Por la mañana Jimin y Yoongi despertaron al oir el sonido del despertador marcando las siete. Ambos estaban acurrucados y abrazados al otro después de la noche de reconciliación. Al despertar, Yoongi aprieta suave a Jimin y le da un beso sobre la frente y luego besa sus labios.
_Buenos días amor. -dice suave-
_Buenos días. -responde sonriendo-
Yoongi lo toma del rostro con posesividad para plantarle otro beso en los labios y Jimin corresponde gustoso.
No solo eran los años de matrimonio, ni los hijos de por medio, mucho menos las amenazas. Jimin aún tenía sentimientos latentes desde la primera vez que lo vio y esa llama seguía encendida. Ambos se seguían amando muchísimo por eso decidieron seguir juntos a pesar de todo.
Después de que ambos hicieron el amor, se levantaron juntos y se ducharon, mientras que Yoongi aprovechaba y le dejaba besos tiernos y dulces sobre la espalda mojada de Jimin.
Yoongi estaba súper amoroso y cariñoso, ya que había estado reflexionando sobre todo lo que ocurrió desde su reencuentro con Taehyung, y había llegado a la conclusión de que él y Tae no eran personas destinadas a estar juntas, el era el asesino de sus padres y de su hijo, solo los unia un turbio pasado cargado de culpas y lamentos.
Claro que sí lo quiso, lo quiso muchísimo ya que se había vuelto una persona muy especial en su vida, pero más especial e importante era Jimin que es su mayor y más grande amor, el que lo marco desde el primer momento en que lo conocío.
Yoongi tuvo sus errores, como cualquier hombre que no tuvo una buena enseñanza, pero lo que hacía día a día por su familia era un gran avance y rompía con los patrones destructivos de su pesado pasado.
Aunque muy probablemente tendría sus días de locura, con su carácter temperamental. Había decidido cambiar aunque sea un poquito su modo.
Si Jimin le había pedido espacio se lo daría, al final de todo lo único que verdaderamente quería es que el sea feliz, aunque debía ser a su lado, obvio.
_Hoy empiezas a trabajar amor? -pregunto dulce y suave-
_Si amor. -dice Jimin un poco tenso
_Esta bien, te doy mi palabra que no volveré a causarte problemas pero deja que yo te lleve y te busque. -pide en un tono tranquilo y dispuesto a hacer las pases-
_Esta bien. -responde suave-
_Okey. -dice mientras se acerca y lo toma de las caderas para plantarle un beso en los labios-
Iba a ser un gran reto, ya que sus celos, su obsesión y su posesividad eran más fuertes que su predisposición a querer respetar el espacio de su esposo, pero al menos lo intentaría.
Ambos se alistaron y mientras Jimin iba a despertar a su hijo Jihoon, Yoongi lo esperaba tranquilo en las escaleras para poder bajar juntos a desayunar.
Cuando Jimin regreso, estrecho su mano y la entrelazó con la de su esposo y ambos bajaron hacia el comedor para poder desayunar juntos.
Luego Jihoon se les unio y finalmente bajo Dohyoon que realmente era un milagro, verlo madrugar era una sorpresa para todos ya que el usualmente se levantaba muy tarde.
_Te caiste de la cama? -pregunto Yoongi bromeando-
_Algo así. -responde riendo mientras se sienta en frente-
_Buenos días príncipe. -dice Jimin con una amplia sonrisa-
_Buenos días pa, buenos días hermanito. -decia tierno mientras abraza a Jihoon-