Surviving to a Broken Heart {JDBM y tú}

Capítulo 78.

El tiempo pasó más rápido de lo que parecía...de repente me encontraba sola con mamá juntando los platos y ayudando a lavar las tazas usadas en mi "bienvenida".

Brooke & Chris se fue por ahí... a un "por ahí" que ni ellos mismos estaban seguros donde quedaba pero su idea era estar solos y tranquilos...

Kate se pasó a la casa de mi vecino, me había dicho que nada era igual entre ellos desde hace tiempo... que en realidad era Justin el que estaba cambiado, quizás frío, quizás indiferente, las sonrisas ya no le salían por sí solas y conseguir que se riera era realmente difícil. Cuando le pregunté desde cuando estaba así me contestó que un poco antes de que me fuera a NY.
Fue cuando recordé la ruptura tan abrupta de nuestra amistad. Quería creer que no tenía nada que ver una cosa con la otra, que había algo más, algo que ni siquiera a su novia dijo. No podía agarrarle bronca a Kate, ella era la menos culpable de todos...

Aún así me quedé con muchas ideas dando vueltas en mi cabeza cuando mi amiga abandonó mi casa.
Tomé mis valijas que estaban esperándome a un lado de las escaleras y subí a mi cuarto por primera vez después de tanto tiempo. Todo estaba ordenado tal y como me gustaba... había un aroma especial a rosas que inundaba mi respiración al cruzar el umbral de la puerta, me encantaba. Mamá y Brooke por lo visto pusieron manos a la obra.

Me dirigí a mi escritorio y divisé lo único que no combinaba y rompía todo el cuadro perfecto de mi habitación... en mi jarrón a un lado de mi portalápices había una docena de rosas blancas marchitas, recordé a mi admirador secreto, aquel que se esmeraba por hacerme llegar todos los días una rosa blanca. Me sorprendió el hecho de que todas las rosas estén marchitas como si las hubiera mandado hace días, y no hubiera enviado ninguna recientemente... a un costado había un sobre blanco de tamaño mediano, cerrado boca abajo. Traté de recordar si me había enviado otra carta aparte de aquella que había leído días antes de ir a Nueva York. No recordé nada, era otra carta.

Tomé el sobre en mis manos y me senté en el borde de la cama para leerla con tranquilidad.
"Hola _____(ta) " empezaba con su perfecta y prolija letra cursiva.
"La verdad me siento decepcionado, sé que no te importaría y si ni siquiera notarías mi ausencia en tu vida, incluso dudo que leas esta carta y todavía más que vaya a verte volver pero ésta es la única dirección que conozco para encontrarte y confío en que tu mamá o tu hermana te hagan saber de la existencia de esta carta... pero mucho me temo que me hice una imagen diferente de tu... te idealicé, me armé mi propio rompecabezas tuyo con mis propias piezas, las que me convenían, las que creí que encajaban en tu personalidad que tanto tiempo admiré...sólo para equivocarme. No sabía que estabas con ese cantante, ni siquiera que habías terminado con Ryan, porque supongo que fue así... Lo siento... te creí alguien diferente, diferente a las demás chicas... pero supongo que no todo es lo que parece.
Cuidate ______(ta).
Lamento nunca poder conocernos... quizás nos crucemos en la calle, levantaré mi vista, fijaré mis ojos en los tuyos y seguiré adelante sin que jamás sepas quien fui yo..."

¡Genial! ¡Otro más a quien decepcionaste! Era una de las pocas personas que quizás decía la verdad acerca de él y lo hecho todo a perder...

Me tiré de espaldas sobre la cama y me tapé la cara con la almohada. Permanecí unos minutos en esa posición hasta que los músculos se me entumecieron al no hacer movimiento.

Recordé mi cuaderno, aquel que había llevado a Nueva York y que tan poco uso le había dado... lo busqué entre mis cosas en la valija aún armada y volví a la cama. Lo último que escribí, algo sobre mi relación con Jason, algo como: "El amor volvió a golpear a mi puerta, recordó mi dirección... pensé que la había olvidado"

Dejé una hoja en blanco y continué con algo tan diferente como el blanco del negro.

"Primero Ryan, después Justin, le siguió Jason y ahora a este chico del que no sé ni su nombre... ¡ni siquiera a los desconocidos dejo de herir! ¡Dios! ¿Por qué me pasa esto? ¿Acaso no tengo derecho a amar y a ser amada una vez en la vida sin que eso termine siendo un terrible desastre para alguno de los dos? ¿Sin que ambos terminemos siendo infelices? Ahora ya no me lo merezco... ¿Pero antes? Antes de la vuelta de Nick, antes de enamorarme tan idiotamente de Justin, antes de jugar con Ryan, incluso antes de destrozar a Jason... Si pudiera volver el tiempo atrás, evitaría aquella mudanza que desencadenó todo esto...
El amor es algo demasiado grande, demasiado importante, es demasiado... para mi existencia... será mejor tomarlo de mi corazón, hacer un bollito cual pedazo de papel y arrinconarlo en el lugar más oscuro del tacho de basura que es mi memoria. Sólo así dejaré de sufrir, sólo así dejaré de lastimar."

Octubre llegó a mis días, el frío cayó sobre California de una forma extraña, era recién octubre para tanto frío propio de diciembre... ¡las cosas que logra el calentamiento global! Recuerdo que estaba tomando unas chocolatadas con Caitlin hablando de cualquier cosa para distraernos de nuestras absurdas y desgraciadas vidas cuando el timbre de casa sonó... para mi pesar me levanté de entre las frazadas que me cubría en los sillones y fui a abrir...

Me apresuré con la idea de volver al lado de la chimenea y al abrir la puerta sentí el frío cortar mi rostro mientras se congelaba en una expresión de completa sorpresa... estaba de espaldas pero podría reconocerlo aún debajo del enorme abrigo negro que lo cubría... se giró, nuestras miradas se cruzaron y el frío recorrió de nuevo mi alrededor al tiempo que un escalofrío bajaba desde mi nuca...