¿Quieres otro helado?

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Angelica.

Recuerdo que estaba vigilando a Isabella, cuando me enteré de la fiesta de Daniel, ya estaba pensando en que hacer para colarme, cuando recibí una llamada de Isabella. Ella misma me estaba invitando, debo admitir que me sorprendió ese gesto. Es segunda vez que me sorprende.

La primera fue en el parque, cuando le mentí con lo de mi "novio", ni siquiera tenía uno. Pero sabía que así lograría tenerla en mi manos. Pero ella me dio un helado, y luego dijo que le caía bien. Por alguna razón tenía emociones encontradas yo no estaba para tener emociones. Estaba para una misión y tenía que cumplirla. Pero... ¿Por qué aún no les avisaba que la había encontrado?.

Estaba en la fiesta cuando alguien me tomó con fuerza y me apartó de los demás.

-Alejate de ella, te lo advierto. - me decía el joven Caleb.

- Ella me invito - le dije.

- Lo se, pero alejate de ella a partir de hoy - me gritó Caleb.

Mierda se le veía enfadado, claro que le tenía miedo. Él es superior a mí, puede matarme si le da la gana. Pero yo tenía una misión que cumplir.

Una vez pude entrar a la fiesta, la vi a ella bailando con un chico, que hasta donde investigué se llama Santiago.

Ella me vio y me sonrió. Y algo dentro de mi dolió. (Concentrate Angelica, tu no puedes sentir nada).

Ella fue por algo de tomar.

- ¿Que buscas con Isabella? - me preguntó Santiago.

Lo miré un poco más de lo normal. ¿Por qué el tendría que preguntarme algo así?.

- Soy su amiga, no buscó nada - le dije tratando de sonar natural.

- No te creo Nada, pero más te vale no hacerle daño. - Me dijo él.

¿Acaso él sabía algo? ¿Quién será verdaderamente Santiago? Esto era algo de lo que tenía que investigar.

Nos quedamos mirando, hasta que él maldijo y fijó su mirada en una dirección.

Volteé a mirar y era Isabella Cantando. Se le veía triste, tenía una voz bella y esa canción era algo triste. Volteé a mirar a Santiago pero este ya no estaba a mi lado.

Fue cuando se hizo el silencio y sólo se escuchó una fuerte cachetada. Miré y vi a la madre de Isabella pegándole otra cachetada.
Entonces vi a Daniel, a Caleb y esperen un momento... a Santiago, era Santiago quien se llevaba a Isabella.

(No vayas tras ella, no vayas tras ella) me repetía en mi cabeza. Pero sentía ira, me dio coraje que le pegaran. Y cuando me di cuenta ya estaba abriendo la puerta del coche de Santiago.

Isabella se lanzó a mis brazos y empezó a llorar. Sentí que algo se quebraba en mí. Comencé a acariciarle el cabello tratando de calmarla, Santiago me dio una advertencia con la mirada y después arrancó el carro.

Ella no paraba de llorar, ver a alguien como ella llorar, era sumamente impresionante, no era digna de eso.

Isabella logró calmarse un poco y pidió ir a los columpios. Así que él la trajo al parque.

Me bajé del auto y compré tres helados (¿Que estas haciendo tonta?) le di uno a Isa y otro a él.

(Como alguien se enterará de la mierda que acabó de hacer me matarían) suspire.



La Resistencia. (Duología Inmortal.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora