Capítulo 10 - Exámenes Chunnin: Gaara, Temari y Kankuro

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*IMPORTANTE, LEER AL FINAL*

Han pasado algunos días después de que regresaran de la misión en el país de las olas, Sasuke y Touya se encontraban sentados sobre la rama de un árbol.

-Es raro que estemos juntos'ttebane, normalmente eres el tipo asocial que odia a todos- habló Touya.

-Hmp. Eres muy molesta.

-¿Entonces por qué estás conmigo? Puedes irte si quieres- lo miró de reojo sonriendo.

-¿Yo? Yo llegué aquí primero, vete tu.

-Eres un infantil- rió Touya moviendo sus pies en el aire.

Suspiró y siguió disfrutando ese momento tan tranquilo. Sentía paz, todo estaba tan calmado, callado, sólo se sentía el viento en la cara y el sonido de las hojas moverse. El tronco estaba frío y cómodo. Disfrutaba estar allí, además con Sasuke, sabía que el no se quería ir y no estaba incómodo con ella, el silencio que había entre ellos tampoco era incómodo, más bien, los dos parecían disfrutar mucho el momento.

Todo ese momento se arruinó al oír los ruidosos pasos de Naruto, Sakura y el grupo de Konohamaru, además de sus gritos. Como si fueran hermanos, Sasuke y Touya hicieron una mueca y se miraron entre si, para después mirar de nuevo a los escandalosos.

Konohamaru tropezó por error con Kankuro, y este, lo tomó de la bufanda amenazadoramente. El castaño estaba a punto de golpear al niño, cuando los amigos del árbol tiraron una roca, haciendo que el mayor soltara al nieto del tercer hokage.

-¿Cómo se atreven?- pregunta enojado el marionetista.

-Por lo visto son mayores que les gusta pelear con los niños- le contestó Sasuke.

El grupo de konohamaru, Naruto y Sakura se sorprendieron por verlos allí -¡¿Sasuke?!- preguntó la fangirl del emo.

-Grandioso, otros debiluchos que me molestan- bufó el castaño.

-Pareces un niñito llorón- se burló Touya riendo. Sasuke sonrió ligeramente.

-Agh, tontos, bajen de ahí, ustedes son el tipo de personas que más odio; con actitud que no es más que palabras- se seguía quejando. Pero ahora, bajó a su marioneta de su espalda.

-¿Qué? ¿Vas a usar a Karasu por esto?- preguntó Temari.

-Kankuro, retrocede- la peliblanca reconoció esa voz de inmediato; Gaara.

-O-oh... Hola Gaara- saludó Kankuro con miedo.

La ojiazul asomó su cabeza para poder ver hacia la otra rama, en la que se encontraba Gaara parado -¿O acaso ya olvidaste la razón de por qué estamos aquí?

-Oh... Lo sé.... Pero es que ellos me retaron. Ellos empezaron esto, en serio, yo no suelo... Sabes que soy mu-

-Cállate... O te mato.

-¡Que serio! Me das malas vibras'ttebane- se quejó la peliblanca sacudiendo su cabeza, sintiendo un escalofrío por lo fría que era la voz de Gaara, y por lo seco que era.

Gaara miró curioso a la chica. -Oh, si claro, me salí de control, lo lamento Gaara, perdóname, de verdad lo lamento.

-Me disculpo por... Por los problemas causados- se disculpó el pelirrojo. "Ella al parecer no me tiene miedo... Que raro, curioso" pensó Gaara. Bajó del árbol y se colocó frente a sus hermanos -Andando, no venimos aquí para jugar.

-Claro, si, entiendo, vamos- dijo Kankuro comenzando a caminar.

-¡Esperen, oigan!- les llamó Sakura.

En su mundo; t ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora