Cap. 7

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Llegó el día tan esperado, esta noche será el primer concierto de la gira. Los chicos están entusiasmados, van corriendo arriba y abajo contentos, Jared va calentando la voz desde primera hora de la mañana, lo cual al principio era maravilloso, tiene muy buena voz, pero después de tanto rato es insoportable. Ahora entiendo porqué Shannon tiene un bote de tapones para los oídos tan grande.

Vamos en las furgonetas camino al estadio donde van a actuar, es enorme. Conforme vamos llegando se empieza a ver la cola de fans esperando para entrar, y eso que aún quedan bastantes horas para que empiecen. Entramos al recinto sin que nadie se de cuenta de quienes somos, pero es normal, somos unos coches grandes con los cristales tintados, no se ve nada desde fuera.

Me pongo a mirar nerviosa todo, hay dos chicos esperando a que les de indicaciones, son los dos fotógrafos de apoyo que han contratado en esta ciudad, van con la tarjeta que indica que son staff colgando del cuello. Nada más verme se me quedan mirando como si fuera un bicho raro, pero es normal, tengo que llevar una camiseta identificativa del grupo, para que todos los fans sepan que trabajo para ellos, pero eso no es lo que miran extrañados. Voy con una camiseta gigante, y cuando digo gigante es que una XXL de hombre y talla americana, son las únicas que han llegado. Inteligente de mí esta mañana cuando me la han dado he decidido cortármela, entre otras cosas porque me venía por las rodillas y las mangas (que se suponía que eran cortas) por debajo de los codos. Por lo que ahora voy con una camiseta con los costados demasiado abiertos porque se me ha ido la mano con las tijeras, y como no, se me ve el sujetador.

Me acerco nerviosa a mis fotógrafos de apoyo y les indico lo que busco, he visto que hay varias colas diferentes, así que las reparto entre todos. Puedo ver que uno de los fotógrafos ve a Jared y feliz levanta la cámara, antes de que me echen la bronca le indico que a los chicos no les pueden hacer fotos, me sabe mal, se ve que le hacía ilusión, pero las normas son las normas. Me dirijo con los dos fotógrafos afuera mientras el grupo va a empezar los ensayos.

Voy paseando mirando desde mi cámara, me gusta esto, todo el mundo está animado, cantando y riendo esperando a que empiece el concierto. Veo que mucha gente lleva pintada la cara y los brazos, reconozco algunos de los símbolos que llevan, son los mismo que llevan los chicos en los brazos tatuados. Me asombra ver que algunos fans hasta los llevan tatuado, supongo que significaran algo.

Cuando ya he acabado de fotografiarles me dirijo hacia los camerinos, ahí es donde está todo el mundo. Nada más llegar decido beber un poco de agua, tengo angustia, supongo que será del calor, aunque llevo desde esta mañana así, me he despertado con ganas de vomitar. Los chicos están encerrados en su propio camerino, el resto están arriba y abajo nerviosos, menos Emma que sorprendentemente está tan tranquila bebiéndose un té, no me lo puedo creer. Me siento con ella, creo que es la primera vez que la veo sin el móvil en la oreja o sin papeles alrededor suyo.

_ ¿Nerviosa? -me pregunta con una sonrisa en la cara-.

_ Tengo ganas de ver el concierto, más que ganas tengo mucha curiosidad.

_ Te prometo que ya he hecho el pedido y he dicho que sea urgente, en un par de días tendrás una camiseta de tu talla, no entiendo cómo ha podido pasar esto.

_ No te preocupes, he llevado cosas peores -le digo encogiéndome de hombros-.

_ Te estoy viendo todo el sujetador.

_ He trabajado de camarera en discotecas, estoy segura que en esa época se me veía todavía más sujetador que ahora.

Suelta una pequeña carcajada por el comentario, justo en ese momento sale Jared del camerino entrando a nuestra habitación, se acaba de afeitar y va secándose el pelo con una toalla. No puedo evitar mirarle el torso, va sin camiseta, ¿cómo a su edad puede estar así de bueno?

Do or die -COMPLETADA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora