Capítulo 30: Preparativos para el Hormiguero y las Bromas del Equipo

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El jueves estaba a la vuelta de la esquina, y con él, la esperada aparición de Nicolle en El Hormiguero. El programa ya había anunciado su nombre como invitada principal, y aunque Pedri y Gavi la acompañarían en la entrevista, Nicolle sería el centro de atención. Fer, por su parte, la apoyaría desde la sección reservada para las familias, sin intervenir directamente, pero siempre pendiente de su hermana. A pesar de que solo Nicolle figuraba oficialmente en el anuncio, la expectación era alta, tanto por lo que diría como por lo que implicaba para su vida personal y profesional.

El lunes por la noche, la casa de Nicolle fue escenario de una bulliciosa reunión. Antonela Roccuzzo, esposa de Leo Messi, junto con Elena Galera, Mikky Kiemeney y Coral Simanovich -todas esposas o novias de jugadores del Barça- habían organizado un pequeño encuentro para ayudar a Nicolle a elegir el vestuario adecuado para la entrevista. El salón del apartamento se había transformado en un centro de moda improvisado, lleno de vestidos, zapatos y consejos de maquillaje.

Antonela, siempre cálida y dispuesta a ayudar, fue de las primeras en llegar, a pesar de que Messi ya no jugaba en el Barça. Su conexión con el equipo seguía intacta, y su presencia fue un gran apoyo moral para Nicolle.

-Tienes que sentirte segura y cómoda a la vez -le dijo Antonela, mientras sostenía un elegante vestido negro-. Este vestido es perfecto, es simple pero sofisticado.

-Yo iría más por algo llamativo -interrumpió Coral, mostrando un vestido rojo vibrante-. El rojo siempre resalta en cámara, y si lo acompañas con un buen peinado, vas a lucir increíble.

El ambiente estaba lleno de risas y camaradería. Aunque Nicolle no estaba muy familiarizada con la moda, disfrutaba viendo cómo las mujeres debatían sobre qué estilo le iría mejor. Mikky, con su sentido moderno del estilo, ayudó a Nicolle a probarse el vestido rojo frente al espejo.

-Este rojo es muy tú -dijo Mikky, sonriendo mientras ayudaba a Nicolle-. Te hace destacar, y te da ese toque moderno y seguro.

Elena, por su parte, aportó su experiencia en maquillaje, sugiriendo que Nicolle optara por algo natural.

-Nada exagerado, que realce tu belleza natural. Con eso y un buen peinado, estarás perfecta -comentó Elena, segura de su consejo.

Al final de la reunión, Nicolle tenía tres opciones claras: el elegante vestido negro, el atrevido vestido rojo y un conjunto más casual para la cena posterior al programa. La decisión final la tomaría el jueves, seguramente con la ayuda de Aurora, la hermana de Gavi, quien también tenía buen ojo para la moda. Las mujeres se despidieron, dejándole a Nicolle una sensación de apoyo y tranquilidad. Se sintió acompañada, como parte de una gran familia.

El martes por la mañana, el equipo del Barça se reunió en el aeropuerto para partir rumbo a Madrid. El ambiente era relajado, pero también estaba cargado de emoción por el Clásico que se jugaba el fin de semana. Nicolle se sentó junto a Pedri y Gavi en el avión, mientras Fer ocupaba un asiento cercano. Las bromas y risas no tardaron en aparecer, especialmente dirigidas a Gavi, quien no podía evitar sonrojarse ante los constantes comentarios de sus compañeros.

-¡Cuidado con Gavi, que no puede despegarse de Nicolle ni en el avión! -bromeó Raphinha, arrancando carcajadas de todos.

-¿Vas a sentarte al lado de ella en la entrevista también? -añadió Ansu Fati, con un guiño, provocando que Gavi intentara disimular su nerviosismo.

Nicolle no podía evitar sonreír, aunque los comentarios la hacían sentirse un poco cohibida. Sabía lo que estaban insinuando, y aunque el tema le resultaba incómodo a veces, también sentía que la conexión con Gavi era especial.

-¿Y qué vas a decirle en la entrevista, Gavi? ¿Que fue amor a primera vista? -soltó Pedri, entre risas, dándole un codazo a su amigo.

Gavi, nervioso pero riendo, intentó desviar la conversación.

-Dejad de molestar, tenemos un Clásico que ganar primero -respondió, tratando de cambiar de tema, pero las bromas seguían.

Entre risas y chistes, el vuelo transcurrió rápido. Jordi Alba y ter Stegen comenzaron a bromear sobre quién metería el primer gol en el Clásico, mientras Dembélé y Ferran Torres debatían sobre qué película verían durante el vuelo.

-Os apostáis que Gavi se olvida del balón si Nicolle lo mira desde la banda -dijo Ferran, provocando otra ola de carcajadas.

-Eso es un penalti emocional -gritó Frenkie de Jong, levantando las manos en broma como si reclamara una falta.

El ambiente era ligero y lleno de compañerismo, lo que hizo que Nicolle se sintiera mucho más relajada. Sabía que, aunque la entrevista en El Hormiguero era un gran reto para ella, contaba con el apoyo incondicional de todo el equipo. Las bromas, aunque constantes, estaban llenas de cariño y le ayudaban a sentirse más confiada.

Al aterrizar en Madrid, el equipo se dirigió al hotel. El Clásico estaba cerca, y Nicolle estaba emocionada por estar en el banquillo junto al equipo. Sabía que, aunque su aparición en El Hormiguero sería crucial, el partido tenía un significado especial para todos.

El viaje había sido una combinación perfecta de preparación, risas y apoyo sincero. Nicolle sabía que, con Pedri y Gavi a su lado en la entrevista, todo iría bien. El Clásico y la entrevista en televisión eran los próximos grandes retos, y Nicolle estaba lista para enfrentarlos con la confianza que su equipo y amigos le habían brindado.

"Silencio en la cancha" (Pablo Gavi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora