Tu tierra y tu cielo

Imprevistos

POV LALI

"¿Almorzamos mañana? Guarda un tiempito para tu novio. Te amo"

Esa había sido la respuesta que me escribió mi novio. Ahora que me sentía más cómoda trabajando con Mariano y dejando atrás esos fantasmas que me perseguían sin alguna necesidad, quería regalarle algo especial a Benja. Mañana grabaríamos un rato nada más y tendría el tiempo suficiente para preparar alguna sorpresa.

Como soy un desastre cocinando, pediría sushi del restaurante favorito de él. Tenía un buen plan.

Lo llamé una vez y esperé hasta que me respondió el contestador. Intentaría más tarde, pero para no perder tiempo le dejé un nuevo mensaje.

"Mañana, sorpresa para mi novio. También te amo".

-Lali. Lali. Lali. Lali.

Sonreía mirando una foto vieja con Benja en mi celular de cuando éramos más chicos. Me acuerdo que él me llamó reiteradas veces para que mire a la cámara.

-Lali, Lali. LALA.

"Lala". Así no me dice él.

-Marian –dije abriendo mis ojos ante la sorpresa. –Estaba distraída. Decime, ¿qué pasa?

-Sebas nos está buscando, es para hablar sobre el video. Parece que tenemos que grabarlo mañana.

Si esto era cierto, no podía negarme. El trabajo estaba primero. Ya había asumido un compromiso. Pero y ¿mi novio? Benja sabe entender pero hace unos días que vengo dejándolo plantado. Tengo que recompensarlo de alguna manera.

-Lali, tu teléfono.

-¿Qué?

-Que está sonando tu teléfono, Lala. –me respondió tranquilo Mariano. -¿Vas a atender?

-¡Mi amor! –dije apenas escuché su voz al otro lado y me sorprendió que Mariano se haya ido de un segundo a otro, alejándose de mí.

-Así que mañana es mi día de suerte, hermosa. ¿Qué sorpresa me espera?

No sabía qué decirle. Haría todo lo posible por terminar las grabaciones apenas pudiese pero ya nos habían avisado que nos querían el día entero allá.

-Mi amor...- comencé. –recién...

-¿Qué pasó? Recién ¿qué?

-Que recién nos avisaron que mañana tenemos que grabar todo el día y me siento mal porque te estoy fallando, mi amor.

Escuché lanzar un suspiro a mi pobre novio.

-¿Me perdonas?

-Lali, está todo bien. Es tu trabajo. Lo entiendo. No te preocupes.

-¿Entonces por qué me hablas así?

-¿Así cómo?

-Cortante. Frío. Mi amor, no podes enojarte por esto. Te lo voy a recompensar. Cenemos hoy. Ahora apenas salgo de acá. ¿Queres?

-Te aviso. Si?

Y sentí una angustia terrible apenas colgó.

Recién era mi primera semana de grabación y estaba pasando esto. Todo era tan extraño. Creo que el motivo es porque durante el A Bailar Tour, Benja siempre me acompañó cuando pudo, ya sea en viajes, o presentaciones y yo a él también en sus proyectos. Ahora estaba tan enfocado a la música. Tal vez, era tiempo de pensar.