valoraron.

<<Pobre Uriel. Piensa que me da pena, pues no. Me aproveché de ustedes lo mejor posible. Ahora, un nuevo favor sería que murieran y me dejarán el camino libre con Kevin. Gracias.>>

-No, no son lo que aparentan. Tienes algo que ver y esta clarísimo. Hazme un favor, Hirving. Como amigos. Sé directo, sincero. Dime la verdad. O simplemente dime que no te interesa nadie más que a ti mismo y te dejare en paz. Pero por supuesto, ni creas que volveré a acercarme a ti de la misma forma.
-Uriel, ¡Tú no eras así! César te ha hecho un mal, de veras.
-A él no lo metas en esta conversación. No tiene nada que ver. No trates de cambiar el tema.
-Bien -Hirving cambió drásticamente su tono de voz a uno más grave-. Raúl te lavó muy bien la cabeza, ¿cierto? Ya detente, Uriel. Crees puros cuentos de él, que no son verdad. Tú me conoces mejor que nada ni nadie. Lo sabes bien.
-En realidad, quién parece querer lavarme la cabeza eres tú. Quiero la verdad, no acuses a nadie de las sospechas. Te ves peor de sospechoso ocultandolas.

-¿Luis celoso de Hirving? Jude, no pensaba que...
-¡Estoy casi seguro!, ¿Acaso no notas su forma de comportarse cuando hablas de Hirving?

No ha notado nada extraño de Luis hacia Hirving. Quizá sea despistado y tenga que tomar más en cuenta aquello que Jude dice.

¿Pero cómo y cuándo, en qué momento? ¿Hirving lo habrá notado también, peor no le dirá nada por pena? Miles de teorías y situaciones feas abundan en su mente sin una buena aclaración.

Se distrajo en el vacío, entonces, queriendo recordar y rescatar momentos que no hay. No queda más que charlar con Luis al respecto.

Jude nunca dice nada sobre sus relaciones. No criticó las relaciones feas de Kevin en el pasado, tampoco a Guillermo y su toxicidad con Raúl, no opina mucho al respecto acerca de André y Ángel. Si lo dice, es porque le parece importante que Kevin lo tenga en cuenta y lo sepa.