En su mundo; t ©

Capítulo 3 - ¡Entra a escena: Uzumaki Naruto!

El Anbu la dejó en su habitación. Entró y dejó sus zapatos para subir el escalón de madera y entrar a su nueva casa, siempre había querido hacer eso. Su habitación era igual a la de sasuke en ese entonces, sólo que la cama estaba del lado derecho y el ventanal del lado izquierdo. Dejó su ropa en su cama y se dio una ducha.

Cuando salió, se vistió con una camisa grande que había allí y se dirigió a la cocina, buscó hasta que encontró un ramen instantáneo, rió al recordar a cierto rubio y se lo preparó. Cuando terminó, fue directamente a la cama y calló dormida.

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-Hey, buenos días.

-Nee, gracias por despertarme N, Ohayo.

Touya se levantó y se estiró, mirando el amanecer desde su aldea favorita. Se metió a la ducha y cuando salió se vistió con la misma ropa que ayer. Sólo que sin el porta Kunais ni la venda. Salió de su casa y miró los tejados de las casas, sonrió maliciosamente.

-N, ¿crees que pueda saltar en los tejados de las casas?

-Claro, yo te ayudo.

La niña, emocionada, comenzó a saltar de tejado en tejado, sintiendo el viento en su cara y una enorme felicidad de estar allí. Una vez llegó a la academia, se dedicó a buscar a Iruka, desde ahora, SU Iruka-sensei.

Caminó entre los pasillos de la academia, mirando todo con atención y admiración, era todo igual que en el manga y anime. Se distrajo en sus pensamientos y por accidente se golpeó con alguien.

-Gomen- escuchó esa voz tan conocida para sus oídos -Oh, eres tú Touya, ¿no? Mi nueva estudiante.

-Sí, así es, hola Iruka-sensei- dijo sonriente, sintiendo un cosquilleo al mencionar "Iruka-sensei"

-Que bueno encontrarte, la clase está por comenzar, acompáñame- el maestro comenzó a caminar muy animadamente mientras su nueva alumna caminaba detrás, ya comenzando con el nerviosismo de todas las miradas sobre ella, y con el miedo de hacer alguna prueba de ninjutsu o taijutsu. De la nada su maestro se detuvo -. Es aquí, cuando te llame, entra, por favor- lo único que pudo hacer Touya, fue asentir, sintiendo sus mejillas rosas desde ya.

Escuchó detrás de la puerta un -¡Buenos días estudiantes! Hoy tenemos una nueva alumna, pasa, por favor.

Touya deslizó lentamente la puerta y comenzó a caminar dentro, sentía todas las miradas sobre ella y eso la hacía querer que en ese momento el mundo la tragara, estaba más que segura que estaba más roja que Hinata cuando Naruto está cerca. Se colocó junto a Iruka y este habló -Su nombre es Touya, espero que todos la acepten- dijo su maestro inocentemente.

La peliblanca levantó la mirada y dio una rápida y pequeña sonrisa, esa era su forma de saludar. Se dedico a ver a los 9 novatos (en ese entonces) y a los demás, que nunca llegó a conocer ya que eran de relleno.

-Puedes sentarte...- comenzó Iruka, Touya rápidamente con la mirada buscó a Naruto y, como pensaba, estaba sentado en una banca completamente solo. También buscó a Sasuke y este estaba sentado junto a Sakura e Ino. "Por eso no están los tres juntos" pensó Touya -. Junto a Naruto- dijo Iruka, señalando el lugar vacío y posando su otra mano en la espalda de la niña, brindándole confianza.

El Rubio miraba desinteresado por la ventana, y al escuchar su nombre y a la chica dirigiéndose junto a el, maldijo en voz baja, genial, alguien más que lo trataría como monstruo.

Touya se sentó junto al rubio, contendiendo las ganas de abrazarlo y gritar como toda fangirl. Comenzó la clase y ella prestó mucha atención, quería ser buena kunoichi.

Después de unas horas de clases, era hora del receso, los chicos salían animadamente y algunas chicas comenzaban a acosar al emo vengador. Touya pensó que ese era su momento.

-Hola- dijo amistosamente, tendiéndole la mano al rubio junto a ella -Soy Touya, ¿tú eres Naruto, no?

El ojiazul pareció sorprenderse de que la nueva chica le hablara, y, de un momento a otro, ya tenía su sonrisa característica en su cara -¡Hola! ¡Yo soy Uzumaki Naruto, y seré el próximo Hokage'ttebayo!

Touya escondió toda la ternura que sentía el ver Naruto siendo un niño todavía y escuchar su característico "dattebayo" -¿Así que quieres ser Hokage, eh?

-¡Sí! ¡Así la gente tendrá que reconocerme y mirarme hacia arriba!- decía el niño emocionado.

-¡Mhm!, ¡Da lo mejor de ti, Naruto! ¡Conviértete en el mejor de los Hokages y muéstrame como salvas al mundo!- dijo Touya, sintiendo un aire de Rin cerca de ella.

-¡Sólo mírame, me convertiré en Hokage, es una promesa!- decía animado el Rubio, por fin tenía a alguien que lo apoyaba y no lo trataba como monstruo.

-¡Bien, te vigilaré, eso también es una promesa!- dijo Touya, extendiéndole el puño, a lo que Naruto de inmediato respondió.

-Oye, ¿desayunarías conmigo?- preguntó un poco temeroso a la respuesta.

-Claro- respondió la peliblanca, caminando junto con el uzumaki a la salida, bajo la mirada de algunos estudiantes.

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Touya cayó exhausta en el suelo de su casa, había terminado ese día de escuela, había memorizado todo, y después de clases, Natural y ella entrenaron, los resultados de entrenar la puntería con shurikens y kunais, el elemento viento, fuego y agua, el taijutsu, el puño suave, el sharingan, el Banshō ten'in y el shinra tensei y el clones de sombras, estaba reflejado en lo cansada que estaba la pobre. Era demasiado para una niña de 11 años que nunca hacia nada, pero, sorprendentemente, había logrado perfeccionar y controlar todo lo anteriormente mencionado.

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Exactamente una semana había pasado desde que Touya había llegado al mundo de Naruto. Había estado memorizando todas las clases y entrenando mucho más, mejoró bastante el taijutsu, aprendió jutsus de transformación, de invisibilidad y de teletransportación mental. Aprendió también los importantes "ocho trigramas" del clan hyūga. Había perfeccionado su control de chakra, haciéndolo fino. También controló los elementos de tierra, madera, hielo y eléctrico y descubrió que ella tenía su propio Kekkei Genkai, por así decirlo.

Podía hacer algo parecido a un Susanoo con pixeles verdes, sí, controlaba los pixeles. Era parecido también al Kekkei Genkai del Clan Hōzuki, podía convertir su cuerpo en Pixeles, e, incluso, podía dispersar los pixeles en amplias zonas, y se podían convertir en clones, y, al juntarse de nuevo, recolectaba información, algo parecido al Kage Bushin.

En ese momento ella se encontraba frente a su espejo, observando su banda de Konoha. El día pasado habían sido los exámenes y ella había aprobado, no estaba preocupada por Naruto, ya que sabía que el aprobaría. Colocó su banda en su frente y dejó caer su flequillo, tapando un poco la banda. Salió de su casa y se dirigió a su salón de clases.

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Gracias por el apoyo, novia del canela pasión👌🏻😂❤️