Mil años luz

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POV MARIANO

-¿En serio vas a estar en un video? Quiero ver eso, mi amor.

-Juli, ¿vos también vas a molestarme con eso? – reí.

-¿Quién más te cargaba? Contame. Ya te quiero ver así, todo disfrazado de sacerdote. –susurró cerca de mi cuello. –Qué pecado, eh. Pero sos mío...

-No sabía que te podía lo religioso –reí siguiendo su juego. –Es sólo un personaje.

-Por suerte... -Juliana entrelazó sus brazos en mi cuello acercándome a ella con intensidad. Podía sentir cómo su perfume iba impregnándose en mi ropa. Y me gustaba.

La besé, al principio con ternura hasta que llegó un momento en que nos tuvimos que separar para recobrar el aire. Su respiración se agitó. Sus ojos brillaban sin apartar su mirada de la mía. Quería hacerle saber que era mi mujer y cuánto la amaba.

Apenas recostó su cabeza sobre mi pecho quedó dormida. La envidiaba porque el insomnio no me dejaba en paz. Mañana tenía que levantarme temprano para estar a tiempo en Pol-ka y mi mente no tenía descanso.

¿Por qué se me cruzó Lali en mis pensamientos?

Sólo apareció, así sin permisos ni cerrojos. Ella y su voz.

Acababa de estar con mi mujer, mi Juliana y ella se hacía presente con más insistencia que un simple recuerdo.

POV LALI

Toqué timbre una vez. Dos veces.

Esperé hasta que me respondió el portero eléctrico del departamento de Benja.

-¿Podemos hablar? Estoy abajo. Dale. Hablemos... -dije como pude.

Pasé apenas escuché la chicharra. No estaba entendiendo las actitudes de mi novio. ¿Dónde quedó eso del entendimiento y el apoyo incondicional como pareja?

-Te amo –fue lo único que me dijo cuando llegué a su piso. La puerta estaba abierta con él esperando allí parado. No me dejó contestarle más que responderle al beso improvisado e imprevisto que se me presentó.

Hacía dos días que no nos veíamos. Lo extrañé. Sus labios se perdieron en los míos demostrándome cuánto me amaba a pesar de su repentino humor extraño.

Estaba confundida. No sabía qué pensar.

-Perdoname por cómo te trate hoy. No era yo. Estaba sacado, mi amor. –comenzó diciendo sosteniendo mi cara entre sus manos.

Aflojé la tensión contenida en mis hombros. El peso de todo el día por sentirme culpable. Pero la tristeza de mis ojos sé que seguía ahí. Intacta.

-No sé qué me pasó. Pasa que siento que voy a tener que compartirte y me asusta, Lali. No quiero...

-¿Compartirme? Benja, no soy un objeto, soy una persona primero que nada. Además, soy tu novia. Tuya. Vos mismo me dijiste que entendías todo. ¿Qué te pasó? ¿Acaso no me conoces? Me extraña que me hagas este planteo después de tantos años de pareja. Me duele.

Chocó su frente contra la mía. Se rendía. El dolor me carcomía por dentro. Me dolía su egoísmo. Pero más sufría sintiendo que las cosas habían cambiado.

-Mañana será un nuevo día. Fue tu mensaje, mi amor. – repitió mis palabras.

-Mañana tengo que grabar. Tendría que estar en el quinto sueño ahora bajo mis sábanas, descansando pero preferí venir acá para aclarar todo. Pensa en eso, Benja. Me tengo que ir.

Lo besé y una lágrimaquiso escaparse de mi interior porque esa chispa que aparecía al mínimocontacto con Marian, estaba a mil años luz de lo que sentía por quien es minovio. 



Hola!! muchas gracias por leerme!  Espero les esté gustando la historia! Leo sus opiniones! :D

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