NO ME GUSTAN LOS COMENTARIOS

3.1K 115 31
                                    

El último...  ahora sí, ¡BOMBA!

¿Qué les pareció?

Les repito, vean los videos de la genia de Pau Bass!! 

-----------------

POV LALI

-Me parece -intenté separarme pero Marian seguía con sus manos bajo mi blusa sin intención de salir de ahí -que nos están llamando... -coloqué ambas manos alrededor de su cuello safándome a duras penas y con la respiración entrecortada.

-Mierd...

-Sh -lo callé con un último beso mientras él me acomodaba la ropa. De igual modo estaba segura de que me encontraba super despeinada y él con maquillaje mío en su cuello. Una escena bastante graciosa, al menos para mí. -Hormonas 3 - y vos seguís en cero viejo loco.

Comencé a jugar nerviosa enrededando entre mis dedos unos mechones de cabello hasta que los que faltaban se unieron a nosotros.

-¿Estamos todos? -preguntó Angelita guiñándome un ojo.

-Sí. Dale, tanto apuro tenían, vamos saliendo entonces -Marian me tenía abrazada a mis hombros marcándome el camino derecho hacia la puerta de salida del Ópera.

-Uh, ¡qué carácter pegamos, viejo loco!

-El viejo loco necesita descansar e irse a dormir -comenté sin poder evitar reirme. Por suerte Marian se contagió y terminó riendo con todos. -Paren, ¿y Natalie?

-No, ella ya salió. Digamos que creyó que ustedes iban a tardar un rato más.

-¿Me estás jodiendo? -Marian susurró quejándose como un nene caprichoso y yo sólo me limite a tapar su boca con una de mis manos. No vaya a ser que escuchen y deduzcan algo. -¿Es joda no?

Juan, uno de los cuidas abrió la puerta y automáticamente los gritos aparecieron en eco. Todos, en fila salían y nosotros al final. Como siempre, custodiada por él.

POV MARIANO

Nos ubicamos en los primeros asientos, Lali del lado del pasillo esta vez porque por lo visto, se venía la fiesta de la mano de Franquito.

Me dediqué a mirar cómo bailaba con mi novia. Tenían una relación excelente de hermanos ficticios entre ambos, y hasta amaban la misma canción, una que hablaba de que un chofer tenía que parar el taxi, bah, siempre surgía la pregunta sobre qué corchos dice la letra. Las monjis aseguraban que era "yo yo yo te paro el taxi" y Angelita, en cambio creía que decía "cho cho cho fer te paro el taxi". En fin, el resultado siempre era el mismo: indignación.

No me importa eso ahora. Sólo quería llegar y estar con Lala.

-Disculpe señor, ¿le apetecería un babero? Están en oferta -bromeó Leti sentándose a mi lado. -Es divina, ¿no?

-Perfecta.

-¡Y qué te va a decir él! Qué pregunta la tuya, eh.

-Bue, eso no se puede evitar -Anita siempre era mi aliada. Fue la primera que promovió esto así que estaría agradecido por el apoyo.

-¿Y vos? ¿No bailas?

Negué con la cabeza dejando que Lali tomara mi mano suavemente entrelazando nuestros dedos sin dejar de bailar.

-Y bueno, si Mahoma no va a la montaña... -abrí mis ojos como platos cuando comenzó a bailarme al ritmo de "Worth it" provocándome. Bueno, en realidad, no lo hacía a propósito, sólo que ella en sí me hacía sentir como un adolescente otra vez.

Poco a poco, la combi iba quedando vacía, terminábamos haciendo casi un tour por todo Buenos Aires, todos vivíamos en lugares bastante distantes uno de otros.

Tu tierra y tu cieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora