Cap. 9

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_ Ven, que te presento –me acerco Tomo y veo en la pantalla del ordenador a una chica con el pelo corto y sonrisa amable, me recuerda su sonrisa a la del guitarrista, va llena de tatuajes-. Vicki, ella es Mía, Mía, ella es Vicki, mi mujer.

_ Encantada.

_ Igualmente. ¿Cómo se portan los chicos contigo?

_ Más o menos bien, supongo que no me puedo quejar por ahora.

Menos de Shannon, pero bueno, se disculpó por eso y no ha vuelto a intentar nada, aunque no me extrañara, más que nada porque cada noche se tira en su camerino a una, hay veces que a dos, prefiero no pensar las cosas que hará ahí con dos chicas a la vez. Pero a mí no me ha vuelto ni a tocar que es lo que me importa. Me resulta increíble la facilidad que tiene para conquistarlas, con una mirada y una frase todas aceptan, es impresionante.

No es que con el resto me lleve mal, nada de eso, Tomo es un sol, tremendamente dulce y divertido, la verdad es que ahora es con el que más hablo (siempre que no está durmiendo, cosa que hace la gran parte del tiempo). Pero me veía mucho más parecida a Shannon, sentía más afinidad entre los dos. Emma el poco tiempo que está libre resulta ser una persona muy amable, hemos congeniado bastante bien, aunque está un poco obsesionada con la moda, algo que a mí no me interesa lo más mínimo. Luego está Jared, pero él es un caso aparte, hay veces que es agradable, pero de golpe algún circuito se le cruza en la cabeza y es la persona más desagradable de este mundo. Me duele un poco ver que eso solo le pasa conmigo, con el resto de las personas es siempre alegre y amable, siempre se ríe de todo y consigue con tonterías que el resto también lo haga, pero supongo que no le caeré bien.

_ Cualquier cosa me lo dices y le echaré la bronca a mi marido y le obligaré a que haga lo mismo con el resto, tú sola con tanto hombre descerebrado alrededor... -me río por le comentario de Vicki, me recuerda a su marido, es igual de alegre y sencilla-.

_ Bueno, tengo a Emma por aquí siempre cerca.

_ Dirás que tienes el móvil de Emma por aquí siempre cerca -dice el batería a lo que respondo riéndome-.

Continuamos hablando un poco más, pero constantemente nos cortamos porque nos echamos a reír las dos mientras Tomo pone caras graciosas.

_ Te tengo que enseñar el dibujo que me ha hecho, una vez este escaneado Peque ha prometido regalármelo, tienes que buscar hueco en la casa, en el recibidor molaría.

Me río por el comentario, me parece que ya me he quedado con ese mote, Shannon y Tomo siempre me llaman así. Tras una corta charla me despido de su mujer y me voy a seguir con mi trabajo, tengo que retocar un poco las fotos, no me gusta nada agresivo, solo aclarar algunas zonas y oscurecer otras, nada más, si hago ajustes me gusta que sea con la cámara, no con el Photoshop.

_ ¿Todo bien?

_ Sí, pero echo de menos a Vicki y a los niños.

_ No sabía que tuvieras hijos.

_ No, no son hijos, tengo cuatro perros y dos gatos, por ahora.

_ Vale, en ese caso prométeme que me los presentarás.

Tomo se ríe por mi comentario.

_ ¿Te gustan?

_ Me encantan.

El guitarrista saca el móvil y empieza a enseñarme mil fotos de sus animales encantado, parece un padre que enseña fotos de sus hijos recién nacidos, pero para él son como hijos, está enamoradísimo de sus animales y su mujer. Yo las miro feliz, siempre me han encantado los animales, son una de mis mayores debilidades.

Do or die -COMPLETADA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora