Tu tierra y tu cielo

"Muy buena foto, Lala"

Holaa! Espero disfruten este capítulo! Lo hice con mucho cariño.

Gracias por leerme!!

---

POV LALI

Llegué temprano a Polka con una sonrisa como bandera, fiel a mi lema. Mientras desayunaba repasé el guión del día. Se venían momentos realmente intensos, en todo sentido. Si bien era secreto todavía para las fans cuándo iba a ser el momento exacto del beso... por las escenas que estábamos regalándoles noche tras noche era evidente que estábamos cerca. La tensión sexual cada vez se incrementaba entre el Padre Tomás y su amada Esperanza. Esta vez, era la última jugada de mi pitufo.

Luego de tantas idas y venidas, los sentimientos de Tomás lo estaban abrumando. Admiraba la fuerza de voluntad de ambos; la de él por intentar arrancarse del cuerpo y del alma ese amor que lo consume y la de ella por no desistir y seguir esa luz que ve en la mirada de su amor que la obliga a creer en que sí van a estar juntos.

Hace unos días habíamos grabado una escena realmente hermosa. Había amado el vestuario que me prepararon: un vestido color rojo ajustado con unos diminutos lunares negros, casi imperceptibles que combinaban con unos zapatos de taco aguja.

"El deseo se hace latente", recordé que esa línea aparecía destacada en el libreto, y parecía ser literal.

El arzobispo había dado como castigo que Tomás no pudiese participar de la fiesta parroquial que tenía lugar en el convento, pero aun así fue. Y se encontró con el amor de su vida cantando con esa voz dulce que sólo nace de Espi cuando piensa en él. O a mí... cuando pienso en Mariano.

La escena exigía que bailemos, primero una canción movida donde Mariano demostró sus atributos en cuanto a la música. Se nos hacía tan natural intercambiar miradas y perdernos en los ojos del otro... podía pasarme horas en esos ojos verdes que me invitaban al cielo estando en la tierra junto a él, a su lado. Ahí era mi hogar, con mis manos sobre su pecho y las de él abrazando mi cintura... nuestras sonrisas reflejo de todo nuestro amor.

Lastimosamente la escena de hoy no tenía nada de alegría.

Antes de salir del camarín, me tomé una foto con el nuevo vestuario: una camiseta bastante ajustada de un color rosa intenso que me estaba volviendo loca con una pollera negra y unas botas que me hacían cumplir mi sueño de ser un poco más alta.

La subí a mi cuenta de Instagram antes de encontrarme con la mirada escaneadora del amor de mi vida.

-No podes estar más linda, mi amor –susurró con voz entrecortada contra mi cuello. –No me la haces fácil ni a mí ni a Tomás con esa boca roja...

-Que no se puede besar hasta que terminemos la escena –me mordí el labio aguantándome las ganas de que fuera él quien me corriera todo el maquillaje.

Rodeó mis hombros con uno de sus brazos hasta llegar a la Sacristía. Todo estaba listo, así que me dispuse en mi lugar, cerrando la puerta una vez que Marian comenzaba con su escena frente a las cámaras.

Cuando fue mi turno, abrí decidida la puerta y me encontré con los ojos de Marian, ahora irritados por toda la intensidad que debía transmitir. Caminé hacia su lugar, donde estaba arrodillado frente a una gran cruz en la cual imploraba ayudaba para arrancar ese amor de su alma.

Esperanza no conocía la palabra "NO". Al igual que yo.

-Tomás –era la primera vez en toda la historia que lo tuteaba –si tiene que ser va a ser... -mis ojos comenzaban a aguarse con sólo reflejarme en los suyos. Si había un motivo que podía sensibilizarme era ver al amor de mi vida vulnerable y frágil. Sus lágrimas... recordé el día en que fui a buscarlo a su departamento y me enamoré más todavía de ese ser.