Cap. 13

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El tiempo pasa y todo sigue igual, Shann es un encanto, al igual que Tomo (que no puedo describirlo de otra forma que no sea adorable), están todo el día de bromas y juegos, gracias a ellos los viajes se hacen amenos. Algunas veces no les entiendo, tienen una relación muy extraña y hay veces que con sólo mirarse se empiezan a reír y nadie entiende nada. Pero parece que es muy normal en ellos según me han dicho, se ve que son amigos desde hace muchos años.

Con Emma parece que he entablado una buena amistad, es muy simpática, y aunque al principio me parecía que no teníamos mucho en común a las dos nos encanta el cine y el arte, así que de vez en cuando vemos alguna película juntas o hablamos, la verdad es que es más divertida de lo que pensaba.

Luego está Jared, que cada día es más insoportable, ya ha llegado un momento en que no podemos estar juntos en la misma habitación más de diez minutos, parece que le moleste mi simple presencia, es como un perro al que le molesta mi olor o algo parecido, porque hay veces que me chilla sin siquiera haber abierto la boca. Luego están esos diez o veinte segundos en los que es amable y divertido, pero como ya he dicho, solo son unos segundos en comparación con las horas y horas en las que es insoportable. La verdad es que no entiendo cómo lo soporto, nunca he sido una persona a la que se le conociera precisamente por el don de la paciencia, uno de mis múltiples defectos es ese. Pero es que es insoportable, yo no he hecho nada malo para que me trate así. Al principio era de vez en cuando, pero desde lo del embarazo fue a peor, después de enterarnos de que al final no estaba embarazada lo de ser un completo imbécil ha sido una constante.

Yo ya estoy que no aguanto, me está amargando la gira, ya llega un momento en el que me pongo nerviosa cada vez que le veo porque me da la sensación de que me va a decir algo, y sé que no voy a aguantar mucho más y acabaré explotando por mucho que sea mi jefe.

Ahora mismo estoy trabajando en mi habitación, así no tengo que aguantar al cantante ya que estoy segura de que estará en al sala de los sillones, adoro trabajar ahí, pero cuanto menos nos veamos mejor. Me acabo mi té y me levanto para fregar la taza y guardarla en su sitio, cada uno tenemos una balda con nuestras cosas. Cuando bajo las escaleras para volver a mi habitación me cruzo con la última persona con la que quería cruzarme, mi suerte es maravillosa, se ve que justo he pillado el momento en el que va a su habitación. Decido mirar hacia abajo e ir lo más rápido que pueda a mi cuarto, pero debido a la estrechez del pasillo es imposible bajar los peldaños sin chocar.

_ Joder, ¿siempre tienes que estar en medio?

Y con esa tontería llega el temido momento, noto como todos mis músculos se tensan cansada ya de ser pisoteada por este hombre. Levanto la vista conteniendo el aire, sé de sobra que tengo la cara roja por la ira, los puños cerrados y la boca apretada, pero es que si no digo algo creo que  le mato, ya no puedo más, llevo aguantando demasiado tiempo.

_ Vale, ¿te pagan más o algo por ser un gilipollas?

Le pregunto gritando como una energúmena mientras él sigue andando como si tal cosa a su cuarto mientras yo le sigo encolerizada.

_ ¿Cómo?

_ No sé, ¿estás intentando que te den el premio Guiness por el cantante más capullo o algo parecido?

_ Ya tengo dos premios Guiness, no necesito más -me espeta con fanfarronería riéndose, perfecto, ahora se me pone chulo-.

_ ¿Dos? ¿Qué son al mayor imbécil y engreído?, no, al hombre más soberbio y egocéntrico del mundo.

_ ¿Perdona? ¿A santo de qué viene esto?

_ Dímelo tú a mí, ¿es por algo mío? Porque desde que empezamos la gira me has tratado como a una mierda, has sido grosero, maleducado e incluso hiriente conmigo, y yo no creo que haya hecho o dicho nada para merecérmelo. Desde que llegué he intentado ser amable, vale si no te caigo bien, lo acepto, no puedo gustarle a todo el mundo, pero por lo menos no me insultes, no me trates así, ignórame y ya está.

Do or die -COMPLETADA-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora