Capítulo 100.

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Jason rió al ver mi cara de confusión... la verdad me costaba sacar algo en limpio de todo lo que había pasado hacía unos minutos. O se trataba de algo insignificante que yo había pasado por alto o era algo demasiado complejo como para entenderlo de una vez, ¿me estaré volviendo boba? Me detuve en esa opción un segundo, no recordaba haberme caído de la cama lastimándome la cabeza o algo parecido...

Jason volvió a reír y ya me estaba desesperando.

Tu: ¡Cuéntame! (Le hice puchero a ver si así aflojaba)
Jason: No me hagas así la boca que no respondo. (Amenazó acercándose un poco, ¿sería capaz? Ahora quería saber averiguar esto ya habría tiempo de tentarlo, podía llegar a ser muy manipuladora)
Tu: Ok, ¿pero me vas a contar? (Ahora intenté sonar sensual, me miró los labios y pensó)
Jason: Te vas a dar cuenta por ti misma. (Dijo aún mirando mi boca, de repente levantó sus ojos) - Lo único que puedo decir es que tu vecinito es un tremendo tonto y que lo peor es que tiene una gran suerte.

Jason clavó sus ojos en los míos, parecían tristes... yo necesitaba que me disipara dudas pero después de esas palabras había quedado más confundida aún... volví a pensar el asunto otra vez, ¿Justin un tonto? ¿Pero con suerte? No me cerraba.

Tu: Te entiendo menos.
Jason: No te preocupes. (Apoyó su espalda en el asiento) - Si tiene que pasar te vas a enterar.
Tu: Entiendo menos. (Murmuré y él rió de nuevo)

Llegamos al "Holiday Inn" y al ver tan majestuoso edificio me sentí satisfecha al cumplir con mi trabajo de elegir hotel para Jason. En ningún momento pensé que sería demasiado caro para él, de hecho creo que pesó más mi preocupación por que se sientiera cómodo que el cuánto podía salir una habitación por noche, por lo visto lastentación no pareció molestarle.

El un buen hotel, supuse que estaría a los que él estaba acostumbrado, trabajaba en una agencia de viajes podía pagar algo como esto.

El taxi se detuvo, estacionando al frente de las grandes puertas de cristal que mostraban la entrada al hotel, Jason bajó antes que yo rodeando el coche por detrás para abrirme la puerta aún antes de que llegara el botones. Me tendió una mano mientras bajaba y fue cuando entrelazamos nuestros dedos.

Sacaron su maleta de la parte trasera del auto y un par de hombres vestidos con chaquetas color bordó y sombreros graciosos nos guiaron hasta la recepción donde nos recibieron con mucha amabilidad. Yo la verdad nunca había tenido la oportunidad de entrar a esta clase de hoteles, en realidad a ningún hotel ya que en mi familia no acostumbrábamos salir de vacaciones a un lugar donde la casa de algún familiar no nos esté esperando.

Tu: ¡Te quedás por quince días! (Dije más feliz que sorprendida cuando escuché que reservaba la habitación por ese tiempo)
Jason: Me tomé vacaciones sólo para venir a verte. (Sonrió al tiempo que la recepcionista le entregaba una llave dorada que pendía de un fino cuadrito de madera al botones) - Pero si quierés que me vaya antes...
Tu: ¡No digas eso Jason! (Lo interrumpí) - Si fuera por mí me gustaría que te quedes y no vuelvas a Londres. (Me sonrió ampliamente)

Nos dirigimos al ascensor tomados de la mano, seguíamos al botones quien tenía la llave y sabía el número de habitación que le tocaba a Jason.

"Habitación número 275" dijo el hombre de sombrero gracioso mientras abría la puerta, entramos y todo era un sueño.Las paredes cubiertas por un papel tapiz color agua, la ropa de cama combinaba el mismo color con puntillas blancas, las cortinas eran de un tipo de tela muy fina y delicada prácticamente transparentes y sobre la cama descansaba un pequeño bolso de tela que contenía jabón, champú y acondicionador, también había un par de toallas con el logo del hotel.

El botones dejó la habitación feliz de haber recibido una propina de cincuenta dólares por parte de Jason... me pregunté si aceptaban botones mujeres, si las propinas eran tan generosas acababa de encontrar mi trabajo ideal.

Recorrí la habitación curioseando cada detalle hasta llegar al balcón, tenía la hermosa vista de un día a completo sol en California, ya eran las cinco y quizás eso hacía que abundaran los tonos cálidos en aquel cielo.

Jason: Ahora eres tu la que metiene que dar un tour. (Dijo comprobando si la tele estaba en condiciones)
Tu: (Me reí) -Con gusto voy a ser tu guía turística. (Respondí mientras apoyaba mis antebrazos en el barandal del balcón volviendo mi cuerpo hacia el interior)

Él seguía inspeccionando todo, ahora el dvd, yo la miraba atenta y feliz de tenerlo ahí otra vez, al alcance de la mano. Lanzó una pequeña risa y eso llamó mi atención haciendo que cortara los pensamientos que en ese momento rondaban mi cabeza, tales como: quiero disfrutar al cien por ciento estos quince días, sentirme feliz al menos hasta que vuelva a Londres.

Jason: Mirá lo que se olvidaron los antiguos huéspedes. (Levantó el estuche de una película en dvd pero no logré reconocer la portada desde mi ubicación, me acerqué) - Todopoderoso. (Pronunció cuando sostuve aquel estuche en mis manos)

Era esta películas la que estábamos viendo la noche en la que lo había confundido con Justin, las imágenes y las sensaciones me invadieron de repente provocando escalofríos recorriendo toda mi espina.

Inconscientemente y aunque no la había visto en realidad, esa película había quedado grabada en mi mente, como un recuerdo... no sabría decir si bueno o malo, pero era un recuerdo al fin.

Tu: Je je. (Fue todo lo que pude decir)

Lo escuché suspirar profundamente, levanté mi mirada y descubrí que me estaba viendo lo suficientemente cerca como para lograr que me ruborizara al cruzar nuestras miradas, él hizo caso omiso al color rojo de mi rostro.

Jason: ¿Qué te parece si la vemos? La última vez no pudimos... (Dijo con una gran sonrisa y con esperanza en sus ojos)
Tu: Claro. (Respondí sencillamente y colocó el disco en la lectora del dvd)

Me senté en un lado de la cama apoyando mi espalda sobre la almohada que había colocado especialmente para esa función.

Estaba nerviosa y ese nerviosismo se acrecentó cuando Jason se acomodó del lado contrario a mí en la misma posición.

Los nervios me invadían porque toda la escena se venía repitiendo como copia exacta de aquella noche: sola en una habitación semi iluminada con Jason viendo Todopoderoso, con la cabeza apoyada en su hombro y las manos sobre mi abdomen, él pasaba su brazo izquierdo por detrás de mi cuello y con su mano colgando de mi hombro.

¿Qué significaba esto? Si en realidad significaba algo más que una simple sesión de películas con un amigo. Quise sacar de mi cabeza la idea de que se tratara de alguna nueva oportunidad que me daba el destino...

Surviving to a Broken Heart {JDBM y tú}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora